All their little things | Fan-fic de Louis Tomlinson y One Direction

XXXVIII

[Punto de Vista Niall]

Rosa estaba hoy aún más preciosa que ningún día, si eso era posible. No podía parar de mirarla y ella lo sabía; y no me importaba. Ya era más que evidente lo que había entre nosotros, incluso sin haber pasado nada. De momento.

Llegamos a casa y fuimos directos a dejar las tres mil bolsas con comida y bebida que llevábamos.

- Luego que por qué tengo estos brazos -dijo Louis, dejando encima de la mesa las tres bolsas que había traído-. Me cargáis con todo lo pesado, pues a ver... Mira, Liam, mira -se quitó el jersey y le mostró su brazo sonriente.

Siempre estaban con esas cosas.

- Aparta, Tommo, que te tumbo de un golpe -Liam también dejó las bolsas que llevaba en la mesa y le miró amenazante.

- Never in your wildest dreams... -Tarareó Louis.

Quedamos en subir todos a a colocar un poco las cosas de cada uno; las chicas se habían pedido la habitación con el armario más grande para poder dejar ahí la ropa de las tres. Aun así, no las cabía. Tardaron aproximadamente tres cuartos de hora en volver a bajar.

- Me ofrezco para hacer la cena esta noche -dijo Alba nada más entrar en la cocina.

- Y yo -dijo Harry al instante-. Esta noche tocaba pizza, ¿no? Uf, cuanta tarea tenemos Alba... -Apoyó el codo en su hombro e hizo cómo que se secaba el sudor de la frente.

- Has estado rápido -sonrió Alba.

Ambos rieron.

- Ya hemos dejado claro quien tiene más morro de la casa, de acuerdo -dijo Liam-, ¿quién hace las camas? Hay que poner sábanas y demás.

- A mí no me importa -se ofreció Rosa.

- Ni a mí -hice lo mismo de inmediato.

- Pues ya está, vosotros dos, y Liam y Zayn os ayudan. Judith y yo nos vamos a probar la tele -Louis la cogió del brazo y salió de la cocina arrastrada por él.

- Ese -le señaló Harry mientras se iban- es el que tiene más morro de la casa.

- Sin duda, esta noche podríamos tenerles de camareros a cambio de esto -propuso Zayn.

- Me parece que se lo tienen muy merecido -dije, después miré a Rosa-. ¿Vamos? -Asintió.

Subimos hasta el segundo piso con Zayn y Liam, para que nos dijera de donde sacar cada cosa. En apenas cinco minutos nos habíamos quedado solos.

- No sé cuánto tiempo llevo sin hacer una cama tan bien hecha.

- Serás vaga -dije, mientras la empujaba-. Seguro que tu habitación está hecha un desastre.

- Oye, no te pases. Estás hablando con una dama.

- Con una dama vaga y desordenada -me dio en el brazo y me asesinó con la mirada-. Es inútil que me mires con odio cuando sé perfectamente que no me odias -sonreí.

- Pues no tienes mucha idea, perdona que te diga -me contestó al instante.

- ¿Y tú qué sabes?

- Más que tú.

- No, no, yo sé lo que me digo... -Me acerqué a ella con una sonrisa pícara.

- No sabes bien...

- ¿Ah, no? -La corté, consciente de que esa conversación acababa de tomar un rumbo que me gustaba-. Has dicho "no sabes bien", pero... ¿Cómo vas a saber a qué sé si no me has probado?