Un Mortifago Angelical - Draco Malfoy

Capitulo 7

Buenas! Acá les dejo otro cap de esta historia, espero que les guste, espero comentarios!

•Su padre estaba en una misión hace varias horas, por lo que estaba de buen humor últimamente. Félix había sido enviado a causar disturbios en lugares muggles junto con otro de sus compañeros, para producir caos en el ministerio de magia, sin despedirse si quiera, lo vio colocarse la máscara junto con su capa negra y salir por la puerta principal en la mañana.
Luego de salir de la mansión Malfoy, la joven se dirigió a la base que utilizaba el señor oscuro para ocultarse, Colagusano fue quien le abrió la gran puerta de roble de la mansión Riddle, odiaba a ese ser asqueroso, cada vez que lo veía miraba con desprecio por esa rata repugnante, si bien el había sido el único según su padre que había buscado la forma de revivir a su señor, a ella aun no le cerraba del todo.
Sus tacos resonaron por el piso de mármol del lugar, al entrar por la sala, su señor se encontraba en un sillón de espaldas a ella, frente a la chimenea, junto a él, su fiel serpiente, quien reptó para pasar por su lado y desaparecer por la gran puerta seguida de Colagusano, tal vez la seguía para ordeñarla cosa que su jefe le ordenaba seguido.
-Ah querida, que gusto que llegaras tan pronto, necesitaba de tus servicios-le dijo con falsa alegría su señor, mientras se levantaba con gracia, y llegaba hasta ella para acariciar sus manos, en un intento de camarería
-anticipé un poco su llamada señor-respondió sonriente ella, sin demostrarle temor
-Lo imagine querida-rió el fríamente-pero ahora necesito utilizar tus habilidades, se que has estado entrenándolas-
El señor tenebroso volvió hacia su asiento, y le hizo una seña para que procediera con sus responsabilidades.
La joven se colocó frente a su señor, y extendió sus pequeñas manos hacia cada lado de su rostro, donde las posó con delicadeza. Pudo observar como el cerraba los ojos, sin relajarse y manteniéndose alerta. Por lo que dejó que su energía mágica fluyera hacia su mente, dejando a la joven en completo transe, sus ojos se tornaron blancos, dándole un aspecto espectral y su vista se perdía en un lugar lejos de allí.

Podía ver a Félix volar sobre los alrededores del puente del Milenio, en Londres, sabia donde quedaba pues había visitado el lugar en una de sus escapadas de la mansión. Vio al puente crujir, su padre repetía con la varita en alto algunas palabras al igual que otros Mortifagos junto a ellos, pudo observar la estructura retorcerse, automóviles muggles cayendo al agua, gente ahogándose, muchos gritos y sollozos por el lugar, pero también vio la aparición de agentes del ministerio, quienes lanzaron hechizos para detener el ataque.
Luego la imagen cambió, ahora se veía el callejón Diagon, la entrada a una tienda, seguramente la del creador de varitas que su señor tanto deseaba obtener. Observó varios hombres encapuchados entrando al lugar y otros destrozando las calles, torturando gente y creando un revuelo bastante grande. Se concentró en la tienda, vio salir de ella a dos encapuchados sosteniendo a un anciano algo inconsciente, su cabello blanco se encontraba con algo de polvo y sus ojos estaban cerrados mientras era arrastrado para salir del lugar, luego, todo volvió a su lugar.
Volviendo en sí, la joven observó al señor tenebroso quien esperaba deseoso una respuesta.
-la distracción funcionó, el segundo grupo tuvo suficiente tiempo para sacar a Ollivanders de la tienda, estarán aquí en unos minutos-le informó quitando sus manos del rostro pálido de su señor oscuro, él la miraba fijamente fascinado del cambio de color en sus ojos de blanco a azul-aunque apresaron a algunos en el puente-el señor oscuro había visto lo mismo que la joven, pero prefería que ella explicase con detalle ya que a veces lograba ver un poco mas allá.
Esto cambió completamente el rostro del hombre. Sus fosas nasales se abrieron dejando ver una ira acumulada en su rostro perfectamente legible. Sus ojos rojos ahora reflejaban las llamas de la chimenea la cual observaba sin verla en realidad.
-debo cambiar mi ubicación entonces, no podemos permitir que nos encuentren, tomaré la mansión Malfoy, como castigo por la misión fallida de Lucius en el ministerio, y tu padre tendrá lo que merece por ser un inepto también- dicho esto le hizo una seña para que se retirara, la joven gustosa de haber terminado su trabajo, se apresuró a volver a la mansión, seria la portadora de las nuevas noticias.