Capítulo 15

634 45 7
                                    

Kate se separó de inmediato, dándose cuenta que había sido demasiado impulsiva.

- Perdona - se disculpó.

- ¿Perdonarte? Estás contenta. Creo que después de las dos últimas semanas que llevas de malas noticias, de vez en cuando permitirse una demostración de alegría no viene mal después de todo ¿No?

Ella sonrió. Era cierto. Eso de que las noticias malas siempre vienen juntas parecía haberse cumplido y ahora dejaba sitio a la racha de buenas noticias.

- Y... ¿Qué debo hacer ahora? - preguntó mirando de nuevo a su alrededor - Quiero decir, ¿Dónde está la inmobiliaria? ¿Cuándo puedo firmar? Y lo más importante...

- Cuando puedes entrar...

- Exacto.

- Hablaré con John y él resolverá todas esas dudas. Creo que deberíamos ir a la casa de Susan y Will y deberías traer aquí la habitación de Robby.

- ¿No es la que está en tu casa?

- No. Esa la compré.

Ella asintió. Claro. Él no tenía ningún problema en comprar. Sonrió. Era curioso encima que entre el círculo de ricos encontrasen esos chollos que ella acababa de encontrar gracias a él. Pensó en las cosas que tenía guardadas en su guardamuebles y casi le pareció encontrar un sitio apropiado para cada una de ellas.

- ¿Necesitas tomar medidas de algo o volvemos ya? - preguntó Richard contento aún por la demostración de alegría que tenía ella.

- Podemos volver. Mi antiguo apartamento era más pequeño, me cabe todo de sobra.

- ¿Cuándo quieres empezar a traer cosas?

- Por mí, ahora mismo...

- Creo que podría arreglarlo con John, aunque es algo tarde...

- Sí. Yo también lo creo - dijo ella sonriendo - necesito llamar a una mudanza y que transporte mis cosas hasta aquí y...

- No te preocupes, yo me ocuparé de eso.

- Te lo agradezco, ya has hecho bastante, esto es cosa mía.

Richard se acercó a ella mirándola fijamente a los ojos.

- Kate, escucha - dijo muy serio.

Ella le prestó atención.

- Sé que nos conocemos de hace muy poco y en unas condiciones muy extrañas - dijo sonriendo y ella asintió correspondiéndole a la sonrisa - pero decida lo que decida el juez me gustaría que fuésemos amigos. Y si el juez decide que Robby ha de quedarse contigo me gustaría que me dejases que le facilitase la vida todo lo posible. Se lo debo a Susan. Al igual que si el juez decide que sea yo quien se quede con él, no me negaré a que pases tiempo con él, porque creo que tú también se lo debes a Will.

Kate comenzó a sentirse emocionada ante las palabras de Richard. Notó como sus ojos se aguaban.

- Creo que de un modo u otro el niño va a cambiarnos la vida a ambos y seguramente podamos ayudarnos y aconsejarnos mutuamente, sea cual sea la situación. Me gustaría contar contigo y quiero que tú cuentes conmigo para poder realizar el último deseo que nos pidieron nuestros amigos. Creo que será lo mejor para Robby. ¿Qué me dices?

Ella asintió en silencio. Estaba conmovida por lo que él acababa de decir. Aunque el juez decidiese que no era la adecuada, podría participar en la vida de Robby cumpliendo con la petición de Will. Contenta le ofreció la mano.

- ¿Trato hecho? -preguntó él

- Trato hecho - corroboró - aunque pienso ir a por todas en el juicio.

La sentenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora