Online Gamer ~yoontae~

Capitulo 13

Cuenta Namjoon.

Llegamos a la mansión.

–Que horror, ¡ese escandalo enorme! Que pena...cómo Jimin pudo inventar semejante cosa –mi madre se tiraba en el sofa con el abanico de terciopelo que solía llevar casi siempre.

Yo le daba la espalda, caminando hacía la ventana...pensaba en Jin, en las circunstancias...me porté como un poco hombre, como un patán, quería salir corriendo ahorita mismo a su casa. De nuevo a rogarle como lo hice hace rato. Quería suplicarle que me perdonara...mi amado Jin...

Flashback.

Estaba afuera de la casa de Jin, él no quería abrirme, yo golpeaba la puerta desesperadamente, mis lágrimas estaban a tope, mi corazón de verdad dolía, pero quizás eso no era comparable a como estaba el corazón de Jin en este momento.

–¡Jin, abreme Jin!, tengo que hablar contigo...por favor...

Había pasado mucho tiempo y él no contestaba.

–¡Jin sé que soy una mierda! ¡Sé que no te merezco! ¡Dejame explicarte, Jin! –golpeé la puerta desesperadamente.

–¡Vete! ¡No quiero saber mas de ti! –Escuché por fin a Jin.

–¡Jin, yo no quería hacerlo! Veras...mi madre odia a muerte a la gente como nosotros, ella ve mal la homosexualidad, sólo te tengo a ti y a ella, hablaré con ella, Jin.

–¡TÚ ME NEGASTE! –jamás escuché a Jin tan molesto.

–Jin te juro que siento que me asfixio, no sé cómo sobrellevar esto, ¡Jin por favor abre! ¡Dejame explicarte!

Jin no contestó. No sé por cuánto tiempo estuve aquí, él no me iba a abrir, tenía toda la razón en molestarse conmigo, yo lo amo...y él me odia.

Fin del flashback.

–¿Qué piensas, Namjoon? –La voz de mi madre me sacó de mis pensamientos.

–Nada...sólo en Jin... –la volteé a ver.

Mi madre se puso de pie y dando pasos hacia mí.

–Sabes...ese chico reaccionó muy extraño, parecía que le gustabas –decía mi madre dandome una mirada molesta.

Tenía ganas de decirle toda la verdad.

–Escuchame bien Namjoon...que yo no me entere de cosas que me estoy imaginando, que no me entere que tienes algo que ver con él, algo más que amistad, porque te juro por la memoria de tu padre que jamás volveras a saber de mí, y para mí no existiras más, ¡¿ENTIENDES?!

Tragué saliva y desvié la mirada a otro lado para que ella no se diera cuenta de mis ojos cristalizados, la culpa me mataba por dentro. ¿Qué hacía? Tenía que decidir entre el cariño de mi madre, la única persona que había estado toda la vida conmigo y a la que yo consideraba mi mejor amiga, o el amor de Jin, que el era el amor de mi vida. ¿Cuál fue mi pecado? ¿Enamorarme de un hombre? ¿Acaso esta mal eso? ¿Por qué nos enseñan a odiar en vez de amar? ¿Por qué tengo que fingir que me gustan las mujeres cuando no es así? Ya no quería fingir.

No sé si alguien mas sabía de este dolor, el dolor entre decidir el cariño de una madre o el amor de tu vida...eso era tan injusto...eso no debía existir.