Greyson chance- Animal in the night

Capítulo 16: "un pequeño detalle..."

Finalmente, la alcé en mis brazos y se sintió como levantar una pluma. 

Fui consciente, mientras caminaba hacia la casa, fui jodidamente consciente de que ella encajaba conmigo. de que su delicado cuerpo se fundía entre mis costillas. era como si estuviese hecha a medida. para mí. sólo para mi.

Entré a la casa y la senté en un sillón cuidadosamente. me senté frente a ella y le miré directamente, sus ojos rojos y su nariz también. se veía adorablemente tierna. me sentía como un hermano mayor, sentía una responsabilidad en un pecho enorme. debía protegerla...

pero no lo soy. no. ella no es alexa. no, no lo es. 

Ella es ___________, una chica que necesita cuidados. 

nada más. 

—espérame aquí -le susurré a bebé- iré por hielo. 

Me levanté y entré a la cocina, busque por el botiquín en la despensa por algunas vendas. tomé una bolsa de hielo del frigorífico y volví a la sala de estar. 

ella no se había movido. 

miraba sus manos nerviosamente. 

me acerqué a ella y tomé su pie. dio un respingo e hizo un gesto de dolor, luego frunció el ceño. 

—es simple -susurré, teniendo la necesidad de explicarle. es lo que debo hacer ¿no?- solo es una torcedura. se pasará en cuanto tengas un poco de hielo. necesito poner esto -alcé la venda y ella asintió- 

tomé su pie, como la cosa más delicada en el mundo. como si fuese de cristal y tan solo un dedo, una rozadura y se trizaría entre mis dedos, se haría polvo y perdería en el aire. lo envolví en la venda, lo inmovilicé por la presión que esta hacía. 

tomé la bolsa con hielo y lo posé sobre su tobillo. se estremeció. eso me atoró. 

era como tragar una bola de clavos, aún.  me sentía culpable. ella era tan inocente. una flor en el desierto. una huella en el mar. no merecía ser herida ni por la incomodidad de un guisante bajo siete colchones. ella era más que una princesa. más que una estrella. ella era.. indescriptible.

 Intentó alejar el pie, pero lo mantuve en mi mano, bajo el hielo. 

—no, sh, sh, tranquila. esto te hará bien, okey? -intenté calmarla, me frunció el ceño, pero lo aceptó- en unos minutos estarás como nueva.. -susurré, necesitando tranquilizarla- 

estuve ahí, frente a ella, durante unos quince minutos, tal vez más. pudo haber sido una hora con ella, pero hubiese sido un minuto para mi. lo mantuvo sobre su tobillo hasta que el hielo empezó a gotear a través del delgado plástico. 

—está bien -susurré- está bien. 

saqué la venda, desenredándola de su adolorido pie, y ahí estaba, normal. 

—listo -sonreí complacido. ella miró su pie y empezó a mover los dedos. Entonces, como lo había deseado hace al menos veinte minutos. Me sonrió. una sonrisa que apareció tan rápido, llegando a sus ojos y aún más arriba. era una sonrisa real. hermosa. era hermosa. bebé. - está mejor? -ella asintió- genial. -sonreí satisfecho- son las once de la mañana y ya tuviste un accidente -sonreí divertido- eso no es bueno. -bebé negó- bien, pues. deberías tomar un baño. 

entonces, ella saltó de la comodidad del sillón hacia el suelo y sonrió. 

fue rápida. 

está feliz.

sonriente. 

sonreí, porque no tendría problemas con la ducha. 

—sabes como hacerlo? -pregunté, joder, me hubiera encantado con que dijera que no. ella asintió- muy bien, pues, te conseguiré una toalla, está bien? -ella asintió- lleva la ropa que te pondrás al baño antes de entrar.. -no quería arriesgarme a verla en toalla. Ella asintió- está bien.. 

fui al armario bajo la escalera y tomé un par de toallas blancas. subí las escaleras para ver a _______ dentro de su cuarto, viendo que se pondría. 

supongo que podría empezar a ayudar desde aquí. entré a su cuarto y ella me miró. 

—sabes que te pondrás? -ella negó- qué tienes hasta ahora? 

Ella se volteó y se arrastró caminando, o gateando. bueno, se volteó y de la cama tomó unas prendas y me las mostró. 

Era su ropa interior. 

Tragué pesadamente la bola de lava que se formaba en mi garganta. Ella no se sonrojaba. uh, tendré que enseñarle lo que es la vergüenza un poco... 

—sabes como se pone aquel? -señalé al brasier. ella asintió. uh, como desearía haber podido enseñarle.- muy bien. 

Me volteé a su cajón y pensé que hoy ella quería estar cómoda. después iría de compras. genial. genial. genial. no puede haber algo mejor, bufé. 

tomé una simple playera color verde. así destacarían sus ojos -sonreí- tomé un par de pantalones cortos. no eran tan cortos eran simples. y estaba seguro, de que ella se vería hermosa. Se los entregué y ella me miró, agradecida. entonces gruñó. 

pero no fue desagradable. casi podía oír el tono de su voz. era más como un balbuceo. y aquel globo, se volvió a inflar, pero en vez de rabia y celos, era de ternura. 

bebé era perfecta. 

ella se, uh. arrastró fuera de la habitación

le entregué las toallas y ella entró al cuarto de baño. 

no oí nunca el pestillo. sonreí. estúpido. 

ella no lo hacía a propósito. ella no lo estaba invitando a entrar con ella. 

ella no era como las demás. 

ella era inocente. 

era nueva. 

pura.

tierna

hermosa.

ella era bebé. 

y estaba a mi cargo. 

Me obligué a bajar las escaleras antes de que esté entrando al baño sin darme cuenta. 

me senté en el mismo sillón en el que había estado ella. y encendí el televisor. necesitaba distraerme. 

joder, necesitaba distraerme. 

después un par de minutos repitiendo eso, empezaba a entrarme a la cabeza. 

Necesitaba distraerme. 

Y de un momento a otro, dí un respingo, un pequeño salto sobre el sillón, me asusté, porque ella estaba gritando. 

Era una voz femenina. no de una incivilizada salvaje del bosque. 

esta era la real voz de bebé. 

Pero estaba sufriendo. 

estaba gritando. y yo lo contemplaba. 

para antes de poder darme cuenta de lo que estaba haciendo. 

ya estaba frente a la puerta. 

entonces, abrí. 

y ahí está, nuevamente, la bola de clavos. 

y ahí está, nuevamente, la bola de lava. 

Se fusionaron en mi boca, explotando en mis pulmones. amargándo mi lengua y tragué pesadamente, con dificultad de aire. raspaba y quemaba mi garganta. había olvidado un pequeño detalle. 

bebé se estaba bañando. 

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Mensaje: lamento no publicar durante tanto tiempo. estoy en un liceo dificil. la presión y estrés que me produce es demasiada. so.. salí de vacaciones de invierno hace poco, y no he tenido tiempo para continuarla hasta ahora. 

intentaré escribir más seguido. lo siento. :* :* no dejen de leer. leer es vivir otro mundo, y los libros son tu portal.