Capítulo 29

625 38 7
                                    

Richard se separó lentamente, no sin antes depositar un ligero beso en su frente, queriendo ser perdonado si el atrevimiento de besarla, en mitad de la calle y frente al restaurante que solía visitar junto a su padre, había ido demasiado lejos.

Kate agachó la mirada turbada. No entendía porque a esas alturas de su vida se sentía tan extrañamente vulnerable y tímida por el besar a ese hombre. Se giró y abrió la puerta del coche, sentándose rápidamente.

Richard dio la vuelta al coche, abriendo la puerta del copiloto y casi lanzándose a su interior manteniéndose en silencio mientras ella conducía de vuelta a comisaría. Intentó pensar en otra cosa que no fuese el instante que acababan de compartir, pero le resultaba del todo imposible, cada pensamiento diferente a Kate, volvía irremediablemente a ella, a sus labios, a su olor, a su tacto...

Kate se sentía incómoda. En ninguna de las anteriores ocasiones en las que se habían besado habían hablado sobre el tema y parecía que tampoco iba a ser ese el momento. Sinceramente no tenía muy claro si quería hablar sobre el tema o dejarlo pasar. Decidió ser valiente.

- Castle...

- ¿Sí?

- Deberíamos hablar sobre...

- ¡Ah sí! Tenemos un tema pendiente - dijo él.

Ella le miró brevemente volviendo al tráfico de Nueva York.

- La verdad es que necesito una persona nueva - continuó él.

- ¿Una persona nueva? - preguntó ella extrañada.

- Claro. Estaba harto, pero ya sabes, por comodidad seguía con ella. Afortunadamente todo termina y nuestra relación llegó a su fin.

- Por comodidad - repitió ella.

- Sí. Y ahora puedo elegir a quien quiera y he aprendido la lección. Ahora sé que si no estoy a gusto y si no me convence, buscaré otra... - aseguró.

Kate no pudo soportar lo que estaba oyendo y giró bruscamente parando el coche en una zona prohibida.

- ¿Si no te convence buscarás otra? - preguntó mirándole fijamente.

- Bueno - dijo él asustado por como había parado - también podemos decidirlo entre los dos, pero yo tengo más experiencia...

Kate bufó. Le mataría en ese mismo momento.

- Claro, tú tienes más experiencia. Mucha más que yo. Tienes razón.

- Sí - dijo él totalmente extrañado.

Kate se recolocó en su asiento, intentando calmarse y formar una frase para mandarle literalmente a la mierda con toda la educación posible.

- Castle - comenzó ella a decir furiosa - no pensaba que eras tan retorcido y superficial.

- ¿Retorcido y superficial? ¿Por qué me dices eso?

- No eres más que un rico caprichoso que crees que puedes manejar a la gente a tu antojo, tenerla como si la comprases con ese dinero que te sobra y tirarla a la basura cuando te aburras. Las cosas no van a salirte así Castle, al menos conmigo. Por mí puedes elegir a quien te de la gana y aburrirte y conseguir otra cuando quieras, pero conmigo no cuentes.

Richard la miró totalmente extrañado.

- Bien... No sabía que ibas a tomarte tan en serio el tema del pediatra de Robby...

Kate se sintió totalmente estúpida e intentó disimular todo lo posible para salir del atolladero y que él no se diese cuenta.

- ¡Pues claro que me lo tomo en serio! - dijo fingiendo estar indignada - Tenemos que elegir con cuidado, pero no pienso cambiar de pediatra cada dos por tres. Es algo serio.

La sentenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora