DEAR WOLF [COMPLETA]

Capítulo 45

AERYN

- Entonces, ¿a nadie se le ocurre nada?- pregunta Milenka riendo.

¿Por qué siempre ríe? A veces me pone nerviosa que lo haga porque no sé si se está riendo de alguien, de la situación o de nada en particular.

- Yo tengo una idea- dice Eros, el novio demonio de Abigail y todos le miramos expectantes.

- El que faltaba- murmura Fredek y yo le doy un codazo.

Eros hace como que no le ha oído.

- Veréis, Dominic ha dicho que esa mujer se alimenta del dolor de las personas,- mira a Dominic y éste asiente animándole a que siga hablando,- pero no de un dolor simple como que tú pareja te haya engañado con alguien, sino dolor realmente profundo.

- ¿A dónde quieres llegar con esto, demonio?- pregunta Iván aburrido.

Menos mal que Eros es un chico con mucha paciencia y respeto. Si Fredek estuviese en su lugar seguro que ya le hubiese hecho tragar un de esos libros que siempre lleva en su mano.

- Si uno de nosotros no ha sentido ese dolor nunca, ¿no podría enfrentarse a Génesis en igualdad de condiciones?

- Para decir esa estupidez, mejor hubieses seguido callado- espeta Fredek ganándose una mirada inquisidora de su hermana.

- No es una estupidez- dice Dominic sorprendiéndonos a todos.- A mí nunca me hizo nada antes de sentir ese dolor- dice mirándome de reojo y yo me sonrojo.- La cosa es, ¿quién de aquí nunca lo ha sentido?- pregunta y nos miramos entre todos.

- A lo mejor nosotros creemos haber sentido ese dolor, pero en realidad no lo hemos hecho- dice Orrel.

- Cierto,- dice Abi,- yo propongo que cada uno cuente su trauma y Dominic, que es el que más experiencia tiene en esto, valore si uno de nosotros está capacitado para enfrentarse a ella.

- Buena idea- la dice Orrel y ella le sonríe agradecida.- ¿Quién empieza?- volvemos a mirarnos esperando a que alguien rompa el hielo.

- Bueno,- dice Dominic,- está claro que yo no puedo ser. Ya se alimentó de mí hace un par de días.

- No creo que yo sea ni siquiera una opción para hacerlo- dice Dan y veo cómo Orrel frunce el ceño en su dirección intentando descifrar cuál es el gran dolor que oculta.

- Diez días después de nacer el tercero de mis hijos, mi niña murió en su cuna de muerte súbita- dice Thomas con la voz entrecortada y Fredek le aprieta el hombro para darle fuerzas.

- Ni mi hermana ni yo podemos, vimos morir a nuestros padres- dice.

Abi agacha su cabeza y Eros la abraza.

- Milenka podría ir- dice Iván.- Nadie que lo haya pasado mal en la vida podría estar riendo continuamente.

Por primera vez no ríe. Se pone en pie y da la espalda a Iván para sacar desplegar sus alas. Es difícil distinguirlo a simple vista, sobre todo por la cantidad de colores en ellas pero si te fijas una grita atraviesa la derecha de arriba a abajo.

- Cuando te intenten arrancar las alas y veas cómo se lo hacen a tu hermana gemela hasta que muere, me podrás hablar de dolor- le explica sería.- Aunque no creo que puedas nunca, más quisieras tú tener unas alas tan preciosas como las mías- dice y vuelve a reír como siempre.

Iván la mira desconcertado.

- Tú no estás bien de aquí- dice dándose golpecitos a sí mismo en la sien.

- ¿Y vosotros?- les pregunta Dominic a Olenka e Iván.

- Imposible- dice él.- Yo no pienso contar mis fantasmas, pero puedo asegurar que ninguno de vosotros los envidiaría. En cuanto a Olenka,- la mira,- cuando se mete en la cabeza de una persona y ve todo, también ve su dolor y lo padece- ella no dice nada pero no lo niega.

- Entonces ninguno de nosotros puede enfrentarse a ella- dice Fredek.

- Hay alguien que aún no ha hablado- dice Iván mirándome.

- ¿Yo? Bueno, pues puede que yo no haya sentido ese dolor nunca- digo encogiéndome de hombros.

- ¿¡Qué!? ¡Ni hablar! Aeryn no se enfrentará ella sola a Géminis- se pone en pie Fredek histérico.

- Aeryn,- me dice Dan,- ¿y la muerte de mamá? Tú estuviste con ella.

- Sí,- admito,- pero ella estaba enferma y me había ayudado a mentalizarme. Fue doloroso, no lo negaré, pero no creo que mi dolor se pueda comparar al de ninguno de vosotros- les digo.

- Puede servir- dice Dominic.

- ¡No lo hará! Ella no es lo suficientemente fuerte- grita Fredek.

- ¿Cómo dices?- pregunto enfurecida.- ¿No soy lo suficientemente fuerte?

- Sabes a lo que me refiero, Aeryn. No te pongas a la defensiva.

- Recuerda que la chica es medio bruja- dice Olenka.- La puedo entrenar.

- ¿Crees que tendrás un año para prepararla? ¡La guerra es inminente!- dice Fredek.

- No olvides que he estado dentro de su ser, sé de lo que es capaz.

- Me da igual, no lo hará.

- A nadie le importa tu opinión- dice Dominic y me mira.- La decisión solamente es tuya- me dice.

- Lo haré- digo sin pensármelo dos veces.

- Volveremos a mi manada y ordenaré a Marcus ponerte la máxima vigilancia posible para que no puedas salir de allí- Dominic rueda sus ojos.- Ya he permitido que te expusieras al peligro muchas veces,- dice acunando mi cara,- no permitiré que ocurra otra vez.

- No tienes por qué preocuparte,- dice Dominic con sorna,- yo estaré cerca para salvarla.

- Se acabó- dice Fredek abalanzándose sobre él.

Orrel, Dan y Eros los separan. Dominic no para de reír.

- Parece que el lobito tiene muy malas pulgas.

- Te mataré- le amenaza.

- Dices tantas veces esa frase que ya ha perdido totalmente su significado- le dice con burla Dominic.

- Fredek,- le dice Dan sujetándole,- no creo que Génesis esté sola cuando nos enfrentemos a ella. Lo más probable es que Rustam ronde por allí. Aeryn podrá enfrentarse a Génesis mientras nosotros vamos a por Rustam. Estoy seguro de que será mucho más difícil acabar con Rustam que con ella.

Fredek parece pensar en las palabras de mi hermano.

- Sigue sin convencerme la idea- murmura Fredek algo más calmado.

- No hay otra opción- dice Dominic.