Solo por mi Profesor (#1) TERMINADA

Capitulo 5

Me había cortado el cabello hace un par de semanas, me gustaba de vez en cuando hacer cambios en mi rostro o mi guarda ropa. Pienso que te hacen ver incluso mejor que con mil kilos de maquillaje. Algo nuevo que llame un poco la atención.
Ahora llevaba el cabello cafe un poco mas arriba que los hombros y de la espalda se veía mas largo debido a que la peluquera había cortado por capas. Anteriormente tenia el cabello cercano al culo. Y me gustaba así, solo que ahora tener el pelo corto facilitaba mucho las cosas de muchísimas maneras. La única forma en la cual no me ayudaba mucho, y solo ahora me daba cuenta, era que no podía ocultarme detrás de el cuando un hombre de traje y barba te mira intensamente durante toda una clase.
Lenguas era la primera asignatura los martes. Solo para mi desgracia.

El profesor Wall nos dejo una investigación en parejas para nuestra siguiente clase, la cual no llegaba hasta el viernes. Y lo agradecí. A mi me había tocado prepararla con Taite, quien era un chico que se sentaba al final de la sala. Corrí en su búsqueda cuando por fin se me daba la posibilidad de abandonar la primera fila. En otras palabras, salir del alcance visual del profesor. La clase terminó y me aproximé a los ramos a continuación.

Historia me encantaba. No se porque pero simplemente se me hacia muy fácil y ademas me gustaba mucho la forma de enseñar de la profesora Gyinn.
El almuerzo llego deprisa(para mi sorpresa) y me senté con los chicos de siempre, mi grupo se formaba por Penny y Kenna siendo las mas cercanas a mi, Finn, Sylvana, Dion, Briana, Tiffany y Drake.
Drake estaba sentado en otra mesa junto las ventanas.
Con Kenna fuimos a por nuestras bandejas. Almorzamos sopa de tomate, ensalada de espinaca, una limonada y una manzana.
Cuando terminamos nos llevamos nuestras manzanas y yo mi limonada, para irnos a conversar a otra parte. Tiffany se nos unió.
Caminamos hasta la canchas del extremo mas alto de la escuela. Nos sentamos en las bancas, eran alrededor de las 1:30pm pero no lo parecía. En invierno apenas sale el sol, y comenzaba a arrepentirme de no haber traído un abrigo.

- Alisson! - gritaron Tiffany y Kenna al unísono.

- ¿Mmm? - dije levantando las cejas y haciendo una mueca extraña con los labios.

- Tiffany ha estado preguntando como cinco veces que has hecho para las vacaciones de invierno. - respondió Kenna. - ¿Sucede algo?

- Estoy bien. - respondí casi de malas, Kenna me miro raro. - fui a visitar a mis tios a California.

- Escuche que estuviste por el centro mucho en el verano, ¿En que minuto fuiste a California? - dijo un poco desconcertada, un poco intencionada.

Me aclare la garganta

- Encontré un trabajo de verano en el centro, Tif. Y solo por el primer fin de semana de las vacaciones. - sonreí. Ella me sonrió de vuelta. No le había dado la respuesta que ella estaba buscando. Cuando hizo un amago de volver a hablar, cambie el tema - ¿Que hay de ti Kenna? Apuesto que te pasaste las vacaciones de lo mejor con la familia de tu papa.

- Sii! Fue increíble...

Deje de escuchar no porque no me interesara la historia de Kenna, me importaba de hecho. Solo que el tema que había tocado Tiffany me había dejado pensando. Me comí mi manzana mientras miraba como las nubes se adueñaban del cielo.

....

Como tal había predicho, las nubes no tardaron en rellenar el cielo, y una llovizna abrazo a la escuela con un frío petrificante.
Me dieron ganas de llorar cuando comenzaba a intensificarse la lluvia y la hora de volver a casa caminando se acercaba mas y mas.
No valía la pena taparme con nada, el agua ya se había metido hasta dentro de mis calcetines y no podría estar mas empapada, así que cuando digo que estaba entumida de frío desde la punta de los pies hasta la ultima neurona de mi cabeza, era un verdad que no podía negar.
No llevaba ni la mitad del camino cuando un auto negro se paro a un costado de la cera.

- Te noto en apuros... - dijo la misma voz ronca y profunda. - ¿Vives muy lejos?

Me voleé con una mano en la frente para que la lluvia no estorbara mis ojos. La capucha de mi suéter cayo de mi cabeza pero no me moleste en devolverla a su lugar, ya estaba empapado de todos modos.
El Profesor Wall había bajado la ventanilla por completo y parecía que no le molestaba bañarse no solo a el sino al interior de su auto con esa lluvia macabra. Sus ojos claros y penetrantes estaban entre cerrados y se le formaban unas arrugas atractivas en la nariz al contraerla y a los costados de los ojos. Tenia la boca media abierta y esperaba por mi respuesta

- Solo a... Unas cuantas calles, Profesor. - intente sonreír. - No se preocupe, procuraré no resfriarme y ocupar aquello como excusa para no completar su investigación.

El río, fue mas como un "Ja" sarcástico.

- Voy a asegurarme de eso, señorita Peters. Vamos, suba rápido. - dijo antes de subir la ventanilla

Dude, pero me encaminé de todos modos a la puerta del copiloto.
El interior del auto estaba caliente y la calefacción daba a mas no poder. El profesor vestía con una chaqueta negra y una bufanda de color azul marino.

- Gracias. - susurre cuando cerré la puerta detrás de mi.

Me echo una mirada de pies a cabeza antes de murmurar algo así como un "Dios, las niñas de hoy en día".
Se quito su chaqueta y me la tendió, para revelar un chaleco color rojo vino de lana.

- Tómalo. - me tuteo.

No podía negarme, lo tome y me lo puse. Me quedaba gigante. Me lo cerré hasta el cuello, como solía hacer. Parecía como si no anduviera con nada debajo.

- Gracias.

- Dices esa palabra con mucha regularidad. - dijo.

No se porque, pero me sonrojé.

- Eres muy amable. - dije, el sonrió, nuevamente parecía no estar riéndose de mi comentario, sino de mi. - Claro, solo cuando no esta haciendo clase.

Solo entonces soltó una genuina sonría. Como aquella que me había regalado cuando le confesé que le sobraba honestidad cuando se trataba de criticar a la gente, recordé lo incomoda que me había sentido al no poder decírselo mirándolo a los ojos ya que me encontraba literalmente entre sus piernas. Sus dientes blancos como la nieve rodeados de esos labios carnosos y rosados adornados de una tierna barba, aquello hizo mejor trabajo que la calefacción en calentarme.

- Estaría bien si me indicaras por donde tengo que ir... - dijo un poco mas incomodo. Yo me había quedado mirando su perfil un buen rato. Y es que tenia una nariz recta y mentón fuerte que eran dignos de apreciarse.

- Ah! Oh... Mmm... Claro, yo le aviso cuando tenga que doblar. - asintió y subió el volumen de la radio. 'Isn't she lovely' sonaba en la radio y hice un torpe intento de no ponerme a cantar.
Distraída por la música, el señor Wall continuo de largo en la esquina de mi casa y me alarme.

- ¿Que sucede? - pregunto el

-¿Ah? - dije yo atontada y un poco preocupada.

- Nada, solo es que has dejado de tararear la canción y te has quedado mirando la calle como si hubieras visto algo. - dijo con un poco de risa.

- Es solo que, ¿puede darse una vuelta en U? Allí ay una parada! - dije- me he distraído, nos hemos pasado la calle.

- Claro que la hemos pasado, eres extrañamente torpe.

Ese comentario quizá no tenia intención de herirme, o quizá si. Solo que me impacto. Mucho.

- Si tanto le molesta, Señor Wall, no tengo problema en continuar caminando. - dije enojada

- No me molesta. - dijo falsamente - Tanto.

Me reí. Utilice una de sus risa. La misma risa irónica que decir "no me importa lo que me digas, es jodidamente estupido todo lo que comentes sin importar que" tipo de risa.

El me respondió con exactamente esa misma clase de risa.