Amor y Odio |EN EDICIÓN|

Días Random (3/3)

Juan POV.

No recuerdo absolutamente nada de lo que pasó anoche. Lo último que recuerdo es que estabamos jugando con los demás y que Bianca (prima de Ximena) le quitó una botella de vodka a mi mamá.

Fuera de eso, mi mente está en blanco, pero algo me dice que hice alguna estupidez porque desde que me levanté no dejaron de mirarme y sonreír.
A todo esto, ¿Donde está Ximena?

-Si la estás buscando, aún está en su habitación. No ha salido de allí desde anoche, le he tenido que llevar el desayuno a la cama.- Quién me respondió sin siquiera haberle preguntado fue mi madre.

Al parecer todos se fueron anoche ya que aparte de Sofi y mi mamá no hay nadie.

Nadie.

Ni Franco, ni Julieta, ni mi futura suegra.

Entré a mi habitación y salí al balcón para acercarme al balcón de Ximena. Se preguntarán, ¿Por qué no simplemente golpee la puerta? Pues se que no me abrirá y su ventana siempre esta abierta.

Bueno, siempre está abierto pero no creí que sería tan literal, esta abierta completamente y logro ver a Ximena en su cama, con los audífonos puestos y cantando por lo bajo.

Lo raro es que no tenga un libro en la mano.

Me tomé la libertad de entrar y sentarme en el borde de su cama. Ella me miró pero jamás hizo un amague de quitarse los auriculares y siguió cantanto.

Bien, la verdad no tengo objeción alguna. Me encanta como canta (eso rimó) y así fue desde la primera vez que la oí en aquel instituto al que ibamos juntos hace un año atras.

-Ximena, quitate eso un momento.- le pedí, sin embargo ella me miro raro antes de hacerlo, solo para darme cuenta después que no me había oído.- ¿ocurrió algo anoche? Mamá dijo que no bajaste a desayunar y que tuvo que subir ella, lo cual es raro.

Ahora que lo pienso, ¿por qué a mi jamás me lleva el desayuno a la cama?.

Fruncí el ceño con falsa molestia, pero al ver la cara de Ximena volverse completamente roja mi rostro se volvio confuso.
En serio, ¿qué ocurrió anoche?

—Oh, pues...no pasó nada. Solo tomaste de mas a espaldas de tu familia.—respondió simple y mirando la pantalla de su celular.

Sofi entró justo en ese momento, sin siquiera molestarse en tocar. Se sentó junto a Ximena en la cama y pasó sus brazos por sobre sus hombros.

—¿Como esta mi pareja favorita? Se lucieron anoche.—comentó ella, guiñandome un ojo. Ximena abrio los ojos alarmada y eso solo provoco que me confundiera mas.

—¡Sofía!.

—¿Qué? Ay, por favor, ya deberían ser cannon.—

Yo seguia sin entender nada, y mi gemela al notar eso me extendio su celular mostrandome un video que se encontraba en mi instagram. Era bastante chistoso verme cantar mientras practicamente me tambaleaba y mi voz sonaba algo distorcionada por la embriaguez, pero lo que me sorprendió fue ver el climax de todo, mi beso con Ximena.

¡¿Mi primer beso con mi crush, y estaba ebrio?!
No puedo ser mas idiota.

No obstante, una enorme sonrisa aparecio en mi cara, y esta aumentó al ver a Ximena cubrirse la cara con sus manos.

—No...digas...nada.—dijo ella, firme, dejando un pequeño espacio entre cada palabra, lo que me hizo reir.—¡No te rias! Idiota...

Sofí se había ido "disimuladamente".
Su intencion al venir aqui era bastante clara, pero no me molestó, mas bien lo agradeci.

—Asi que....¿nos besamos?.— pregunté algo timido, era raro en mi eso, pero se ne hizo inevitable.

—¿Y tu qué...?— no deje que terminara de hablar, porque le di otro corto beso en los labios.—¡Juan!

Ella se puso aún mas roja de lo que ya estaba, de ser posible y bajó la mirada.

—Idiota, que nos hayamos besado y que me gustes no te da el derecho a besarme cada vez que quieras.—

Mis ojos se abrieron sorprendidos pero luego una amplia sonrisa se dibujo en mi rostro. Ximena me miró algo confundida por mi reacción, frunciendo el entrecejo.

—¿Acabas de admitir que te gusto?

—No.

—Oh, si lo has hecho.—sonreí con picardía.

—¡Cállate!.

-•-•-•-

Lo que no se esperarían es que en ese mismo momento Laura se encontraba enviando una solicitud completa y firmada hacia Londres, con el remitente "S.O.S Academy".

La mujer sabía que su hija mayor deseaba ir a aquel instituto desde que supo de el, más aún cuando su propio hermano entro allí para estudiar gastronomía. Costó mucho, pero por primera vez en mucho tiempo pudo ponerse de acuerdo con el padre de la chica para que también el aceptara la posibilidad de una futura mudanza.

—¡Juan, eres un idiota!.— fue lo primero que la mujer escuchó al abrir la puerta, lo que provocó que riera.

Marie se encontraba preparando un cheese cake junto a su hija, y Laura no dudó en ayudar a su amiga mientras los mas chicos correteaban por la casa.

Un fuerte golpe se oye fuera de la cocina, lo que hace que las madres se miren preocupadas, pero suspiren resignadas al escuchar al castaño gritar.

—¡Oye, eso duele!

—¡Jodete!

En la cocina, las madres tenían otro tema de conversación. Laura bastante animada, y Marie feliz por su amiga.

—¿Ya se lo comentaste?.— preguntó la mayor de las dos.

—No, Marianne, creo que sería una perfecta sorpresa. Se que a Ximena le encantara.—respondió Laura. Sofía estaba escuchando, pero prefirió no entrometerse.- no quiero ilusionarla y que luego resulte mal.

Lo que no sabía, era que su hija siquiera recordaba por completo el encuentro que tuvo con Huston Sanders, y su ilusión en su momento estaba enfocado en otra cosa.