[Punto de Vista Liam]
Desperté de golpe y miré una y otra vez a mi alrededor, sin reconocer en un principio dónde me encontraba. Poco a poco el recuerdo del viaje a Estocolmo y todo lo demás empezó a llegar a mí; pero, la verdad, tardó un buen rato. Visualicé cada lugar de mi habitación del hotel, sintiéndola extraña; demasiado extraña. No solía pasarme eso, estaba más que acostumbrado a viajar de un lado a otro y a dormir en camas diferentes cada semana. Supuse que la razón de sentirlo así, de esa manera, en esos momentos, era simplemente que yo también me sentía extraño. Como si no fuera yo.
Sabía qué necesitaba; puede que no para cambiar del todo esa sensación, pero sí para aliviarla en parte. Me levanté, me di una ducha caliente de al menos quince minutos, me vestí y bajé a buscar al resto. Niall y Harry estaban sentados frente a una mesa, charlando tranquilamente, y Louis apareció poco después de mí. Esperé a que Zayn llegara para comenzar a hablar.
- Chicos, hay algo que tengo que contaros y...
- Por fin -me interrumpió Louis, mirándome con cara de pocos amigos; algo bastante inusual en él, al menos con esa seriedad que se intuía que tenía en aquel instante-. ¿Vas a contarnos qué está pasando? -Frunció los labios y me miró con los ojos muy abiertos.
Hice una mueca. Era evidente que todos sabían qué estaba pasando y, sin embargo, estaban esperando a que fuera yo quién lo contara. No me extrañó que estuvieran al tanto, Zayn y Niall ya habían visto a Sophia entrando de nuevo en casa...
- Sophia y yo estamos viéndonos de nuevo.
- No lo habíamos notado... -La ironía de Niall era muy apreciable. Mordió la tostada que tenía frente a él y me miró de nuevo-. ¿Qué piensas hacer?
- No lo sé -reconocí, cruzándome de brazos y recostándome contra la silla-. Parece tan cambiada...
- ¿Otra vez? -Preguntó Louis dejando escapar una risita-. ¿Pero cuántas veces cambia esa chica? Ya parecía cambiada la otra vez -hizo una pausa, mirándome de nuevo con seriedad-. Y mira cómo salió todo.
Sabía que no la aguantaba.
- Liam -la voz calmada de Harry hizo que dejara de mirar a Tommo y me concentré en él-, no vamos a prohibirte verla, mucho menos volver con ella...
- Bueno, eso habrá que hablarlo -le cortó Louis.
- Tommo, no vamos a prohibírselo. No somos quién para hacer eso...
- ¿Pero sí somos quien para aguantar cómo vuelve a hacerle daño? -Zayn tomó la palabra por primera vez.
Apoyé los codos en la mesa y dejé caer la cabeza sobre mis manos.
¿Iban a discutir por mí?
- Es su decisión, y tenemos que respetarla -continuó Harry.
- Es una decisión estúpida -insistió Louis-. ¿Qué pasa con Ana? -Sabía que se dirigía de nuevo a mí así que levanté la vista-. ¿No estás bien con ella?
- Sí -admití-. Es una chica increíble.
- ¿Entonces? ¿Por qué no?
- Porque no -contesté.
Louis bufó y miró hacia otro lado.
- Louis -Harry le dio en el hombro-. Parece que va contigo la cosa, y no es así, es su...
- No me digas otra vez que es su decisión, no cuando somos nosotros los que recogemos luego los pedacitos de Liam cuando Sophia vuelve a comportarse como una auténtica...
- ¡Vale! -Lo detuvo Niall, aunque todos sabíamos de sobra qué venía a continuación-. Liam, Louis lleva razón. Y Harry también. Es tu decisión, pero... Si la eliges, será una mala decisión.
- Yo no he dicho que no sea una mala decisión -Hazza se puso rígido en su asiento y les miró a todos-. Me lo parece. Pero es algo que tiene que decidir él, no nosotros. Incluso aunque luego nos influya. Si tanto te molesta que eso ocurra, Louis, muy fácil, no te impliques cuando veas a Liam mal, si es que vuelve a estarlo.
Louis rió a carcajadas.
- Qué estupidez acabas de decir, Hazza. Cómo si eso fuera posible -Louis agachó la cabeza y juntó sus manos.
- En cualquier caso, tanto si quieres volver con ella, como si no, nosotros estaremos aquí. Todos. ¿Verdad? -Preguntó Harry. Todos asintieron.
- Incluso aunque sea una mala decisión -añadió Niall, enarcando una ceja.
- Ni siquiera sé qué hacer -sentí sus miradas sobre mí pero yo me concentré en la taza de café que sostenía Louis entre sus manos-. Estos días he estado viéndome con ella y con Ana al mismo tiempo, me siento... Fatal. Pero Ana tiene algo que hace que no pueda apartarme de ella. Y a la vez, Sophia... De verdad parece cambiada. Me ha pedido perdón por cada mínimo detalle que hizo mal, por todo. Ha reconocido su culpa como nunca lo había hecho antes...
- ¿Crees que de verdad ha cambiado? -Me preguntó Zayn-. ¿Crees que de verdad se ha dado cuenta de que lo estaba haciendo mal?
- Empiezo a creerlo, sí.
Silencio.
- Si vuelves con ella... -Comenzó Louis-. Ten cuidado, ¿vale? -Sonreí mientras asentía. Realmente se preocupaban por mí-. Y no me malinterpretes. Claro que voy a estar aquí, todos vamos a estar aquí si la cosa sale mal. Simplemente no quiero que vuelva a salir mal. No quiero volver a verte mal. Por ella, no.
Afirmé de nuevo con la cabeza.
- Tendré cuidado. Iré... Despacio. Al menos todo lo que pueda.
Niall puso una mano en mi hombro y nos miramos unos segundos. Después volví la vista hacia todos, que también me miraban.
Puede que la cosa saliera mal, de nuevo. Pero era agradable saber que podría tenerles a ellos pasara lo que pasara.
[Punto de Vista Judith]
- ¡¡Vaya, vaya!! Mirad quién es la nueva famosilla.
La voz estridente de Ana me sacó de mi concentración. Levanté la cabeza, sin dejar caer el boli sobre la mesa, y maldije el momento en que decidí ponerme a estudiar en el salón en lugar de en mi habitación. A pocos metros de distancia, Ana y Alba me miraban sonrientes.
- ¿¡Qué pasa!? -Gritó Rosa, desde el baño.
- ¡¡¡Tu amiga, que está por todo Twitter!!! -La contesté Ana.
Abrí los ojos como platos y cogí el portátil, a mi derecha, abriendo la nombrada red social. ¿De verdad quería hacer eso? Mmm... Podía imaginarme bastante bien de qué se trataba. Pero lo hice. Introduje mi usuario y mi contraseña, y me detuve ante el buscador antes de decidirme.
- Pon Louis Tomlinson, ponlo, ponlo -dijo Ana, adivinando mis pensamientos.
Efectivamente, lo hice de nuevo.
Y en menos de cinco segundos tenía a mi amiga detrás de mí, a Alba también, y Rosa salió del baño en albornoz y con una toalla en su pelo, mojado tras la ducha.
Ese era el panorama detrás de mí.
Delante de mí... Muchas, muchas, muchas fotos de Louis y mía por todas partes, de la mañana del día anterior, frente al portal de casa. ¿Pero qué hacía la gente? ¿Nos seguían? Apenas habíamos estado tres minutos ahí y había al menos veinte fotos. Hablando. Cogidos de la mano. Abrazados. Besándonos.
Dejé escapar una risita, y me sorprendí a mí misma.
- Joder, Judith, no le dejas respirar al chico, eh -rió Ana detrás de mí. La di un pequeño manotazo sin girarme a mirarla y suspiré.
- Me da igual, la verdad. Quiero decir... ¿Qué puedo hacer? Íbamos a estar tres días sin vernos. No voy a despedirme de él con un beso en la mejilla.
- Claro que no, sobre todo si lo que quieres hacer es comértelo, guarrona -insistió Ana y reímos.
Curioseé varios comentarios -cuando digo varios... Probablemente fueron más de cien. Probablemente no; seguro.
En general, la gente se alegraba por Louis. Y eso me hacía sonreír. Luego había quien me llamaba de todo, nada bueno. También había quien sólo sabía utilizar la palabra "Larry", lo cual me hizo resoplar realmente. Y también había quien se mostraba indiferente, a la espera de qué iba a pasar entre nosotros.
- Así que así es la vida del famoseo... -Siguió comentando Ana. Las tres no se habían movido del sitio-. Poner su nombre en Twitter y... Ala, a leer cosas de ellos mismos.
- La verdad es que tenía mucha curiosidad por saber qué decían de nosotros -admití-. Nunca hasta ahora lo había hecho.
- ¿¡En serio!? -Preguntaron las tres a la vez, aparentemente asombradas.
- En serio. Supongo que... Me sentía demasiado vulnerable para hacerlo, como si con el primer comentario fuera a agobiarme, o a acojonarme o...
- ¿Y ahora? -Preguntó Alba.
- Me da igual -contesté al instante-. Quiero decir, ojala toda esa gente se alegrara por mí, pero sé que no es posible, así que simplemente... Tendré que aceptar lo que me digan. Si hay gente que quiere seguir creyendo en Larry, que lo haga -dije convencida-. Y si hay gente que quiere odiarme... Que lo haga. No quisiera que fuera así, pero sé que va a ser así. En fin -cerré Twitter y volví a colocar el ordenador donde estaba-, estoy orgullosa de mí misma. No soy tan cagona como pensaba.
- ¡¡Esa es mi Tommo!! -Ana sacudió mis hombros desde atrás mientras reía y dos minutos después todas estaban de nuevo a sus respectivas tareas.
Retomé los apuntes por donde lo había dejado, siendo consciente de que me iba a costar bastante más tener la cabeza completamente en ello. Louis ya se había colado en mis pensamientos, y me sentía incapaz de descubrir cómo hacer que saliera de ellos.
[Punto de Vista Ana]
Hablé con Liam por teléfono unos diez minutos, aproximadamente. Tardó bastante poco en decirme que tenía que bajar a cenar porque todos los chicos estaban esperándole porque tenían una especie de fiesta en poco más de una hora. Y, realmente, no me contó mucho más. El evento que habían tenido había ido bien, ellos estaban bien, él estaba bien.
O eso decía.
Puede que sí estuviera bien. Él, sin más, puede que sí estuviera bien. Pero desde luego conmigo no estaba bien. En absoluto estaba bien. Estaba callado, distante, frío. Todo lo contrario a como era Liam siempre.
El nombre de Sophia no había dejado de volar en mi cabeza, como no podía ser de otra manera. Algo me decía que todo eso tenía que ver con ella, y no me gustaba absolutamente nada.
Primero, porque temía perderle.
Segundo, porque sabía que le había hecho daño, y eso no podía ser así.
No, nadie podía hacer daño a Liam.
Me tumbé en el sofá, sobre Alba, y suspiré largo y tendido. En seguida preguntaron qué pasaba y hablamos durante un buen rato de ello.
De sus labios salían frases como "no te preocupes" o "todo va a ir bien" o "Liam está bien contigo". Pero sus miradas decían otra cosa.
Todas sabíamos que estaba pasando algo.
[Punto de Vista Judith]
Nunca había confiado demasiado en mis capacidades nada más despertarme, por eso me reí de mí misma cuando abrí los ojos, cogí el móvil, y creí ver ocho llamadas perdidas. Obviamente, no podía ser. ¿Ocho? Ni mi madre en sus peores momentos me llamaba tantas veces. Probablemente lo hubiera confundido con un tres. O con cualquier otra cosa, viniendo de mí todo era posible...
Pero cuando estaba realmente despejada y cogí el móvil de nuevo... Me incorporé al instante. Ocho llamadas perdidas, sí.
De Louis.
La última de hacía apenas veinte minutos. ¿Qué le había pasado? Le llamé sin pensármelo ni un instante pero no obtuve contestación. Sentí cómo el corazón había empezado a latirme deprisa. ¿Y si le había pasado algo?
Cuando, por segunda vez, no me cogió el teléfono, abrí WhatsApp esperando encontrar allí la respuesta.
"Judith, no hagas caso de nada de lo que oigas o leas, ¿vale? Es todo mentira".
"Estoy intentando llamarte pero nada, así que en cuanto te despiertes llámame, por favor".
"Desde cuándo duermes tanto? Estás enfadada? No es nada verdad, Judi...".
"Empiezo a preocuparme. No te creas nada, por favor".
"Tenemos que irnos a la entrevista. En cuanto acabe te llamo. Te quiero...".
Temblé con sus dos últimas palabras.
Parpadeé varias veces seguidas y salí corriendo hacia el ordenador sabiendo que, de verdad, las respuestas las encontraría en Twitter, donde unas horas antes las fotos de Louis y yo lo ocupaban todo.
En esta ocasión, no había fotos. Sólo un rumor. Tragué saliva y decidí sacar fuerzas de donde no creía tenerlas y aventurarme de lleno en todo eso.
La noticia era una, y parecía clara: Louis había abandonado la fiesta a la que habían asistido la noche anterior con una modelo de veinte años. Aparentemente, iban cogidos de la mano.
Comencé a respirar con dificultad.
- ¿Qué pasa?
Ana entró al salón con un ojo todavía cerrado y se acercó hasta mí.
No pude contestar.
No me salían las palabras.
Me tapé la boca mirando fijamente la pantalla y recé todo lo que sabía para que Louis terminara pronto la entrevista y pudiera explicarme qué narices había pasado._______________
Dos cositas :)
No tengo ningún problema con Sophia (más bien, todo lo contrario, no me cae mal), esto es sólo ficción. Pido perdón a quien se sienta ofendido.
El tema Larry es un tema algo... Delicado. Así que también pido perdón a quien se sienta ofendido. Yo, personalmente, no creo en absoluto en Larry, pero tampoco pretendo cambiar la opinión de nadie.
Nada más :) Espero vuestros comentarios :)
@LookAfterYou28
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All their little things | Fan-fic de Louis Tomlinson y One Direction
FanfictionA Louis Tomlinson todo le iba bien, hasta que conoció a esa chica. Desde entonces, sus quebraderos de cabeza sólo son comparables con lo que empieza a sentir por ella. Para hacer frente a esa extraña situación que se presenta ante él, contará con la...