...Capítulo 26: El Santuario...

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PoV Narrador Omnipresente

El viaje hacia Atenas es largo
5 horas de camino a la ciudad y 1 hora para llegar al recinto sagrado.
Roselle pensó en un momento que el santuario era el Partenón
Pero se equivoco
Son dos cosas muy diferentes la una de la otra
Ella y sus amigos se durmieron aproximadamente 1 hora después de tanto llorar
Lloraron hasta quedar secos
Media hora entera sin parar.
Toffy se encontraba reposando en el regazo de Roselle
Roselle estaba dormida recostada sobre el hombro de Aaron
Aaron dormía con la cabeza colgando hacia atrás
James tomo su mochila como almohada y Lara se acurruco apropiándose de dos asientos para dormirse
Abayomi seguía dormido en el regazo de Mu
Kaoru, Bartok y Pollux siguieron en ejemplo de Lara y se adueñaron de dos asientos para acurrucarse y dormir
Los dorados no podían descansar.
Por una extraña razón aunque quisieran hacerlo no podían
Sus mentes se mantenían ocupadas
Dejaron a los chicos dormir
Había sido un día de muchas emociones
Un poco más aya de la mitad del camino, algunos despertaron
Ya sea por que sus cuerpos se entumieron o debían de hacer sus necesidades
Roselle fue una de ellos
Su cuello se entumio por la posición incómoda en que estaba.
Se estiró en su asiento como un gato, se limpió las lagañas de sus ojos y se froto la cara
Miro hacia la ventana y contempló un paisaje montañoso
Aun seguían en carretera
Roselle bostezo para destapar su oidos
Aaron despertó casi al instante en el que ella lo hizo
Mientras Aaron se despejada del sueño, Roselle observó en la pantalla de su celular la hora
Tan sólo había pasado dos horas y media que se fueron
La chica suspiro
Roselle escucho pisadas en el pasillo dirigiéndose hacia ella
Alzó la vista para darse cuenta de que se trataba de Camus
Su maestro se paro a un lado de su aciento

-¿Roselle puedo hablar contigo unos minutos?-
Pronunció en total calma el peliazul
Roselle fruncio el ceño y asintio
-Si... claro.-
Contestó la castaña

Seguido de esto Aaron se hizo a un lado para dejar salir a Roselle
El chico escuálido pensó que su amiga estaba en problemas
Siempre que la llamaban de esa forma, solían regañarla
Además, el mentor de Roselle ponía nervioso a Aaron
Siempre lo miraba de manera asesina, como si hubiera hecho algo malo.
No entendía por que pero era extraño.
Roselle se puso nerviosa
No sabía para que la llamaba
No había hecho nada malo
Pensó que tal vez Camus iba a darle algunas indicaciones o advertencias para cuando llegarán al santuario
Pero fue todo lo contrario
Roselle camino atrás de Camus por el pasillo del autobús hasta llegar a los asientos de enmedio donde nadie los escucharia ni tampoco interrumpieran
Roselle tomó el asiento al lado de la ventana
Después Camus se sentó al lado de ella
De una manera indirecta, la había dejado sin escapatoria.
Ahora Roselle estaba más nerviosa
Desviaba la mirada y evitaba el contacto directo
Acariciaba con frenesí la barriga de Toffy quien seguía profundamente dormida
De alguna manera Camus notaba esto en Roselle pero pensó que era por separarse de sus amigos y del internado.
No por otra cosa
Se aclaró la garganta y hablo

-Lamento lo que paso.-
Declaró
Roselle sabía que se refería a la separación de su hogar y su familia
Ella esbozó una leve sonrisa forzada
-No se preocupe... tenía que pasar algún día...-
Dijo en un tono suave sin alzar la cabeza tratando de excusar su dolor.
Camus supo interpretar esa exprecion.

-¿Estas triste?-
Pregunto de manera obvia el onceabo caballero
Roselle no lo negó.
-¿Como no estarlo?-
-¿Te arrepientes de venir?-
-No...
A pesar de todo... me siento emocionada
Se que esto debía de pasar y como su alumna estoy obligada a seguirlo
Ese fue el trato cuando acepté...
Pero, sin embargo, siento que mi lugar esta aquí, junto a usted...-

Roselle no pensó en lo que dijo y de inmediato a dio cuenta
Se puso roja por la pena y de inmediato trató de corregir lo ya dicho
-Q..quiero decir como su aprendiz
Mi lugar esta a su lado como aprendiz
Seguirlo lealmente y.. ammm aprender de usted y... todas esas cosas.-
De inmediato Roselle sintió vergüenza de si misma
Quería hacerse bolita y esconder su rostro entre sus piernas para toda la eternidad
Ni con Camus podía dejar de ser torpe
Por fortuna, Camus no se percató del mensaje oculto que tenían las palabras de Roselle
Camus observaba a la cachorra acurrucada en las piernas de la chica soltando pequeños ronquidos
El no sabía que los perros podían roncar.
Despues de unos momentos de silencio, Roselle dejo su pena y se dispuso a preguntar

Corazón De Hielo, Voluntad De Hierro 《Camus De Acuario》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora