Me incline a dónde el estaba para poderle ver el rostro, dejando el calor de la cobija que tenía sobre mi, no pude verlo con claridad por culpa de la almohada y de su cabello que cubría sus ojos. Con mi mano retiré su mechones de cabello y pude verlo mejor pero de golpe abrió los ojos y de un abrir y cerrar de ojos yo estaba acostada en mi cama y el estaba sobre mi.
Estaba desconcertada al verlo sobre mi, miré su cara y sus ojos estaban de un color rojo con negro, eran brillantes, eran hermosos, atraían mucho mi atención podría decir que me gustan mucho; veo cómo poco a poco empieza a acercarse a mi cuello, hace tiempo que bebió sangre, antes de eso usaba un suplemento lo cuál nunca funcionan por comoleto y lo mordí hace unos días también, sentía que era mi turno de ayudarle ahora. Lo miré dulcemente, giré mi cabeza para que tuviera mejor acceso a mi cuello y cerré mis ojos, sentí el roce de su nariz contra mi piel, cuándo sentí su respiración mi cuerpo se estremeció, sentí cómo se alejaba y abrí los ojos para verlo pero el se sorprendió al verme.
- Te encuentras bien?.- pregunta mirándome fijamente a los ojos
- Sí, porqué lo preguntas?.- me está mirando, pero parece que no está aquí conmigo.
Con mi mano toco su costado y lo muevo un poco para llamarle la atención pero no me había dado cuenta de que había tocado un poco su espalda, puso una mueca de dolor y se molestó dejando salir sus colmillos mientras que sostenía con fuerza las sabanas entre sus puños que estaban a los costados de mi cabeza. Ésta fue la primera vez en que lo veo molesto, enojado y que sacara sus colmillos.
- Tengo que irme de aquí antes de que te haga daño.- se levanto de la cama notando que estaba vendado del torso, quitó el seguro dejando caer por si mismos los vendajes.
- Espera.- hablé sentandome en la cama.- Las tienes puestas porque tenías raspones y heridas en toda tú espalda.- mientras caían los vendajes dejaban a la vista terribles hematomas desde el cuello hasta su espalda baja de distintos colores.
- Acaso no recuerdas lo que soy?.- habló un poco molesto.- no necesito nada de éstas cosas, no soy un humano, Scarlet ellos morirían si cayeran de una gran altura cómo yo lo hice.- se quitó lo que restaba, pude ver sus venas y hematomas en dónde están los pequeños huesos de la espina dorsal, los hombros y demás, es muy comprensible de que esté molesto.
La había pasado fatal, estoy muy agradecida con el por haberme salvado la vida, no sabría si de verdad hubiera sobrevivido sin el pero sé que quiero devolverle el favor, podría usar su enojo, provocarlo y usarlo a mi favor.
- Aún no sanas, no pudes irte sin más.- toqué su espalda con la mano. Soltó un gruñido y giró de inmediato para mirarme con sus ojos color rojo.
- Valla, acabo de salvar tú vida de nuevo y así es cómo me lo agradeces?.- caminó a mi y retrocedí por costumbre.
- Pues yo no pedí que lo hicieras.-empezaba a sentirme un poco mareada pero no le di importancia y seguí hablando con voz firme.- estaba bien, yo podía manejarlo.- empieza a reír.
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Knowing the Darkness
Storie d'amore*Esta historia está por terminar y muy pronto editada* Esta es la historia de una joven de 19 años llamada Scarlet Midnight, quién a vivido su vida como cualquier ser humano, o éso es lo que pensaba. Ella creía que los notorios problemas en la rela...