Solo por mi Profesor (#1) TERMINADA

Capítulo 42

(Retomando la escena en el carro de Alan en su primera cita con Alisson del capitulo 41, luego de que Alisson compartiera todo lo que paso en los Flashbacks con él).

...

Habíamos pasado casi una hora en la parte trasera de la camioneta, mientras contestaba las preguntas de Alan. En su rostro se veían muchísimas emociones reflejadas: compresión, tristeza, rabia.

Cuando el frío nos golpeo de un momento a otro, nos refugiarnos dentro de la camioneta con la calefacción encendida a tope, aunque a mi se me ocurrían muchísimas otras formas de calentar el ambiente cuando estábamos los dos solos.

Alan preguntó mucho, y yo respondí a casi todo. Me di cuenta de que si yo quería conocerlo a el, yo también tenía que dejar que el me conociera a mi.

<< ¿Drake era el único con acceso a la contraseña de tu computador?
-No, Penny y Sara también la conocen.

¿Tu padre también recibió ese e-mail?
- Si, pero no me importó borrarlo de su correo, ni siquiera se si lo leyó o no, jamas me ha hablado del tema.

¿Que hicieron tus dos amigos Dion y Finn luego de saberlo todo?
- dejaron de ser amigos de Drake, lo apartaron un poco del grupo. Me defendieron y guardaron mi secreto de modos distintos: Dion evita el tema para que no sea incomodo, Finn pregunta por mi siempre que puede.

¿Alguna vez Drake te ha dado alguna explicación de porque lo hizo?
- No, pero tiene claro que una buena parte de nuestro grupo esta de mi lado. Jamas ha pedido disculpas, jamas hablamos. >>

Intento insinuar preguntar si esa era la razón por la que no deseaba ayudarlo con el artículo, pero desvié el curso de esa conversación de inmediato.

Sin embargo jamas pregunto como papa había llegado a parar en un hospital, pero agradecía que no preguntara.

...

Cuando cortamos el tema de pronto, me sentía mucho mejor, hasta que Alan alzo las llaves del auto entre sus dedos, tintinearon al chocar con sus dedos.

- ¿Manejas?

Abrí los ojos como platos y las mejillas me ardieron. Alan me miro incrédulo y descifró lo que sucedía.

- ¿Vas a cumplir 18 años en un mes y no sabes manejar todavía? - preguntó Alan incrédulo antes de reírse, tapé mi rostro con mis manos, en parte avergonzada y también un poco halagada, por aquella mención que simulaba tener presente la celebración próxima de mi cumpleaños (__ de noviembre, para que todos lo anoten en sus agendas).

- Mi hermana Sara prometió enseñarme el verano pasado a manejar un carro manual, pero jamas tuvimos tiempo para eso. Solo se manejar automáticos - me sacudí un poco: el ambiente entre nosotros volvía desde un tono triste al juguetón usual, y decidí acomodarme a el. - Al menos yo cuando, si aprenda - aclaré. - sabré manejar enserio, no como tu, que siempre anda distraído: mirando y tocando hacia otras partes, en especial a tu usual copiloto.

El alzó las cejas como respuesta suficiente, soltó un de esas risa viejas que hace mucho no oía, esas de superioridad que solía oír mas a menudo cuando estaba mas cercana a ser solo su alumna que a una relación mas intima con el, recordé que (por mas que me costara entenderlo) ese lado era parte de mi nuevo novio también. Me encantaba pensar en que el era mi novio solamente.

- Manejas tu. -

..

30 minutos después y yo no me atrevía a presionar el acelerador. El embriague del auto y todos los cambios eran difíciles de memorizar, en especial si tenia esa mirada autoritaria supervisando cada uno de mis movimientos, no era la forma en la que me gustaba llamar su atención precisamente.