Capítulo 41

12.1K 510 18
                                    

Habiamos nadado de vuelta a la orilla, tuvimos que escalar unas rocas pero antes de eso Alan había insistido en que la ropa pesaba demasiado como para llevarla puesta cuando estaba empapada, así que cuando me desvestí para comenzar a estrujar el vestido que con tanto cuidado había elegido esa mañana, Alan me tomó por la cintura empujándome junto a su cuerpo (que ahora solo vestía ropa interior) hacia el lago nuevamente.

- ¡Alan! Por Dios, y yo que ya comenzaba a secarme. - alegaba mientras nadábamos en una especie de baile juntos y abrazados, flotando a la merced de la corriente que se había relajado un poco, caía la tarde y ya comenzaba a darme hambre.

Sin embargo, poco a poco Alan había comenzado a darme besos subiendo desde el cuello hasta la clavícula y luego mordiendo un poco la liga de mi sostén. Me descubrí en paz, mientras que mis quejas por el frío se veían suplantadas cada vez mas silenciosas por sonidos diferentes.

- Alan.. - susurré. - Júrame que jamás.. Y succionó ese pedazo de piel sensible entre el hueso de mi mandíbula y el lóbulo de mi oreja. - ¡Ah! - y perdí el hilo de lo que estaba hablando, tentada por tantas caricias. Pensé en que estábamos en un lugar público, que cualquiera podía vernos, pero no me importó.

- ¿Que quieres que te jure? Alisson, soy capas de darte lo que sea.

- Júrame que jamás me harás extrañarte, jamás te alejes tanto. - y de pronto como si estuviera cumpliendo con su palabra, me acercó a su cuerpo. Tomó mis piernas que con cuidado pero con agilidad, y las enrolló a sus caderas, yo no era capas de moverme.

Besó mis labios, los tomó entre sus dientes, disfrutó de cada movimiento.

Casi sin darnos cuentas la ropa que había entre nosotros comenzó a quedar de mas, bajando un poco mis bragas y sus bóxers me entregue a el, mi novio.

Alan. Ahora besé yo sus labios. Sumergí mis manos en el agua y acaricié su abdomen, su espalda baja y los músculos se movieron relajados y luego tensos con cada embestida.

Me susurro al oído te quiero, Alisson Peters, te juro eso.

...

Alan había traído gentil mente mi camiseta favorita de su clóset (presidiendo que me atraparía y me empaparía hasta las patas): un chaleco muy delgado gris que se me resbalaba por los hombros, y algunas otras prendas cómodas para poder dejar mi vestido secar al sol.

Nos subimos a la parte trasera de la camioneta, abrimos una manta y nos sentamos a comer unos sandwiches y un par de frutillas y uvas que Alan se había anticipado a preparar.

Me había comido casi todas las frutillas para antes de que comenzara a bajar el sol, y Alan me miraba divertido porque tenía todos los dedos y los labios embarrados en jugo de la fruta, amablemente el me limpio con su lengua, a lo cual grité de asco, pero a el le pareció que debía estar sorprendida por su movida seductora.

- ¿Asi que esa es tu jugada? ¿Cuantas chicas han caído con esa misma técnica? - dije recostándome sobre su estomago, usando su camiseta gris para limpiar los restos de su saliva de mis dedos.

- Mas de las que tu crees. - y se aproximó a levantar y subir las cejas perversamente. Lo golpee en el brazo. Suspiró .

- ¿En que piensas? - dije tomando en cuenta ese suspiro.

- Nada. - dijo el rascándose la nuca, mientras se llevaba a los labios un racimo de uvas.

- Dame una. - pedí, refiriéndome a la uva. Me la acercó a la boca y cuando estuve a punto de tenerla entre mis labios me la arrebató, llevándosela a su boca. Hice un puchero antes de notar que se me acercaba rápidamente con la fruta entre los labios como si fuera a darme un beso.

Solo por mi Profesor (#1) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora