Capítulo 68

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Dos días habían pasado cuando Flor le llamó a Silvia para que la viniera a visitar.

-FLOR: ¿Entonces?
-SILV: vale, en 40 minutos más o menos, estaré allá.
-FLOR: ¿Y Amaranta?
-SILV: en su casa, supongo.
-FLOR: tienes que venir con ella.
-SILV: entonces, ahí estaremos.
-FLOR: las espero.

Silvia colgó y fue rápido a avisarle a Amaranta quien se acababa de bañar. Ella aceptó acompañarla, después de 15 minutos estaban rumbo a la casa de Flor.

Cuando llegaron, Flor les ofreció vino para que brindaran su amor con Santiago, después de brindar, entre risas siguieron platicando.

-SILV: ¿Dónde está el pedorro más hermoso?
-FLOR: se fue a comprar unas cosas que nos faltaron para la casa.
-AMA: ¿y no lo acompañaste?
-FLOR: no, yo estaba realmente cansada, antes de ayer llegamos de Luna de miel y...

Silvia y Amaranta la miraron picarona molestándola.

-FLOR: ¿qué?
-SILV: nada Jajajaja
-FLOR: las conozco eh.
-SILV: por cierto, quiero hablar contigo, de algo muy delicado.
-FLOR. Ya me estás asustando ¿De qué se trata?
-AMA: hasta a mí...
-SILV: no, no se asusten, cuando estaba en tu boda, mientras bailaba con mi hermano, un señor se topó con nosotros y después fue a hablar contigo... Yo quiero saber quién es.
-FLOR: ¿Señor? Muchas personas hablaron conmigo ése día Silvia, explícate ¿Es actor?
-SILV: no, no creo que es actor, por favor, tienes que acordarte.
-AMA: pero ¿Por qué tanta curiosidad de saber sobre ése señor Silvia?
-SILV: después sabrás Ama pero ahora es necesario que Flor se acuerde de él.
-FLOR: a ver ¿Cómo estaba vestido?
-SILV: ash, no me acuerdo muy bien pero...Creo que...Mira, él no asistió a la ceremonia, bueno, al menos no lo había visto, llegó cuando todos estábamos bailando y se fue directamente a saludarte y a Santi, pero lo más raro de todo fue que él ni se quedó...
-FLOR: ahh, ya sé de quién hablas, estás hablando de Jiménez.
-SILV: ¿Jiménez?
-FLOR: sí, así se llama, Victor Jiménez.

Al escuchar la palabra "Victor" Silvia no pudo disimular sus emociones, y se paró gritando

-SILV: lo sabía, yo lo sabía.
-AMA: ¿es alguien que conoces, Silvia?
-SILV: no, no lo conozco. (Se sentó y tomó un trago de vino para que se tranquilizara)
-FLOR: ¿entonces?
-SILV: me van a decir loca por lo que les voy a decir pero...
-FLOR: no te preocupes.
-SILV: creo que, bueno, yo creo...
-FLOR y AMARANTA: hablaaaaaaaaaaaaaa.
-SILV: yo creo que ése señor es el padre de Valentina.

Amaranta y Flor le quedaron viendo como si ella fuera una loca de remate, pero Silvia al ver que ellas no le decían nada, decidió romper el silencio.

-SILV: bueno, díganme loca si quieren.
-AMA: es que Silvia, loca no, estás desatada.

Flor soltó una carcajada antes de responderle.

-FLOR: ok Silvia pero ¿Por qué dices qué él es el padre de Valentina si ni lo conoces?
-SILV: Flor, tal vez es porque yo conozco a Valentina más que tú, pero ésos dos se parecen mucho pero muchísimo, tienen los mismos ojos, la misma nariz, ect..

Flor hizo un silencio y se puso a pensar si era verdad lo que le estaba diciendo Silvia.

-AMA: no conozco al señor pero creo que Silvia está exagerando porque...
-FLOR: ella tiene razón (Le dijo en voz baja)
-AMA: ¿Qué?
-FLOR: que Silvia tiene razón. Victor y Valentina se parecen bastante, nunca se me había ocurrido porque como dice Silvia, he visto a Valentina de vez en cuando, capaz por eso no lo había notado, pero Silvia (Giró la cabeza hacia ella) ¿Qué te asegura que Jiménez es el padre de Val?
-SILV: no es que esté muy segura pero resulta que cuando vi el señor, me quedé en shock al ver su apariencia con Val y decidí preguntar a Gerardo cosas sobre el padre de Valentina y me dijo que se llamaba Víctor, como ése señor, ¿es mucha coincidencia, no?
-ANA: entonces, no necesitamos más pruebas.
-SILV: Flor ¿cómo es él realmente?
-FLOR: es un muy buen amigo de nosotros, lo conocí gracias a mi toro (así llama a Santiago) ellos también son compañeros de trabajo pero no puedo decirte nada de su vida personal porque no sé mucho de ella.
-SILV: tengo que llegar al fondo de todo éso, pero Flor por favor ¿le puedes preguntar cosas de él?
-FLOR: ¿Cómo cuáles?
-SILV: si él está casado y así.
-FLOR: investigaré un poco, pero ahora él no está en el país, por cuestiones de trabajo, se fue a Nueva York, por esa razón no pudo quedarse en mi boda pero cuando regrese, te lo haré saber.
-SILV: por favor amiga y nada de eso a nadie más, por favor ¿sí?
-AMA: de mi parte, puedes estar segura que no diré nada.
-FLOR: de la mía igual.

Pasaron toda la mañana hablando hasta que Silvia recordó que Gerardo iba a venir a su casa con Valentina para que pasaran el día juntos.

Sin demorar más, se despidieron de Flor y se fueron a su casa.

Cuando Silvia llegó a su casa, no encontró a nadie más que Luisa que estaba cocinando una exquisita comida mexicana, el olor le hizo acercarse a la cocina.

-SILV: mhhhh, éste olor me encanta demasiado.
-LUISA: ¿Verdad que sí huele rico?
-SILV: demasiado Luisa, no sé que haría sin ti, de verdad gracias, porque más que una trabajadora, te has convertido en una amiga para mí, que me cuida siempre (Se le acercó para abrazarla)
-LUISA: gracias a ti Silvia, soy muy afortunada de trabajar con una mujer como tú.

Le contestó el abrazo cuando el timbre de la puerta se empezó a sonar interrumpiendolas. Luisa se apartó de ella para ir a abrir pero Silvia la detuvo.

-SILV: no, no te molestes, yo abro, seguramente es Gerardo.

Dijo corriendo hacia la puerta de la entrada, después de abrirla vio que no estaba equivocada, efectivamente era Gerardo cargando a Valentina en sus brazos.

-SILV: holaaaa.
-GER: hola mi cielo (La besó)
-SILV: entren!

Silvia, al ver que Valentina no la había saludado, la tomó de los brazos de Gerardo y se fue a sentar con ella en el sofá, Ger las siguió y se sentó al lado de ellas.

-SILV: ¿Qué tiene la princesa más bella de todas?

Valentina no le contestó pero la miraba con una cara muy triste.

-SILV: ¿qué pasa con ella, Ger? (Giró su cabeza para mirarlo)
-GER: extraña a su mamá. Desde ésta mañana quiere hablar por skype con ella pero mi mamá me dijo que Vero se despertó agitada y no se siente nada bien para platicar con nadie.
-SILV: ay, mi corazón ¿La extrañas muchísimo, cierto? (Le preguntó acariciando su mejilla)
-VAL: sí, ella ya no me quiere.
-SILV: ¿por qué dices que ya no te quiere?
-VAL: hace mucho que se fue a Estados Unidos sin mí, y no habla mucho conmigo.
-SILV: mi Val, nadie te ama más que tu mamá, te lo puedo asegurar.
-VAL: entonces ¿por qué no quiere hablar conmigo?
-SILV: porque está enferma y necesita su espacio ahora pero pronto, muy pronto la tendrás contigo.
-VAL: ¿neta?
-GER: sí, neta, pronto tendrás a tu mami contigo otra vez.
-VAL: Yupiii! Les prometo que la voy a cuidar mucho, mucho para que ya no esté enferma.

Esas palabras dieron mucha ternura a Gerardo y Silvia, le contestaron con una tierna sonrisa.

Atrévete a querermeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora