Capítulo 52- Armario

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Al verlo, caí de rodillas al suelo, llorando.

Mis padres, escucharon mi llanto y vinieron corriendo a mi habitación, preguntando sobre lo que sucedía.

-Sebastian arruinó mi ropa- dije, llorando, abrazando, lo que antes era una top y ahora es una remera-.¡¿QUÉ HAS HECHO?!- le grité a Sebastian-. ¡¿CÓMO TE ATREVES A DESTRUIR MIS COSAS?!

Tomas, Julián y mis padres, pusieron cara de horror, mientras me miran.

Sentí una leve brisa en la espalda.

-Juli... Vamos a tranquilizarnos...- me dijo mi madre, pero la interrumpí.

-¡ME DESTRUYÓ TODA MI ROPA FAVORITA!... ¡ESTUVE AÑOS BUSCANDO ESA TOP!- dije y señalé la top negra, que tiene una foto de BVB en la parte delantera y tiene 5 firmas-. ¡NO TIENEN NI IDEA DE LO QUE ESTUVE ESPERANDO, PARA QUE ME FIRMEN LA TOP!

-Tranquila niña... Fácilmente, te puedo conseguir otra- dijo Sebastian.

Lo miré mal.

Me acerqué a Sebastian y levanté la cabeza, para mirarlo a la cara (me saca 3 cabezas de altura).

Agarré sus pelos y bajé su cabeza a mi altura.

Le regalé una cachetada.

Mi mano le quedó marcada en su mejilla.

-Lady Juliana... ¿Por qué me ha abofeteado?- dijo Sebastian.

-Se dice "golpeado", no "abofeteado"- le corregí.

-En realidad, se dice "abofeteado". El significado es el mismo- dijo.

-Si sabes como se dice... ¿Por qué lo dices mal?- dije.

-Yo lo dije bien, usted es la que complica cosas simples- dijo Sebastian.

Le volví a pegar.

Agarré a Sebastian de la mano y lo arrastré al balcón de la habitación, donde con una patada (en la cual liberé todo mi estrés y rabia), salió volando y cayó al suelo en cuclillas.

Empezamos a pelear, bueno, yo lo golpeaba y él intentaba escapar, mientras los otros 4 estaban en shock, mirando como espectadores.

Continuará...


Editado: 03/01/2019

La Reencarnación de la Princesa HíbridaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora