~ Capítulo 44 <3

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Y me equivoqué.
Amanecí al día siguiente con el mismo sentimiento de culpa. Bajé a desayunar y encontré a mamá hablando por teléfono.

Me miró.

— oh si, ya despertó —dijo ella.

Me senté en el comedor y tomé el café que estaba servido.

— ¿de verdad? Me alegro que se hayan divertido… ¿te la paso? —la mire.

¿Con quién estaba hablando?
Se acercó a mí.

Bajó el teléfono de su oído hasta su pecho y me dijo.

— toma, es Eunhyuk —una sonrisa se le formo en el rostro.

Dejé la tostada que estaba a punto de comer. Me extendió el teléfono y lo tomé.

— ¿hola?

— ¿cómo amaneciste? —me preguntó.

— bien —mentí —. Por qué no me llamaste al celular

— no sé… ¿te molesta?

— no, claro que no —vi como mamá se sentó frente a mí mientras escuchaba la conversación.

— y qué estás haciendo

— eh…bueno desayunar —le dije como lo más obvio del mundo.

Eran las 8 de la mañana.
Soltó una pequeña carcajada.

— sí, tienes razón, yo también estoy desayunando —sonreí —.  _______ quería saber si… —antes que terminase de hablar pude oír como alguien le llamaba. Por la voz supe que era su mamá.

— ¿tu mamá? —le pregunté.

— sí

— creo que mejor será cortar, hablamos luego

— okey, cuídate

— tú también

— te quiero —dijo para después colgar.

Quité el teléfono de mi oído. Otra vez el sentimiento de culpa.

— y que te dijo —habló mamá. Tomé la tostada que deje hace unos instantes y le di un mordisco.

— qué hablaron —insistió.

— nada, solo me preguntó cómo estaba —tomé el café.

— ¿pasa algo _______?

Negué.

— te noto triste, salió mal la cita

Negué otra vez.

— entonces… 

— todo salió bien —terminé de comer la tostada y me levanté —. He terminado de desayunar, subiré a mi habitación para arreglarla

Iba a salir del comedor pero mamá habló.

— _________ si estas así por Sungmin no te sientas culpable, también tienes derecho de volver a enamorarte

Solo asentí y seguí mi camino.
Para ella es fácil porque no lo vive.

~ 1 día después ~

— terminé de desayunar, ahora me voy —dije cuando tomé el último sorbo de mi jugo.

Me despedí de mamá, tomé mi mochila y salí de casa.
Justo cuando iba a salir hacia la vereda un auto se estacionó. Bajaron la ventana del conductor y Eunhyuk sonrió.

— ¿te llevo bonita? —vire los ojos ante ese comentario.

— ya que —me encogí de hombros.

La Chica Nerd ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora