Knowing the Darkness

Una nota

Ambos entramos al restaurant, iba a quitar los lentes y el estuvo de acuerdo ya que no estaba tan brillante por dentro. Los coloqué en el cuello de la sudadera de Ian, el lugar era encantador y amplio, a lo lejos pude ver una butaca, me gusta sentarme en butaca, son cómodas.

- Nos sentamos ahí?.- pregunté y el accedió. Caminamos a la butaca y en el camino miré cómo una niña pequeña me miraba y parecía que iba a llorar, de inmediato mis ojos son cubiertos y me ponen los lentes.

- Mejor te los dejas suelto que casi haces llorar a la pequeña.- me susurra al oído.- suerte que sea guapo y haya sonreído al verme.- no pude evitar reír.

- A parte de mafioso y vampiro le gustan menores?.- hago cara de desagrado después de susurrar. Ambos reímos y nos sentamos en la butaca en espera a que nos tomaran la orden.

- Hola, mi nombre es Lucy y hoy les atendere el día de hoy.- la chica mostró una sonrisa pero se quedó impactada al ver a Ian quien no le prestaba nada de atención. Ambos miramos el menú y pedimos lo que queríamos comer.- Muy bien en un momento les traigo su orden.- la chica era rubia, caderona y de busto grande, ojos color verde, tez blanca, aparentaba ser una chica popular o tal vez a una player. No me gusta cómo me come con la mirada y a Ian sólo se porta amable.

- Parece que el mafioso tiene una admiradora a parte de la pequeña niña.- el se percata de que le hablo.

- Yo tampoco creí que la criada tendría demasiados ojos encima desde que entra al restauran.- el comenta mirando el menú y a decir verdad sentí un poco de daño a mi persona.

- De que estas hablando?.- fingí ver el menú y cómo tenía lentes pude ver cómo chicos tiraban miradas a la mesa en dónde nos sentabamos, tenía razón.- Bueno, una lástima por ellos, no me interesa ni uno. En tu caso parece que le has robado la respiración a la mesera que no deja de odiarme con la mirada.- recargue la cabeza sobre mi mano que estaba apoyada mi codo con la mesa y giré mi cabeza en su dirección mirando su perfil.

- Pues los mafiosos no se relacionan con camareras, buscamos otro tipo de mujer de un alto nivel y no necesariamente debe ser económica.- el sólo ladea su cabeza en mi dirección ahora mirando la sección de postres.- Es bueno que ni uno te llame la atención, así no me metería en problemas en protegerte.- me mira.

- Pues que bueno que no sea de tu agrado la mesera, así no me contendré al golpearla si empieza a meterse conmigo.- ambos manteníamos la mirada por un momento hasta que llegó la señorita Lucy.

- Aquí están sus pedidos.- ambos agradecimos, ésta vez Lucy se quedó mas tiempo de lo usual, estaba nerviosa y miraba mucho a Ian.- Disculpa.- habló. Yo ya no soportaba el hambre y empece a comer.- crees que me podrias dar tú numero de celular?.- preguntó la chica moviendo mucho sus manos, yo sólo miraba y casi admiraba la valentía de esta mujer.

-No me agradan las chicas cómo tú, noté cómo mirabas mal a ella.- me apunta y yo tenía la boca llena de comida.- Eres linda por fuera, pero por dentro debas mejorar.- no sabía lo que pasaba, pero Ian parecía estar molesto.- haré cómo si nada, puedes retirarte.- re recargo en el respaldo y puso un brazo sobre la butaca pero parecía que lo puso sobre mis hombros. La chica se retiró desanimada y molesta; yo estaba impactada y me di cuenta de que cambió de personalidad, have rato no estaba así o no al menos cuándo me hablaba conmigo.

- Oye chico malo, no crees que fuiste un poco duro con la mesera?.- pregunté mientras que yo comía mi gran corte de T-Bone con arroz blanco acompañado con camarones.