58

4.6K 253 34
                                    

Diciembre ha comenzado y junto con él los problemas y  la falta de ánimo. Era bastante absurdo tener un enorme árbol de navidad, lleno de luces y colores en medio de la sala y no sentir ese espírtu navideño ni esas increíbles ansias por las festividades de fin de año. 

De a poco todos en casa comenzaban a notar que mi salud iba de mal en peor, que mi rostro estaba más cansado, mi cuerpo más delgado aún, mis huesos más débiles... en fin. 

Una serie de cosas habían sucedido las últimas semanas; un día estaba de maravillas, al siguiente sentía náuseas y ganas de vomitar, al siguiente sólo quería dormir, entre otras cosas que indicaban que la ausencia de tratamiento ya estaba surtiendo efectos. 

Mi templanza no dejaba de ser la misma de siempre: Tranquilidad. Yo sólo fluía con el cáncer, lo dejaba ser, lo vivía cada día y me adaptaba a los síntomas. Pero mi familia y novio no sentían lo mismo, ellos estaban todo el tiempo al borde del colapso, preocupados, estresados y angustiados. 

Mike, Toffee y Tiff se habían vuelto muy irritables, agregándole a todo que se encontraban en los examenes finales de la etapa escolar - y universitaria en el caso de Tiff - y tenían muchísimo que estudiar. Papá discutía con Mayra más seguido, Mimi me llamaba cada dos por tres para saber cómo me sentía y recordarme que pronto viajaría de nuevo a Londres, Niall había dejado de sonreír tanto como lo hacía siempre, aunque yo estaba muy consciente de que lo intentaba, y mis amigos... ellos eran quienes me levantaban el ánimo, iban a casa cada vez que podían, dejando los estudios a un lado para hacernos reír a Niall, a Toffee y a mí aunque fuese un rato, entonces volvíamos a ser los mismos. Los chicos seguían teniendo la misma actidud de siempre y les agradecía muchísimo que así fuera, porque la casa ya parecía funeral.

Al ser época de exámenes finales, el insituto dejaba de ser internado para que todos pudiesen dedicarse a estudiar en sus casas, pues las clases ya habían finalizado, por eso Nialler complementaba los estudios con el tiempo junto a mí y se pasaba las tardes estudiando en mi casa, mientras yo veía series, películas o hacía dibujos de él, sin que se diera cuenta. Puede sonar algo sicópata, pero al no querer -ni deber- distraer su mente inserta en sus apuntes, me dedicaba a capturar su imagen en un papel... bueno, en varios.

Me hacía sentir mal verlo siempre tan serio e intentaba hacerlo reír tanto como me era posible. Excepto después de hacer el amor. Despues de hacer el amor él siempre sonreía mucho y me recordaba cuánto me amaba, me acariciaba la cabeza y me daba besos suaves y pequeños en los párpados.  

 Algunos días yo iba a su casa en vez de él a la mía, y cada vez que lo hacía Maura me esperaba con grandes cantidades de galletas, pasteles y demases. Estaba convencida de que así recuperaría mi peso, Niall solía negar con desaprobación y reírse, pues los dos sabíamos que era ridículo, pero adorable de todas formas.

Lo bueno de todo esto, era que Papá, Mimi y Maura se habían puesto mucho más permisivos de lo que probablemente hubiesen sido en una situación corriente. Quiero decir que muchas veces Niall pasaba la noche conmigo en casa sin que nadie se alarmara o hiciera un escándalo, lo que nos permitía pasar más tiempo juntos, aunque debo admitir que en un principio me asustaba un poco llegar hasta esa instancia, pues significaba que claramente mucho tiempo de vida no tenía, pero quién sabría de eso más que yo, la de la enfermedad.  

Hoy es diferente. Hoy casi no puedo hacer cosas por mí misma, más que levantarme de vez en cuando, pero en realidad todos tratan de evitar que lo haga. 

Los chicos ya están de vacaciones y Niall prácticamente está viviendo en mi casa. Mimi también, al fin lograron convencerla de que lo hiciera.

Lo que más siento de todo esto es que no puedo mirar cómo nieva por la ventana, ni contemplar las luces del árbol de navidad, tampoco he podido envolver todos los regalos que compré para mi familia, ni los dibujos que pretendo regalarle a Niall por navidad. 

Eternidad (corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora