Cap. 5

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Ya habíamos llegado a Miami hace como 15 minutos. Estábamos buscando las maletas.

Renato: Bien ¿Ambas tienen sus cosas?- pregunto y ambas asentimos- pues vamonos, ya el auto nos espera afuera.

《 -Noo, nos espera acá dentro. Ni modo que nos espera afuera, osea hello.

No seas mal educada.

- No soy mal educada, lo dije en tu cabeza solo tu me oyes.

Da igual. Callate》.

Renato: El auto esta allí- señaló el auto que estaba a unos cuantos metros de nosotros.

No dirigimos a el. Vi a una mujer de unos 28 años apoyada en el auto, miro hacia nosotros y sonrió. Cuando llegamos a el auto ella abrazo a Renato y este correspondió. Se separaron y la mujer nos miro ahora a Gigi y a mi.

- Tu debes ser Laura- señaló a Gigi- y tu haz de ser Georgina- Ahora me señaló.

Renato: No amor- dijo y río- es al revés.

- Ah, lo siento- dijo y se unió a Renato- de igual forma es un gusto conocerlas a ambas- dijo y nos sonrió.

Gigi: El gusto es nuestro- respondió por ambas.

-No me digas, si no lo dices nadie se da cuenta.

¿Porque eres tan pesada?

-No lo sé, ¿Por qué eres tan estúpida?

Eres un castigo 》.

Renato: Ella es mi esposa Caroline.

Caroline: Díganme Carol.

Subimos el equipaje, o más bien, lo subió el, y nos subimos al auto.

Renato conducía, Caroline iba de copiloto y Gigi y yo atrás. Estábamos en silencio, solo se escuchaba la música que ponían en la radio y de ves en cuando, se escuchaba que alguno la tararea va si la conocían.

En un momento veo que Renato me mira por el retrovisor.

Renato: Ya verán les agradaran los chicos.

Caroline: Sí los chicos- dijo como acordandose de algo- hablando de ellos, no están en la casa.

Renato: ¿Donde están?

Caroline: La verdad no se. Sólo mandaron un mensaje que iban a salir.

Renato: ¿Qué no les dijiste que iba a ir con visita?- pregunto molesto.

Caroline: Sí, pero ya sabes como son. Van de su cuenta. Son adolescentes.

《-Esto como que ya no va bien.

¿Son rebeldes?

-Eso parece.

Entonces son de esos que les gusta desobedecer, romper reglas y molestar.

-Esperemos que no》.

Llegamos a una casa o más bien mansión.

Gigi: Aquí huele a money- dijo en mi oído y yo reí por su ocurrencia.

Renato: Llegamos- dijo y estaciono el vehículo. Bajamos y Gigi y yo nos quedamos viendo la casa en la que estaremos por no se cuanto tiempo.

Laura: ¿Aquí viven ustedes?

Carol: No. Aquí viven los chicos.

Vi a Renato bajar las maletas de Gigi y las mías.

Renato: y ustedes se quedarán acá.

Siempre contigo|| Zabdiel De Jesus (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora