Capítulo 6: Preguntas difíciles y constantes sonrojos.

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Toby la miró a lo lejos a través de su ventana, ella lucía apagada y distante. Luego de aquella tarde en la que ambos habían llorado en los brazos del otro, ya no habían hablado más, no la veía en la escuela ni en la clínica.

Lo reconsideró por octava vez y suspiró con fastidio para ponerse una camisa y salir de su habitación por primera vez en todo el final feliz semana.

—¿A dónde vas, hijo? —quiso saber su madre, quien se encontraba en la cocina.

—Yo... uh... saldré a caminar.

—Llega temprano.

Toby asintió y se colocó una sudadera y cuando salió de su casa el frío viento de diciembre lo golpeó en el rostro.

Cruzó la calle un poco indeciso, y se paró frente a la castaña de mirada triste y vacía, quien se encontraba sentada en los escalones que daban a la puerta de su casa.

—Hola...

—Hola, Toby.

—¿Puedo sentarme?

Ella le sonrió y asintió con la cabeza haciéndose a un lado para darle espacio al muchacho.

—No has ido a la clínica...

—No...

—¿Por qué?

—No me he sentido bien, mi madre es feliz con ello, no he causado desastres porque apenas y he salido de mi habitación.

Toby rió, más por llenar el silencio que por ser gracioso. Jugó con sus manos por un momento cuestionándose por qué estaba allí en primer lugar.

—¿Quisieras...? Ah... me preguntaba sí... —Toby se pasó una mano por su desordenado cabello—. ¿Tú quisieras...?

Toby resopló frustrado ante su timidez que le impedía hablar, sus tics se hicieron más que presentes.

—¿Quisieras... —tomó una gran bocanada de aire mientras trataba de controlar sus tics— salir conmigo...? Ya sabes... a tomar algo...

_______ rió suavemente al ser testigo de la timidez del chico, le dio un amistoso golpe en el hombro y se puso de pie.

—Vamos, Toby.

...

El parque estaba más solo de lo habitual, posiblemente debido al intenso frío que calaba los huesos.

—Yo... no sé qué se supone de lo que deberíamos hablar en la primera cita.

—¿Vas un poco rápido, no?

Toby enrojeció al darse cuenta del peso de sus palabras, no había querido decir aquello, y sin embargo lo hizo. Ella rió al notar la expresión apenada del chico.

—Ya que esto es una cita, tengo que informarte que no suelo dar besos hasta la tercera cita —le informó dándole un sorbo a su café— pero como eres lindo, tal vez haga una excepción contigo —le dijo esto último en un susurro pero lo suficientemente alto para que el escuchara y se sonrojara aún más.

—Eres algo directa, ¿no crees?

—Directa o no te sigo pareciendo linda.

—¡No es cierto!

—¿Entonces me estás diciendo que soy fea?

—No... yo...

Toby se había puesto rojo y cuando notó que la castaña estaba reprimiendo una risa, él no pudo evitar sonreír.

—Te estás divirtiendo a mis costillas —le reclamó con una sonrisa.

—Es que eres tan lindo cuando te sonrojas... nunca había conocido a un chico tan torpe, en el buen sentido de la palabra.

—¿Desde cuándo ser torpe es bueno?

—Lo es. No sabes cuan agradable es hablar con un chico que no está tratando de impresionar, o comportándose como un idiota pensando que así logrará agradarme.

—Pues... es agradable hablar con una chica que no cree que soy raro por mis tics y por mi notoria timidez.

—Sí, definitivamente rompería mi regla del beso hasta la tercera cita sólo por ti.

Toby bajó la mirada para esconder sus mejillas que de tornaban de un rojo escarlata.

...

Se dejó caer en su cama y cerró los ojos recordando cada detalle de su primera cita.

Su enfermedad estaba progresando y su sensibilidad al tacto apenas era perceptible para él, ya no sentía frío ni calor, pero cuando ella lo había tomado de la mano durante todo el trayecto de regreso a su casa, ¡cielos! Una sensación de calidez lo inundó.

Enterró su rostro en la almohada ocultando su boba sonrisa y tratando de ignorar la absurda sensación que crecía en su estómago.

Sus recuerdos no estaban ahí para atormentarlo.

No hubo dolor.

Su mente no lo torturó.

No hubo lágrimas que derramar.

Estaba a salvo de todos sus demonios porque durmió pensando en aquel pequeño gesto que movió su mundo.

Broken [Ticci Toby Y Tú] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora