All their little things | Fan-fic de Louis Tomlinson y One Direction

LXXVIII

[Punto de Vista Alba]

- A ver, vamos a analizar la situación -Judith dejó el bolso sobre la mesa del salón y se quitó el abrigo.

Todas hicimos lo mismo. Eran las diez de la noche, más o menos, y los chicos ya se habían ido a casa. Habíamos pasado una tarde genial con ellos, como siempre, pero sí había una situación que analizar... Más que nada para que Jud dejara de estar tan preocupada.

Después de esa misteriosa llamada a Zayn, no había vuelto a ser el mismo. Y, bueno, supongo que ninguna de nosotras lo había querido decir, pero todas lo pensábamos: sobre todo, no había vuelto a ser el mismo con Jud.

Nos sentamos en el sofá y Ana encendió la tele buscando MTV para tener música de fondo.

- Yo es que así no puedo chicas, ¿habéis visto la carita que traía? No le puedo ver así a mi lado porque no, porque no puedo, porque me hace daño.

- ¿Qué puede haber pasado? -Preguntó Judith mirándome. Me encogí de hombros.

- Ni idea.

- ¿Por qué no le preguntáis vosotras? -Jud casi suplicó con la mirada-. Tiene más confianza con vosotras, os conoce más...

- Si fuera algo que quisiera compartir con nosotras, ya lo habría hecho.

- Judi tiene razón, sino lo ha hecho ya... -Rosa la apoyó-. Aunque, por otro lado, a lo mejor no era el momento adecuado, simplemente. Quiero decir, estábamos en el Starbucks, luego en la calle, luego en un restaurante. Quizá quiera contárnoslo tranquilamente.

Asentimos. Puede que Rosa llevara razón.

- De todas formas le preguntaré a Louis -Judith se recostó contra el sofá-. Al menos le diré que si Zayn necesita algo... Que sabe donde estamos.

- Yo también lo hablaré con Niall.

- Pues yo, chicas, lo siento. Pero prefiero hacer otras cosas con Liam.

- Ya está la guarrona de Ana -Judith la lanzó un cojín.

- ¡Hablarás tú mucho con Louis cuando estáis solos!

- ¡Pues claro!

- Pues más tonta eres tú. Tengo yo a Louis y sí que iba a hablar, sí. Del tiempo.

- ¡¡Ana!! Pero qué os pasa a todas hoy con él, dejadle en paz.

- Mira como se pica... -Rio Rosa.

Negué con la cabeza mientras sonreía. Qué amigas tenía.

Judith se levantó y señaló a Ana y a Rosa en la distancia.

- Os tengo vigiladas.

Caminó hasta la cocina y reímos.

- Chicas, en serio, estoy preocupada. No puedo parar de pensarlo. No quiero verle mal. A él no. Es que no puedo, no puedo.

- Tranquila, Jud. Seguro que no hay nada por lo que preocuparse -traté de animarla.

Pero algo me decía, no sé por qué, que todo eso tenía que ver con Perrie... Y entonces sí había que preocuparse.

[Punto de Vista Judith]

Las clases de esa mañana se me hicieron eternas. No, eternas no, lo siguiente a eternas. A media mañana, en una clase en la que estaba sola, me llegó un mensaje de Liam avisándome de que les habían invitado a una fiesta y que, por supuesto, era obligatorio que les acompañáramos. En esta ocasión, la fiesta se celebraba en una discoteca que habían cerrado exclusivamente para los invitados. Tenía buena pinta, la verdad. Así que con esa expectativa la mañana se hizo aún más larga.