Bullets Losses →kookmin

02

El sonido de un puño golpeando el saco de boxeo retumbó en todo el gimnasio de la escuela. JungKook se dejó caer abrazándolo como si fuera una persona, su respiración estaba completamente agitada, se supone que era su tarde libre, pero no tenía nada mejor que hacer que seguir entrenando en el gimnasio.

A diferencia de sus compañeros, no tenía nada que hacer, no tenía alguna novia o novio a quien ver, no tenía los suficientes amigos, ya había pasado tiempo con su familia en la ceremonia de grado hace dos semanas, tampoco tenía alguna afición como todos. Lo único que hacía era simplemente entrenar un poco en el gimnasio, quemar un par de calorías y llegar muerto a su cuarto compartido.

—¿Qué haces aquí Jeon? ¿Buscas prepararte más que todos para el examen físico?– Una voz entre burlona y envidiosa inundó los oídos del pelinegro, haciendo que en sus labios se formará una pequeña sonrisa, una sonrisa superior.

—No soy como tú Park, ni siquiera me acordaba de ese examen, solo estoy aquí matando el tiempo– Se reincorpora, para así mirar a Jae-Hun, quien solo lanzaba veneno de sus ojos —Por lo visto, tú sí vienes a prepararte para ese insignificante examen.

Los músculos del otro chico se tensaron, lo cual no pasó desapercibido para JungKook. Jae-Hun lo detestaba, por ser lo que interfiere en su camino para ser el mejor de la clase. El menor de los Park se desvivía por ser el mejor, por hacer sentir a su familia orgullosa y porque, por alguna vez en la vida, demostrar que era más que su hermano Jimin. En cambio JungKook no cargaba con todo eso, estaba en ese lugar por gusto y no se esforzaba en nada por ser el mejor.

Eso hacía que la sangre de Jae-Hun comenzara a hervir.

—¿Una pelea? Debe ser aburrido golpear solo ese saco.

—Claro, no me iría mal darte una paliza.

❆❆❆❆

Jimin no tuvo tiempo, venía caminando lo más rápido posible, cualquiera que lo viera pensaría que estaba trotando. Detrás de él venía TaeHyung, quien no dudó acompañar a su amigo hasta las instalaciones de la escuela policial, algo extrañado por el repentino llamado al celular del mayor, cuando todos sabían claramente la decisión de Jimin de mantenerse alejado de ahí.

Jimin entró rápidamente a la enfermería del lugar, soltando un largo suspiro, seguido por su amigo, ambos mirando a un golpeado Jae-Hun.

—Hyung...

—¿Hyung qué? ¡Tus apoderados son nuestros padres y me llaman a mí para decirme que te metiste en una pelea fuera de clases! Mírate, estás todo golpeado, tú sabes que las peleas no están autorizadas fuera del horario de clases, incluso cuando es en el gimnasio... ¿Eres idiota o qué? ¡Estaba en una jodida salida con Tae y me llamaron diciéndome que estabas todo golpeado!– Disparaba Jimin, no podía esconder su molestia, estaba más que enojado con su hermano.

—Minnie, creo que te estás excediendo...

—¡¿Y tú lo defiendes TaeHyung?! ¿Y si le pasaba algo peor? ¡Dime! ¡Nuestros padres me culparan a mí! Ya que a mí me llamaron primero y yo tendré que decirles, este niño es un irresponsable.

Una risa poco disimulada se escuchó en la enfermería, provocando que el mayor se girase a mirar. No, de todas las personas, no él.

—Veo que nos volvemos a encontrar Jimin...

JungKook, quien había visto todo el ataque de histeria del mayor, se encontraba mucho menos golpeado que el hermano de este.