|Eldarya| ••• El mundo de las hadas (Nevra) [E#1]

Episodio 17

-¿Qué quieres? –le pregunté escondiendo la bolsa a mis espaldas.

-¿Conseguiste lo que te pedí? –preguntó Veil.

Lo miré desentendida, ¿qué fue lo que me pidió?
Ya no llevaba la máscara completa, traía una que sólo le cubría la mitad de la cara, podía ver las facciones de su mandíbula y sus hermosos ojos color miel. De pronto él me saco de mis pensamientos, tiró de mi bolsa y tomó el Ni No Kuni, miró la portada y su cara se tensó.

-Creo que te pedí el Necronomicon –dijo con un tono de enojo.

<<De él era la voz masculina que me dijo que lo buscara, ahora lo entiendo...>>, me dije.

-¿Así que fuiste tú el que se metió en mis pensamientos? –pregunté indignada.

-Corrección –respondió-; traté de controlar tú mente –fruncí el entrecejo-, pero tienes una enorme energía que no me dejó hacerlo, ciertamente no entiendo el cómo...

Me acerqué a él, le arrebaté el libro y lo guardé en mi bolsa, después le grite-: ¿Quién te crees, eh? ¿Qué derecho tienes para rebuscar en mi mente? ¡Eso es retorcido!

-Sí soy el hijo de la Luna y el Sol, ¿qué te esperabas? -dijo con una media sonrisa-, ahora regrésame ese libro.

-Dame una buena razón para dártelo –dije escondiéndolo atrás de mi-, voy a contar hasta cinco, si no me dices algo convincente voy a gritar lo más fuerte de pueda que estás aquí-espere un segundo-, sé que no te conviene que lo sepan.

-Bien –dijo alterado-, quiero remediar lo que están haciendo –dijo extendiendo sus brazos, señalando todo.

-¿"Remediar lo que están haciendo"? –pregunté haciendo énfasis en las comillas-, ¡él que lo está haciendo eres tú!

-¿Qué?

-No te hagas el inocente, se bien que eres tú el que está devastando la cuidad.

-¿Quién te ha dicho eso? –preguntó acercándose a mí.

-Eso no te importa –respondí retrocediendo, pero él se acercó más-, v-voy a gritar.

-¿Quién te dijo eso? –repitió tomando mi brazo para acercarme a él-, si no respondes te obligaré a decírmelo.

Tomé aire para gritar, pero Veil tapó mi boca, me quitó nuevamente mi bolsa, la borneó, la rompió, me amordazó y ató mis manos con ella, tomó el libro y me elevó sobre su hombro, comenzó a caminar hasta que escuché un grito proveniente de Chrome:

-¡Veil, Veil, sé que estás ahí!

-Quédate callada si no quieres que pase algo malo- dijo poniéndome atrás de un árbol quedándose con el libro.

<<No te tengo miedo>>, le dije en pensamientos.

<<Deberías>>, respondió serio.

Vi cómo se alejaba y también como Chrome venía corriendo hacia él, Chrome tenía lágrimas en los ojos, aproveché que estaban discutiendo y sigilosamente me levante y comencé a correr hacía no sé dónde, terminando en el bosque.

Me quité la mordaza de la boca e intente quitarme la atadura de mis manos, el nudo que tenía era muy fuerte y me apretaba, escuché múltiples ramas rompiéndose, sabía que se trataba de Veil que me estaba buscando, emprendí la huida.

Escuché su grito y trepé un árbol, estaba ya casi en la copa cuando lo escuché demasiado cerca, del susto se me cayó la parte de la bolsa con la que me había amordazado, solamente pude ver como caía al suelo y como se acercaba rápidamente a ese pedazo de tela, lo tomó y gritó mi nombre con un crescendo muy notorio, volvió a correr hacia otro lado, inevitablemente recordé una parte de mi vida cuando aún estaba en la Tierra, en fin no vale la pena hablar de ello.