Episodio 45

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Veil y yo reconocimos de inmediato esa voz.

–¡Gia! –exclamó.

<<¿Sigue viva?>>, me pregunté, <<Pero, ¿Cómo? ¡Yo misma la maté!, sin querer, pero lo hice, o puede que en el fondo si...>>

Gia igualmente salió planeando, sobrevoló a mi lado y sujeté su mano para que no cayera. Veil extendió sus dos manos, una para que la tomara yo y otra para que la tomara Gia.

–¿Qué no estabas muerta? -le pregunté.

Hasta el momento no había visto su cara, pro cuando me vio, me llevé una gran sorpresa.

–Matarme no es tan fácil –respondió.

Su cara estaba llena de ligeras cicatrices, pero eso no fue lo que me llamó la atención, sino que su rostro era como el mío y el de mi hermana.

–¿Por qué...? –comencé a formular.

–¿Por qué me parezco tanto a ti? –completó la pregunta por mí-, Nevra rogó que me salvaran, y lo hicieron con tu sangre, para mantenerme con vida debían de darme sangre por que había perdido mucha, después Leiftan en el laboratorio comenzó a elaborar tejidos ficticios y... aquí estoy.

–¿Por qué Nevra querría salvarte? –pregunté con asco.

–Porque me ama –respondió con una sonrisa.

La miré con odio y repudio.

–Lo que me recuerda... -siguió diciendo-, esto –me dio una patada en el estómago-, es por casi matarme. Esto –me tiró un puñetazo en el pecho-, es por besar a Veil y a Nevra. Y esto –finalizó golpeando mi nariz-, por que quiero.

Dos de los tres golpes me sacaron al aire, tratando de reponerme intenté alejarme un poco, pero si estas colgado no funciona.

Veil gimió ya que cualquiera que fuera nuestro movimiento lo afectaba a él. Trató de subir primero a Gia, pero la estúpida resbaló con una roca y casi cae.

–No sé cómo hacer esto –dijo poniendo una de sus mejor caras-, pero trataré de salvar a ambas.

–¿Ambas? –preguntó indignada la rubia-, ¿Por qué a las dos? ¡Solo a mí! A ella que la muerda un perro.

Tomé su brazo libre y le tiré una gran mordida.

­–¡Ay! –gritó-, ¡Aléjate que me pegas la rabia!

–Cuidado –le advertí-, tus peores deseos siempre se cumplen, pero no de la manera que esperas.

–¡¿Podrían dejar de pelear?! –gritó el otro-, ¡No es fácil sostenerlas a ambas y que ustedes se crean perro y gato!

–¿Qué es un perro y un gato? –inquirió Gia.

–Dos animales idénticos a ti –le respondí-. A diferencia tuya ellos tienen educación y se dan a respetar.

–¡Te voy a...! –amenazó.

–¡Ya basta ustedes dos!

Nevra

Seika... -murmuré aún dormido.

Me removí en la cama. A mi lado sentí una presencia sumamente suave, la abracé y la pegue a mí, pensando que era Sasha. Abrí los ojos y en mis brazos vi una sexy almohada. Me levanté de golpe al darme cuenta que ella no estaba a mi lado.

|Eldarya| •••  El mundo de las hadas (Nevra) [E#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora