Capítulo 33: "TV"

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Terminé de hacer unos perfectos waffles, en realidad, me gustaban los waffles y las masas dulces. 

había querido llamar a Caleb para pedirle que mandara mi moto. pero si hago eso.

si es que tengo una motocicleta. tendría más facilidad para salir.

y no quiero eso.

no quiero desaparecer de aquí. por lo menos no ahora. 

Llamé para que bebé bajara, oí sus pasos bajar felizmente, corriendo prácticamente, ya casi sabía andar en dos pies. 

me senté en en comedor de la cocina, pero ella nunca llegó. Conté hasta diez mentalmente, entonces me levanté y busqué por ella. 

estaba parada a mitad del camino, porque se había quedado mirando el televisor. lo miraba asustada. 

con odio. 

—Tranquila, hey.. -dije mientras me acercaba- no te va a hacer nada. -pero ella parecía ignorarme. estaba sumergida en su mundo- ¿te cuento un secreto? 

ella me miró al instante. era tan fácil tratar con ella. y eso me encantaba. 

—¿Recuerdas al monstruo de anoche? -ella asintió asustada y sus ojos pronto estarían derramando lágrimas. me miraba atentamente. así que miré al televisor y luego a ella- sígueme -susurré- 

Encontré aún más tierno que ella mirara al televisor en tono de complicidad y me siguiera. me senté en la cocina con ella frente a mi y le dije. 

—Esos monstruos así, están atrapados en el televisor -dije de la forma más convincente- si cambias de canal, no volverá. y no podrá hacerte daño. 

ella sonrió y miró al televisor con aire de superioridad. con un claro "soy superior a ti" marcando su mirada. sonreí. 

—Eso es, ahora come.. 

****

Acababa de terminar de ordenar el cuarto de ella. 

joder, me siento como toda una niñera. 

cuando mi teléfono comenzó a sonar. lo tomé y contesté. 

—¿diga?

—greyson -la voz de joules me sorprendió. no me había fijado en su nombre- hay otra pelea. pero es, dios, greyson, es la oportunidad de tu vida. sonará estúpido, pero realmente es una pelea difícil. -aquello sonó como un reto para mi- será en tres días. quiero que estés preparado. será la mayor cantidad de dinero que recaudemos desde hace años. 

asentí, aunque sabía que no me veía. 

—cuenta conmigo, Joules. 

entonces colgué. 

Necesitaba de las peleas. necesitaba de la distracción que solo el dolor podía causarme. necesitaba que me golpeaban.

era como si me sintiera culpable. era un castigo. que quería merecerlo. 

sacudí mi cabeza. 

me sentía nervioso. algo consumía mi interior. me estremecí. 

Decidí que salir a trotar no estaría mal. 

cuando bajé, bebé estaba dormida en el sillón. tomé las llaves y salí de ahí. cerré la puerta. por lo menos, ella no saldría por aquí. 

ya vi lo que ella era capaz de hacer. si ella quisiese salir, podría incluso saltar por el segundo piso y salir ilesa. 

Entonces empecé a correr. corrí porque quería. estaba entrenando. era parte de eso. subía adrenalina a mi cuerpo y me hacía sentir que lo que quisiera en el mundo lo iba a obtener. 

menos a bebé. 

Mis pies empezaron a golpear el suelo con mayor exigencia mientras doblaba en cada esquina. quería escapar. 

quería huír de ella. de todo lo nuevo que estaba naciendo en mi. 

Yo no amaba. 

yo amé. 

y nada salió bien.

Yo no estoy hecho para esto. no estoy hecho para una familia. para un hogar. seguí corriendo, el sudor comenzó a aparecer, el latido de mi corazón lo oía en mis oídos. 

nada más. nada más importaba. solo ella. su risa. sus ojos. sus abrazos. ella era perfecta. ella estaba sobre el Everest*. y yo a mil kilómetros bajo el nivel del mar. los bordes de mis ojos se hicieron borrosos y oscuros mientras sentía mi cabeza llenarse de aire. yo quería detenerme, pero no podía. no podía dejar que el sufrimiento hacia ella me consumiera. no podía dejar que ella me llenara. ella era.. era una chica, una como tantas.

¡Tantas como las que había estado!

podría ser una apariencia. una disfraz. ella era una mujer. tenía todo lo que una mujer tenía. 

Mi estómago comenzó a punzar fuerte y mi cabeza decía que no podía seguir corriendo, el oxígeno quemaba mis pulmones y mi garganta seca no aguantaba mis fuertes jadeos. 

me detuve de golpe, casi caí, mi rostro se contorsionaba en una mueca, el aire no entraba lo suficiente en mis pulmones, respiraba con la boca abierta, intentando clamar más oxígeno. tuve que afirmarme de mis rodillas. intenté inhalar oxígeno, pero había tanto y todo quería entrar a mi cuerpo de una vez que me desesperaba y no respiraba nada. 

quería alejarme de ella. de esta vida. de esta casa. de lo que conocía. mi respiración aún no se calmaba. había corrido un buen par de varios kilómetros. por lo menos una hora corriendo. no lo sé. no medí nada. 

solo quería alejarme. 

me enderecé y me sorprendí. era imposible. yo había corrido mucho. demasiado. no había doblado lo suficiente para volver por mi camino. 

¡YO ME ESTABA ALEJANDO DE ELLA! -grité, y mi garganta ardió, mis ojos comenzaron a llorar y yo gruñí, mi pecho se hundió y no podía respirar. quería irme. quería irme. 

quería irme...

Pero había llegado frente a la casa nuevamente. 

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Everest* : el Everest es la montaña más alta del mundo... jst saying.

Greyson chance- Animal in the nightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora