Capitulo 5

1.3K 108 7
                                    

Hola que tal!! Espero que les guste este nuevo cap, y que disfruten la historia, gracias por los votos!

•Hannah se presentó a la hora del té como Narcissa lo había deseado, esta vez apareció por la chimenea, vistiendo un vestido gris simple, su cabello estaba trenzado perfectamente hacia un costado, dejando algunos mechones sueltos que enmarcaban su rostro y una cinta negra de raso decoraba el peinado de la joven, dándole un aspecto impecable. Narcissa la esperaba sola, con su mejor juego de porcelana china, hecha a mano especialmente para ella. La mujer sonrió ante la llegada de la jovencita, vestía un vestido negro un poco menos costoso que el de la noche anterior, y más sencillo pero no por eso menos elegante, Narcissa era conocida por ser una mujer refinada de alta sociedad, con modales y costumbres tradicionales de las familias sangre pura.
-Querida, llegas justo a la hora del té, estaba esperándote-la saludó mientras hacía una seña al tembloroso elfo que servía bocadillos el cual con un chasquido de dedos hizo que la tetera comenzara a servir té en las tazas de porcelana
-Espero no haberla hecho esperar señora Malfoy, mis disculpas-le dijo Hannah tomando lugar en el sillón frente a ella, cruzando sus tobillos como una dama y dejando su pequeño bolso negro a un lado
-Deja las formalidades de lado pequeña, llámame Narcissa- pidió ella con amabilidad-después de todo tu madre y yo éramos como hermanas-le comentó
Hannah asintió levemente mientras tomaba la taza ofrecida por el elfo, la bebida caliente cayendo por su garganta era una sensación reconfortante, su gusto era exquisito, pero era de esperarse que Narcissa Malfoy tuviera el más caro y único té de la región.
-he leído de usted en alguno de sus diarios-le respondió con tranquilidad bajando la taza de sus labios-es una lástima que mi padre la haya decapitado-
Narcissa casi se atraganta ante el simple comentario de la muchacha, hablaba de la muerte de su madre con tal naturalidad, como si fuera un comentario reconfortándola a ella por haber perdido a su amiga, sin maldad alguna.
-Si bueno, todos sabemos que Félix tiene un carácter voluble-respondió ella riendo intentando quitarle el peso al ambiente-Eres toda una dama ahora, tal vez no lo recuerdes pero de niña solía salir con tu madre por el callejón diagon, y llenábamos tu guardarropa con las mejores telas de todo el lugar-
-Si bueno, ahora poseo un diseñador personal, tengo gustos muy finos en lo que mi estilo compete- dijo mientras alisaba su falda de arrugas inexistentes-aunque mi padre aun insiste en vestirme como ramera para las reuniones de sociedad-
-Tu padre solo intenta buscarte un buen muchacho con una gran fortuna, Hannah-le dijo sonriente, si no fuera porque su hijo estaba comprometido con la señorita Parkinson, sin pensarlo la hubiera elegido como candidata para él, ella había sido la niña que nunca tuvo de pequeña.
-No me interesa la fortuna-respondió ella arrugando su nariz como si algo apestara en el lugar- tampoco los muchachos, no estoy buscando nada de eso por el momento-
-Toda muchacha necesita un chico que la agasaje linda, mi Draco estaría encantado de hacerlo si no estuviera comprometido con otra jovencita- le dijo risueña, Narcissa provocaba un sentimiento extraño en ella, aun no lo descifraba, no era muy buena con ellos, pero más tarde lo pensaría con más tiempo-pero veo que tú no tienes interés en esos asuntos...-
-¿me has nombrado Madre?-preguntó el rubio bajando las escaleras de mármol que guiaban a los dormitorios, vestía de manera sencilla, o tan sencilla como un Malfoy podía, su cabello estaba esparcido por su frente sin patrón alguno, y algo húmedo, señal de que había salido de la ducha
