Greyson chance- Animal in the night

Capitulo: 2 "¿Él se fue?"

Ella se sentía incomprendida. realmente incomprendida. no podía hablar, claramente, nadie le entendía, pero ella si podía. esto era estúpido. 
su puerta se abrió lentamente y un rostro simpático y maternal se asomó. 

—¿________? -la chica la miró- ven, te daré un baño... 

_______ se levantó y caminó dificultosamente en dos pies. 
—no te preocupes -susurró Lisa, dolida- puedes caminar como se te antoje, en unos días más comenzaré a ayudarte para que aprendas a caminar como yo, ¿está bien cariño? - __________ gruñó en aprobación y lisa se estremeció- Iré por toallas. 

Narra _______. 
Lisa bajó y yo quedé sentada frente a la puerta del baño. ella tardaba, así que abrí la puerta... era una pieza blanca, con algunos detalles en violeta. era muy bonita. había muebles y decoraciones de cerámica, duros. Había una pequeña llave y la giré. 
comenzó a salir agua.

Me asusté condenadamente, la cerré lo más rápido posible y bajé corriendo donde Lisa, tenía que mostrarle, tenía que decirle. su casa estaba llorando en silencio. y ella no lo había notado.. 

Cuando llegué abajo, noté que no estaba sola. 

Fin de narración. 

La azafata no estaba tan mal, realmente me gustó. su cabello era casi negro, y no tan liso. tenía unos ojos verdes, con unas motas cafés. Eran suaves como una nube. 
A Greyson le gustan los ojos verdes. a greyson le gustó esa chica. 

Era delgada, pero con curvas donde debían estar. labios delgados. era antojable. Greyson gruñó. revisó su bolsillo. 
tenía uno. 

un condón. 

sonrió para si mismo. 
eso era suficiente. 

Se levantó de su asiento, la azafata no despegaba sus ojos de él. 

—Algún problema, ¿señor? -preguntó, con una voz inusualmente sexy. hmhh, esto sí podría funcionar- 
—tengo un pequeño inconveniente -sonreí y ella alzó una ceja, curiosa- necesito que me ayudes, por favor -comencé a caminar y traspasé las cortinas de terciopelo, que dan camino a la puerta del baño, estaba desocupado. 

La azafata caminó detrás de mi, sin dudarlo; y yo abrí la puerta del baño, ella me miró confusa, sonriente y coqueta, le tiré del brazo e hice entrar a la pequeña cabina. 
un suspiro salió de sus labios. 
Vamos nena, no es como si no lo estuvieras pensando. 

La presioné contra la pared. Estaba sin blusa antes de que me diera cuenta. 

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Abrí la puerta del baño y salí, me senté en mi asiento como si nada. arreglé un poco el cuello de mi camiseta y me relajé, apoyando mi cabeza en el cómodo respaldo del asiento. 
—La azafata atravesó la cortina de terciopelo azul arreglando su cabello y blusa. Miró hacia mi y sonrió. la ignoré. 
—¿Se le ofrece algo, señor? -me habló, demasiado cerca-
—Tan solo un café -dije fríamente, podía ver impaciencia en sus ojos- 

Ella atravesó otra cortina de un color un tanto más claro y volvió con una bandeja. Me entregó mi taza de café, una servilleta y un papel. ella me miró, sonrió y me guiñó un ojo. posicioné el café y revisé el papel. 

era su número telefónico. 

—¿Disculpa? -hablé claro, fuerte. Era consiente de que había llamado la atención de los pasajeros cuando me paré desde un principio. Ellos lo sabían, la azafata se acercó a mi- tuve sexo contigo -tomé el papel y lo partí por la mitad- pero no quiero tu número. 

Algunas madres me miraron con la boca abierta mientras cubrían inútilmente los oídos de sus niños. 
La azafata abrió los ojos como plato, recogió los papeles y miró hacia atrás. 
Detrás de ella, estaba parado alguien que parecía de rango mayor. oh oh. alguien tiene problemas. él le dijo algo, ella se sonrojó y comenzó a negar. 

cerré los ojos y esperé. estúpido viaje. 
Tan solo quedan un par de horas más. 

me quedé dormido. 

—es tu culpa -susurré- ¡tú lo mataste! -le grité a mi mamá- ¡TÚ LO MATASTE!
—No -sollozó entremedio de un grito- él decidió terminar con su vida, no me culpes a mi. 
—¿acaso solo un día dijo, "oh, ya no quiero vivir" y terminó con su jodida vida? 
—estás hablando igual que él -dijo ella con repugnancia- actúas igual que él. ¿Sabes que fue realmente lo que lo mató? ¡SU ORGULLO JUNTO CON UN POCO DE ALCOHOL! -gritó- y estás igual greyson, tienen su mismo comportamiento.
—nunca -dije venenosamente-
—eres igual a tu padre, y lo que menos necesito ahora es que me lo recuerdes, chance -respondió ella con el mismo veneno ácido- ¡vete! ¡vamos! ¡vete con tus amigos, emborráchate porque no te importa lo que le sucede a tu hermana! porque no te importa nadie más que tú..
—no es eso -dije afligido, ella me miró, con odio. Conozco esa mirada, es la misma que tuvo cuando los doctores le dijeron que mi padre había muerto. Era odio. hacia el mundo. odio. me odiaba- bien -dije duramente- pero nunca me volverás a ver -gruñí- ¡NUNCA ENTRARÉ! ¡NO DE NUEVO!

Tomé mi chaqueta, subí por las escaleras y entré al cuarto de mi hermana, ella dormía. 
—adiós. -susurré, delicadamente. besé su frente y me fui. bajé las escaleras. crucé la puerta principal. tomé un bus a cualquier lugar. todo sin mirar atrás.

—¿Mamá? -se escuchó la voz de Alexa, en el pasillo- ¿Él se ha ido? -le dice a mi mamá, Lisa asiente. alexa cae al suelo empieza a llorar, pero de repente. se calla- 
—¿Ale? -pregunta lisa, su hija estaba teniendo convulsiones y le salía espuma por la boca. Lisa estaba tiesa. tomó el teléfono y llamó a la ambulancia. 

Pero ya era demasiado tarde.