Bullets Losses →kookmin

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Y nunca pasó nada.

Tanto Jimin como JungKook esperaron y esperaron. Terminaba el año y nunca vieron intervenciones del padre de Jimin en sus vidas. Hubo un momento que temían lo peor. Que el hombre usara su influencia para arruinar a JungKook era lo que más pensaron. Pero no, nunca sucedió algo.

Ahora ahí se encontraban, en la ceremonia que habían estado esperando por una infinidad de tiempo, pero esta vez era distinto. Jimin se encontraba con la familia de JungKook y con TaeHyung, quien a su lado, miraba ansioso a HoSeok, su novio hace poco más de diez meses.

Estaban en la comisaría, que estaba llena de oficiales en ejercicio y familiares de los novatos seleccionados.

En frente de todos y formados con sus uniformes, los policías eran despojados de su insignia de novatos y en su lugar, era puesto oficialmente su placa de la estación.

Jimin miraba lleno de orgullo el momento. JungKook disimulaba tranquilidad, pero para alguien como Jimin, sabía que el hombre estaba más nervioso que todo el resto.

—¿No es maravilloso?— Susurra TaeHyung a su lado, luego de ver como HoSeok pasaba por el mismo proceso.

—Lo es— Muerde su labio inquieto, con la mirada fija en su novio. —¿Qué tienen planeado hacer HoSeok y tú para celebrar?

—¿No te dijo? JungKook nos invitó con ustedes. Dijo que este día era tan especial para él, que necesitaba que estuvieran todos con él y eso incluye a HoSeok, y como incluye a HoSeok, me incluye a mí.

Jimin frunció el ceño levemente, pero lo dejó pasar. Sabía que luego de eso, irían a comer a un restaurante para celebrar. Los padres de JungKook habían insistido y no pudieron decirles que no.

A lo largo del término de las ceremonias, el comisario dio unas cortas palabras y dejó que los nuevos oficiales de la estación de policía de Seúl, saludaran a sus guías durante el año. JungKook torpemente se dio un corto abrazo con Moon, quien también parecía igual de incómodo.

Todo comenzó a disolverse, el proceso había terminado y mientras Jimin, junto la familia de su novio, se acercaban a JungKook, aún se podía ver al oficial Moon al lado del menor.

—Aunque ahora que no soy tu compañero, no te atrevas a pasar de mí cuando llegues a trabajar. Hay algunas mierdas que fueron mis compañeros, que ahora por ser oficiales se creen lo suficiente como para no dirigirme la palabra.

—Descuide, yo nunca haría algo así.

—¡Tutéame Jeon! Ahora eres un oficial.

Jimin sonrió al saber que su novio era reconocido por sus colegas. La conversación entre JungKook y Moon murió cuando les vieron llegar. El hombre se despidió fugazmente, sin antes saludar brevemente a todos.

—¿Sobra decir lo orgulloso que nos sentimos?— Pregunta el señor Jeon puesto que como siempre, la madre de JungKook estaba deshecha en llantos.

—Nunca está demás padre, ayudan a mi ego— Riendo chocan palmas.

Los ojos del padre de JungKook estaban levemente brillosos, llenos de emoción y felicidad, pero por sobre todo, orgullo. Jimin nunca había visto al hombre de esa manera. Por su parte, la madre de JungKook solo lloraba y como siempre balbuceaba cosas, que esta vez, nadie hizo el esfuerzo por tratar de entender lo que decía.

—¿Ahora si puedo ver tu arma?— Pregunta esperanzado Hyun-Woo.

—Tú preocúpate de tu universidad, ¿quieres?

Jimin en vez de hablar, solo se colocó al lado de su novio y dejó que este lo abrazara y besara. Sobraban las palabras para ambos, Jimin le recordaba todos los días lo feliz y contento que se sentía, con todos los logros de JungKook.