-Oh Hijo, ven, siéntate con nosotras-le pidió una alegre Narcissa mientras se corría dejando un espacio a su primogénito en el sillón y palmeaba el almohadón del sofá que se encontraba junto a ella- le comentaba a Hannah tu compromiso con la señorita Parkinson-
Draco frunció el ceño ante esto, odiaba hablar sobre su compromiso, Pansy era insoportable, sin embargo como buen Malfoy, estaba obligado a estar junto a ella en público y visitar su casa con algún presente al menos unas tres veces por semana, dando la imagen de buen novio y futuro esposo.
-Lamento si ofendí a tu prometida ayer, no fue mi intención molestarlos-le dijo son una sonrisa falsa la jovencita mientras miraba directo a él, quien sabía que mentía, ya que él era igual de mentiroso que ella
-No hay problema, se lo merecía-respondió al tiempo que su madre lo miraba con reproche, su deber como hombre era defender el honor de su prometida ante cualquier situación-es la verdad madre-
-Está bien, pero esos no son los modales que yo te eh inculcado Draco- recriminó a su hijo mientras este bebía un sorbo de té intentando ocultar en color rosado de sus mejillas-¿Vendrán tus amigos esta tarde?-
-Sí, jugaremos algo de Quidditch si no te importa madre-le respondió finalmente con educación
-Claro que no hijo-le dijo acariciando sus cabellos dorados con una escondida ternura, Hannah podía ver desde millones de kilómetros el amor que Narcissa tenía por su hijo, aunque esta intentara ocultarlo de todos-El es un excelente buscador, está en el equipo de Slytherin actualmente, de pequeño convencía a los elfos de que lanzaran frutas mientras él con su pequeña escoba que solo lograba alcanzaba unos metros de altura las atrapara, claro que se llevaba varios castigos de parte de Lucius-
Hannah rió abiertamente al imaginar al pequeño Draco con un uniforme de los Chudley Cannons siendo perseguido por unos preocupados elfos quienes le tiraban manzanas por toda la casa. El Draco del presente se avergonzó al instante, mientras un rosado volvía a cubrir sus mejillas.
El sonido de la chimenea activándose los distrajo salvando a Draco de la burla, dos jóvenes aparecieron empujándose y riendo, quitando la sonrisa del rostro de Narcissa, a veces no era fácil lidiar con adolescentes.
-¡Hannah que bueno verte aquí!-le dijo Blaise con entusiasmo, venia con un uniforme de Quidditch que parecía color verde y negro, al igual que Theodore, ambos con sus respectivas escobas en la mano-sabía que volvería a verte, debería visitar más seguido esta casa-la indirecta fue perfectamente recibida por Narcissa
-Sobre mi cadáver joven Zabbini-le contestó con una ligera expresión de molestia, al parecer ella no se llevaba bien con el travieso amigo de su hijo-ven querida te mostraré la mansión-
La jovencita se levantó con gracia y feminidad, saludó con un asentimiento de cabeza hacia Draco y luego a sus amigos a quienes les regalo una sonrisa y se fue tras Narcissa, pasando por la puerta del salón.
-Tu madre me odia, hermano- le dijo Blaise a Draco observando el lugar por donde las mujeres se habían retirado-¿desde cuándo se comporta así con las chicas que se unen al señor oscuro?-
-Al parecer despierta su lado maternal-respondió el rubio con molestia, no le gustaba la idea de que Narcissa consintiera a alguien que no sea el-ella era la hija de una amiga muy cercana a mi madre según lo que me comentó anoche-
-Y yo que pensé que tu madre le agradaban mas las chicas como Pansy, Astoria o Daphne -Theo comentó al tiempo que pensaba en el estereotipo de niña rica, mimada que las jóvenes Slytherin solían ser-¿Qué haces así vestido? Ponte tu uniforme y vamos a jugar-

Un Mortifago Angelical - Draco Malfoy Donde viven las historias. Descúbrelo ahora