Capítulo 9

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Después de pasar un día agotador, por fin llegó a su casa, tomó un baño y se acostó hasta quedarse dormida.

3 días habían pasado, Silvia se enfocó en su trabajo para no pensar tanto en Gerardo y su "número".

No lo había vuelto a ver desde aquella vez ¿eso era bueno o malo? Se preguntaba mientras tomaba un té de manzanilla antes de dormir.

-¿Y si lo llamó? Naaaa, debe estar durmiendo. Qué va a andar durmiendo si a penas son las 7:30 (Hablaba sola como loca en el comedor)

Se levantó y fue a buscar su bolsa que estaba en su recámara, sacó el papelito, tomó el celular y empezó a componer el número, cada número que tocaba, sentía algo inexplicable, una mezcla de nervios y miedo. "¡DIOS! Tengo que terminar con esto de una buena vez por todas" dijo cuando ya estaba sonando el celular de GER.

-GER: ¡Aló! ¡Hola! ¿Qué pasó? ¿hay alguien ahí?

Silvia se quedó muda después de escuchar su voz y no pudo soportar los nervios que tenía y de inmediato colgó la llamada. Se levantó de la cama, caminaba despacio en toda la habitación preguntándose en voz alta.

-¿Por qué no lo contesté? ¿Por qué me quedé completamente muda al escuchar su voz? ¿Por qué estoy caminando como loca y hablando sola?

Se sentó en la cama. Iba a poner el celular sobre el escritorio cuando él empezó a sonar.

-Aló! (Contestó Silvia más calmada)
-Hola, ese número me acaba de llamar ¿Puedo saber quién es?

Cuando Silvia se dio cuenta que era él, pensaba en colgar, cuando de repente una voz dentro le decía "ni se te ocurra colgar"

-GER: entonces no es nadie. Si no es nadie ¿quién es? (Dijo riendo al darse cuenta que era Silvia por sus suspiros)
-SILV: soy yo, Silvia.
-GER: vaya! Hasta que la muda habló.
-SILV: ¿Por qué querías que te llamará?
-GER: porque necesitaba tener tu número de celular.
-SILV: ¿Para qué? Si ni me conoces?
-GER: Sé tantas cosas de ti que hasta creo que ya te conozco
-SILV: ay si! Ahora eres el sabelotodo, no?
-GER: No jajajaja, solo sé lo básico, lo que tienes que saber de alguien que te interesa.

Silvia se puso completamente roja al escuchar esas palabras, hizo un silencio pero al final prefirió ignorar la última frase.

-SILV: bueno aquí el caso es que no sabes nada de mí. (Dijo sonriendo)
-GER: ¿Por qué no hacemos una apuesta?
-SILV: ¿Cuál? (Le preguntó curiosa)
-GER: tú me preguntas tres cosas básicas sobre ti, si las respondo bien aceptas una cita conmigo y si respondo mal hago lo que me pidas.
-SILV: Bueno, acepto. (Ella lo que quería es desafiar)
-SiLV: La primera pregunta es: ¿Cuál es mi color favorito?
-GER: Verde!
-SILV: Bien, ¿Qué tipos de animales me gustan?
-GER: Todos, pero en especial los perros y gatos!
-SILV: Bien. Y ¿cuál es mi canción favorita ahora?
-GER: 17 años, me debes una cita.

Silvia no podía creerlo, pero ¿cómo diablos él sabe todo eso? no creo que sea en entrevistas porque un hombre como él no se lo pasa viendo entrevistas...El nombre de Fernanda le llegó a la cabeza. Cuando escuchó una voz en el celular que le hizo acordar que estaba en una llamada.

-GER: ¿Sigues ahí?
-SILV: sí, sí, entonces dame día y fecha. Una propuesta es una propuesta y se debe cumplir. (Le contestó tímidamente)
-GER: así es! Mañana después de grabar, te pasó a recoger en el foro. (Confirmo satisfecho)
-SILV: va! Ahí, nos vemos. Buenas noches.
-GER: Buenas noches y otra vez...

Silv colgó sin escuchar que venía después de ese otra vez y se dejo caer en la cama, sin saber qué pensar o cómo pensar en todo eso que acaba de ocurrir.

Atrévete a querermeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora