21.- Hasta que la muerte nos separe.

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Me temblaba el brazo entero, pero estaba segura de lo que haría. Sabía que terminaría pudriéndome tras las rejas, pero si no era en la cárcel, sería en casa.

Él también temblaba bajo mi poder. Me gustaba aquello, porfin que se diera cuenta de que él era una simple basura, y que no era nada importante para mi ni para nadie.

Trataba de subir los brazos como mensaje de "en son de paz"
- ¡No hagas eso! Otro movimiento y dejarás de tener conciencia hijo de puta.- subí el arma en dirección a su cráneo. Se quedó estático ante aquel mensaje, entendiéndolo completamente.

Ese maldito me había hecho tanto, que piedad ya no me quedaba para regalarle un poco.

- P-porfavor Paula- me dijo con el miedo envolviéndolo- somos marido y mujer, ¿Por qué destruyes de esta manera el matrimonio? Es una relación de más de 2 años-

- ¿Y tratas de calmarme con este estúpido sermón? ¡Es una relación de más de 2 años en donde la pasé fatal!- comencé a temblar mucho más notorio, haciéndome saber que estaba muy nerviosa, y que él lo notaría.

- No te pido que sigamos si no lo deseas, solo déjame una oportunidad y sal de esto sin culpa por matarme. R-recuerda que juraste que no te irías hasta que la muerte nos separase.- intentaba acercarse con la mano al frente, haciendo pequeño el espacio entre los dos.

- ¡Alejate! ¿Acaso no haz entendido? ¡Si hago esto es porque lo quiero y lo he pensado hace mucho! No me haz dado otra solución...- me reí de tal forma que sentí su temblar.

El susurro que dio fue casi inaudible... "Hasta que la muerte nos separe, Paula" mientras se agachaba hasta quedar de rodillas, pidiendo un grano de piedad.

Me agaché alejada de este, pero era para quedar a su misma altura, y susurré al igual que él.

- "Hasta que la muerte nos separe" juré, pero nadie específico que sería la mía- me miró asombrado, sabiendo que no saldría de aquella habitación con vida.

Apunté rápidamente y disparé, salpicándome de su sangre. Y me alegré de dejar ir mi odio junto con las ganas retenidas de años querer matarlo .

Abre los ojos, Pega un gritoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora