Capítulo 1

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AERYN

He llegado a Moscú tras un largo vuelo para ver a mi familia. Hoy cumplo veinte años y tras el fallecimiento de mi madre he decidido volver. Ella es humana. Era. Tras unos años viviendo con mi padre en su manada, llegó a la conclusión de que esa vida no era para ella. No eran mates pero eso no quita que se amasen con todo su corazón. Pertenecían a mundos distintos y aunque ambos sufrieran, sabían que separarse sería lo mejor. Se marchó y yo decidí irme con ella, dejando atrás a mi padre y a mi hermano mayor, Dan, pero nunca perdimos el contacto, incluso mis padres se han vuelto a reencontrar varias veces como amigos y nunca tuvieron problema alguno. Hoy vengo para quedarme con ellos. Quedarme en Dublín sólo me trae recuerdos de ella y duele demasiado.

Salgo del aeropuerto y allí está mi padre esperándome con su coche.

- Hija- dice y me abraza de forma emotiva; yo intento retener mis
lágrimas.- Vamos, todo el mundo te espera.

Subimos al coche y vamos directos a su manada. A nuestra manada.

°°°

Todo el mundo allí me recibe con los brazos abiertos. De algunos me acuerdo pero son mayoría los que me resultan completamente desconocidos. A pesar de las sonrisas en sus caras, noto que hay algo que va mal. Es una especie de tensión que no sería capaz de explicar con detalle. Incluso mi padre está inquieto, cosa que en las tres horas de trayecto desde el aeropuerto hasta la manada no pasaba.

Cuando llego a casa, mi hermano sale corriendo y nos fundimos en un fuerte abrazo.

- Cuánto te he echado de menos, pequeña.

- Yo también, Dan.

Es seis años mayor que yo. Siempre ha estado ahí para todo lo que he necesitado. Su pareja de vida es un vampiro. Lo llevan en secreto ya que, a parte de ser cada uno de las razas rivales por excelencia, ambos son hombres. Si ya está mal visto que un lobo y un vampiro se entreguen el uno al otro, mejor no comentar que sean hombres. Sólo sé su secreto yo. Es médico y un chico fantástico. No podría haber nadie mejor en este mundo para él. Espero algún día poder mirar a alguien como Dan mira a Andrew.

Entramos en la casa para cenar. Estoy muy cansada pero el hambre puede conmigo. Durante la cena, tanto mi padre como mi hermano me ponen al día de las cuestiones de la manada.

- ¿Hay algo que no me hayáis contado?- pregunto cuando veo que terminan de contarme las novedades.

- ¿A qué te refieres?- pregunta mi padre sin entender.

- A que noto algo raro entre la gente, como si tuviesen miedo de algo- los dos apartan su mirada de la mía.- Decidme la verdad, por favor.

- Aeryn,- dice mi hermano,- las cosas han cambiado mucho por aquí. Hace casi medio año hubo un ataque por parte de una manada rival y asesinaron al Alfa de la manada y a la Luna,- contengo la respiración.- El caso es que tras el ataque, su hijo, el actual Alfa cambió y se volvió un ser terrible y despiadado sin ningún tipo de sentimiento hacia nadie, incluida su propia manada.

- ¿Ni siquiera por su Luna?- pregunto.

- Aún no la ha encontrado- me dice mi padre.

- Y mejor,- completa Dan.- Pobre de la que se tenga que enfrentar a esa bestia.

- ¡Dan!- le reprende mi padre.- Sea como sea, estás hablando de tu Alfa por lo que le debes un mínimo de respeto.

- ¿Cómo puedes decir eso, papá?- pregunta Dan indignado.

- Bueno,- interrumpo para calmarlos,- creo que me voy a dormir. Estoy muy cansada del viaje.

- De acuerdo, cariño,- me besa mi padre en la frente.- Buenas noches.

Subo a mi cuarto y tras ponerme el pijama me tumbo en la cama pensando en el Alfa. Debe de ser muy duro perder a tus padres y tener que ocuparte de toda una manada pero me pregunto cómo de despiadado puede llegar a ser.

No sé muy bien si quiero saber la respuesta.





NOTA:
Si a alguien le interesa en particular la historia de Dan y Andrew, también está publicada completa.

DEAR WOLF [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora