XXXI

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[Punto de Vista Rosa]

Poco después de terminar de cenar me llegó un mensaje de Harry. Había estado todo el día sin saber de él y me alegró que se acordara de mí.

"Ojazos, ¿puedo ir a verte?".

"Sí, rizos", contesté sin más.

Lancé el móvil a la mesa del salón y Judi y Alba me miraron al instante.

No sabía decir si estaba contenta o triste.

- ¿Qué pasa? -Preguntaron a la vez.

- Harry va a venir -dije como si fuera una explicación suficiente.

- ¿Y por eso te enfadas? -Preguntó Judith con confusión en su voz.

- No me enfado, es solo que... -Suspiré. Ahora lo veía claro todo-. Ayer no quiso quedarse, e imaginé que se había dado cuenta de que estaba pasando algo entre Niall y yo. Suelen pasar los domingos juntos así que también supuse que hoy hablaría con él... De mí. Si me ha dicho que quiere venir a verme es porque Niall le ha dicho que no siente nada por mí, así que podemos seguir con esto.

Bajé la cabeza. Me dolía aún más de lo que quería mostrar, y eso que con mi tono de voz ya había dejado claro que me dolía.

- Quizá no han hablado... -Dijo Alba, sin saber bien qué decir.

- Estoy segura de que lo han hecho.

- ¿Y por qué no piensas en la posibilidad de que Harry haya venido para explicarte que Niall siente algo por ti? Eres demasiado negativa -afirmó Judith, cogiendo mi móvil de la mesa y leyendo, supuse, el mensaje que me había mandado Harry-. No te dice nada del otro mundo. Puede que...

- No creo que Harry se molesté en venir hasta aquí sólo para decirme que se ha acabado -la interrumpí-. Si viene es por algo, quiere seguir viéndome, si sólo quisiera hablar podría esperar.

- Rosa, no adelantes acontecimientos, anda...

- Da igual, chicas. Si con Harry estoy muy bien, ha sido el otro estúpido el que me ha confundido... Pero no tiene importancia, ya se pasará.

Me crucé de brazos y me concentré en ver la tele aunque ni siquiera supiera qué estaban echando.

Recordé el intenso beso que me dio ayer Harry, justo antes de marcharse, y mi deseo se encendió. Era una idiota, tenía a Sexy Harry todo para mí, de la manera en que quería tenerlo, y estaba comiéndome la cabeza por alguien que se arrepentía de haberme dado un beso y que echó la culpa al alcohol.

No podía estar enfadada con Niall, no era su culpa que no sintiera nada por mí, pero podía habérselo pensado antes de volverme loca.

El timbre sonó y corrí hasta él. Corrí, literalmente.

Necesitaba sentir a Harry y lo necesitaba ya.

[Punto de Vista Harry]

Rosa me abrió la puerta con una cara extraña.

- Hola -dije con una sonrisa.

No me dio tiempo a decirla nada más porque tiró de mi camiseta hacia ella, cerró la puerta tras de mí, me apoyó contra ella y me besó con urgencia, como si llevara meses sin hacerlo.

La sujeté por la cintura atrayéndola más a mí y sentí que ya no podría parar. Con ese simple beso, Rosa había despertado mucho en mí... Demasiado.

Ya no podía pensar en nada que no fuera en hacerla mía, como siempre desde que la había conocido.

La correspondí el beso con deseo, con pasión, con fuerza. Nuestras lenguas lucharon y sentí que no importaba todo lo que tuviera de ella, siempre se quedaría corto. Siempre querría más.

All their little things | Fan-fic de Louis Tomlinson y One DirectionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora