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Narra Mila






Después de hablar con Lotie, me fui directo a mi pieza la verdad es que no quería nada, me sentí mal, lo extraño sí, pero él también tiene la culpa en todo esto. La verdad me debute de seguir avanzando por miedo, la verdad soy bastante inexperta en este tema, no es que sea virgen, pero sé que él tiene mucha más experiencia que yo en cuanto a sexo.

Tengo miedo de no gustarle en la cama, de que no le guste mi cuerpo, de que no sepa hacer las cosas que a él le gusta, de que me rechace y todo esto se vaya al tarro de la basura.

Me tumbe en mi cama, coloque una lista de reproducción de Spotify de esas corta venas para hacerme terapia de shock, la verdad es que soy bastante masoquista y si tengo pena prefiero que me dé la pena toda junta y así poder llegar bien mañana a la universidad y poder hacerle cara si es que lo veo, porque la verdad es que aún no tengo ganas de hablar y verle la cara, sé que va a preguntar un montón de cosas y no sé si estoy dispuesta contestar todo.

Eran tarde y ni siguiera una llamada, mensaje de su parte, esto lo único que hace que mi cabeza piense es que no le importo, que sinceramente no soy lo suficiente para él. Es la primera "pelea" que tenemos, pero creo que los dos somos demasiado orgullos para acercarse al otro, dejo de pensar para irme a la ducha y luego terminar mis deberes para mañana.

Antes de acostarme definitivamente y que por fin mi mente pueda descansar de todo este enredo llega Lotie a golpear mi puerta.

- ¿cómo estás? – la pregunta del millón como estoy.

- La verdad Lotie no lo sé, nunca me había sentido así luego de pelear con alguien, tu sabes que no soy buena expresando sentimientos y todo eso, pero con él es diferente, siento que fluyo. - ella solo me miro y me regalo una pequeña sonrisa.

- Él me mandó un mensaje preguntando como estabas, si habías llegado bien y le dije que sí. – parece que si el importo un poco.

- Bueno Lotie, gracias, mañana nos vamos juntas a la universidad, ¿Okey?

- Como tú digas princesa. – así solía decirme cuando éramos pequeñas, según ella yo era la princesa que ella tenía que proteger.

La verdad es que cuando estoy con él me siento en una nube, siento que floto en sus brazos, siento paz y protección, pero a la vez siento miedo, miedo a quererlo como lo estoy haciendo, miedo a entregar todo lo que tengo en mi corazón y todo lo que siento, miedo a salir herida de esto; me duermo pensando en toda esta mezcla de sentimiento y emociones que afloran en mi interior.

Me despiertan los gritos de Lotie.

- ¡MILA NOS QUEDAMOS DORMIDAS, DESPIERTATE YA! – dios mío miro la hora en mi reloj y son las 07:30 am. Claro que nos quedamos dormidas, me levanto rápido para darme una ducha de cinco minutos donde ni siquiera disfrute el agua caer por mi cuerpo y mientras me visto recuerdo la primera vez que llegue tarde a la clase que tenía con benjamín y una sonrisa estúpida sale de mi boca, vamos a ver qué pasa ahora porque claramente mi idea de evitarlo ya no va a funcionar.

En cuanto llegamos a la universidad con Lotie corremos por los pasillos hasta llegar a la sala donde tenemos clase y de verdad hubiera preferido no haber venido a clases. Lo primero que veo es a benjamín con la niña esa que me cae como pata en el estómago porque se nota a millas de distancia que quiere algo con mi novio, el problema es que ni siquiera puedo reclamar algo, primero porque estamos peleados y segundo porque ahora está en fase de ayudante y no quiero rumores sobre nosotros y tampoco quiero perjudicarlo a él en su trabajo.

Paso como alma que lleva el diablo al lado de ambos y siento una fuerte mirada en mi espalda, la verdad es que no me importa escuchar nada que salga de su boca y sé que esta clase será de lo más tensa, tengo celos. Lotie solo me mira y no me dice nada porque sabe que en cualquier momento puedo explotar y nadie va a controlar mi venenosa lengua.

Lo veo entrar en compañía del caracol, porque de verdad que eso parece, esta toda babosa viendo a mi chico, se lo come con la mira, juro que si no fuera porque estamos en el aula de clases voy y le dejo las cosas bien claras.

- Hola chicos, bueno como ya saben ella es Belén y juntos vamos a realizar las ayudantías y los laboratorios, así que cualquier duda que tenga pueden hacerla con ella o conmigo. – genial ahora los dos pasarían más tiempo juntos y de verdad que quiero desaparecer.

Tome mis cosas, no aguantaba un segundo más en esta sala con la tal Belén baboseando y el ignorándome completamente, sentía que mis ojos se estaban cristalizando y no iba a ponerme a llorar aquí, no era el momento y el lugar para desmoronarme.

Salí de ese lugar y no le pedí permiso a ninguno de los dos, me daba igual reprobar el ramo o no, sentí que alguien jalaba de mi brazo, me volteé y era él, la persona que se estaba volviendo uno de mis nuevos amigos, de esos de los que puedes hablar de todo, Adam estaba ahí.

- ¿Qué paso Mimi, saliste como una loca de la sala? – me lancé a sus brazos y comencé a llorar como una niña a la que le roban un dulce, por lo menos eso sentía yo, sentía que esa chica recién llegada me estaba robando a Benjamín, yo no soy tonta veía como ella lo miraba, pero y él, a él que le pasa con ella.

- A ver Mimi, tienes que respirar y tranquilizarte, me estas asustando. – me tomo de los hombros para que lo mirara, asentí con mi cabeza y me volvió a abrazar.

- Mira Mila vamos a ir por un café y me vas a contar qué está pasando, ¿sí? – asentí con mi cabeza y fuimos caminando a la cafetería que quedaba frente de la universidad.

Llegamos a la cafetería pedimos dos mocaccinos, dos brownies y comencé a soltar toda la lengua, contándole cosas que ni a Lotie fui capaz de contarle, él me miro y suspiro.

- Ay Mimi, mira pequeña se ve que ese hombre es complicado y terco, pero también creo que es una buena persona y que tú eres una celosa, esta chica y se nota que está detrás de él, pero sinceramente benjamín ni la hora le da, confía en él y en ti. Ese es el mejor consejo que te puedo dar amiga mía.

Lo miré y fui a darle un abrazo, tenía razón debía aprender a confiar en el hombre que me gusta y también a prender a tener confianza en mí, yo ya había tomado mi decisión iría a buscarlo y hablaría con él. – confía – me decía mi cabeza. 






Cariños Key.








***

Holaaaaa personitas !!! 

Bueno como lo prometido es deuda aquí hay uno de los dos capítulos que dije que subiría hoy, el otro se esta horneando, así que estará más tarde. 

Os quiero, Besos. 


En Efecto Tú (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora