Same Old Shadows.

Capítulo once

Amellie

Y sé que nos quedamos así por lo menos unos dos o tres minutos.

Pero él no hace otra cosa que mirarme con su mandíbula tensa. Me muerdo el labio y decido concentrarme en mi teléfono, termino de bajar las escaleras y rápidamente paso por su lado para salir al jardín a la fiesta de los adultos.

No puedo creer esto.

Me doy cuenta que lo odio tanto por lo estúpido que fue pero a la vez no puedo odiarlo, con solo verlo mis sentimientos han despertado, aunque nunca se han ido, habían estado ocultos por un tiempo.

Sus facciones, sus ojos, sus cabello en punta, sus labios...y esa chica junto a él.

Resoplo y cuando ya estoy en el jardín noto que este, está lleno de adultos y uno que otro niño de la edad de mi hermano.

Mi ceño se frunce al ver a papá y Abraham en la barra y mamá y Kiana junto a ellos. Me acerco.

—Viniste, cielo.—dice mamá con una sonrisa besando mi cabello.

Papá y Abraham agarran los pequeños vasos de shots y luego de chocarlos se lo toman rápidamente.

Abro los ojos con sorpresa al verle tomar de esa forma.

Su mirada se posa en mí y se acerca dándome un beso en la frente.

—Lindo vestido.—dice papá con una sonrisa, suspiro mirándole con mala cara, sigo molesta—Am.—dice haciendo una mueca.

—Iré a sentarme.—hago una mueca, saludo a Kiana y a Abraham y me siento en uno de los sofás que han colocado para hablar con mi teléfono.

No quiero estar ni aquí, ni dentro.

Noto cómo se divierten y no puedo dejar de pensar en él. No sabía que vendría, lo he notado en su expresión.

Cuando Gael me envía un mensaje mis labios se curvan en una sonrisa.

—Am,¿por qué no vas dentro? ¿Quieres que llame a Annette?—Kiana llama mi atención, se sienta a mi lado con una sonrisa.

—Estoy bien Kiana, gracias.—le sonrío y ella suspira asintiendo, luego decide levantarse y dirigirse a su esposo.

Gael me pregunta si puede llamarme y le indico que en diez minutos ya que noto que papá se acerca a mi llevando un cóctel en su mano.

Se sienta a mi lado y le miro seria.

—¿Un cóctel?—murmura dándome el cóctel, ruedo los ojos—Am, todo lo que hago es porque te amo y lo sabes.

—Si pero no es necesario comportarse así.

—¿Cómo un idiota?—sonríe—Puedes decir la palabra.

Y no puedo evitar sonreír y rodar los ojos de nuevo.

—Toma, uno no te hará daño y diviértete.

Tomo el cóctel y le agradezco, el se acerca y besa mi cabeza.

—¿Hemos venido acá por qué tienes trabajo?—aprieto los labios, resopla.

—Abraham es mi amigo desde hace muchos años y lo sabes, es importante estar presente.

—El año pasado no lo hicimos.—encojo los hombros.

—¿Cómo lo sabes?

—Ashton te escucho pelear con mamá, no quiero verla llorando más.—suspiro—Ella es muy buena y tú a veces sueles ser un...

—Idiota.—completa asintiendo—Amo a tu mamá pero ella a veces no lo entiende, no te preocupes, absolutamente nada nos puede separar.—me sonríe y yo también forzadamente.