15.- Cuento de hadas.

20 1 0
                                    


Ojalá no te tomes a mal esta carta, ya deberias saber quién soy por la simple letra
Sólo quería decirte algunas cosas que no pude confesar en esos tiempos, ¿bien? Bueno... Daré mi mejor intento:

Éramos lo más cercano al amor verdadero nunca antes visto.

Tú estarías a mi lado a pesar de todo, y yo igualmente por cada cosa que necesitaras.

Todos mis recuerdos giran tras risas, besos, cosquillas y diversiones por montón, siempre juntos.

Eras una chica maravillosa, lo que siempre había buscado, y mejor que eso.

Y no entiendo, aun no sé por qué terminamos de esta manera, rotos.

Siempre había seguido el perfil de buen chico, como tú me querías. Y tú siempre fuiste perfecta, única a tu manera.

Tal vez terminamos por tu familia, o la mía. Tal vez por las amistades, o los que se creían "más que amigos". O simplemente nos cansamos de todo, tú tal vez nunca me amaste, o yo capaz nunca llegué a quererte.

¿Y sabes? Yo veía esos cuentos de hadas siempre en la niñez, esos que te enseñan del amor, y uno llega a darse cuenta que no serán nunca igual a la vida real;

• Si es una bestia, siempre lo será.
• Uno nunca debe dar lo más preciado por alguien.
• El amor a primera vista no existe, y uno nunca debe confiar en alguien más, no todas las personas están contigo sin intenciones ocultas...

¿Y te quieres enterar de algo peor? Éramos tal para cual. Nunca debimos separarnos, nunca debimos hacerlo.

Puede que haya sido por cosas del destino nuestra ruptura, pero eso es aún más malo que cualquier otra cosa. No fuimos capaces que enfrentar a "las cosas del destino" y superar todo por nuestro amor.

Bueno... No he vuelto a enamorarme nuevamente, y lo más probable es que viva sólo hasta mi muerte. Fuiste y serás alguien inolvidable.

Pero tú... Tú ya me haz cambiado, no pensé que alguien superaría mi incondicional amor que dejaste ir.

Quiero que sean felices, y que esta carta no te traiga nostalgia, ¿Prometido? Fuiste alguien importantísimo para mi, pero yo no para ti, y lo entiendo de todas las formas.

Agradezco la invitación, pero no puedo aceptarla de ninguna manera. ¿Crees que iré a tu casamiento después de todo el dolor? No soportaría que alguien besara lo que tanto e anhelado. Tus labios eran maravillosos, y que él los tome como suyos no lo aguantaría.

Pero bien. No quiero que esto se torne oscuro. Felicidad para ti y tu esposo. Que todo sea para bien...

Aunque, sólo haceme un favor. Deja decírtelo antes que él te lo diga...

Hasta que la muerte nos separe, cariño mío.

Abre los ojos, Pega un gritoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora