NUEVE

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—¿Seguro que no quieres ir otro día al cine?— le pregunté a Taehyung, estacionándome frente al cine en un centro comercial de Gangnam. Taehyung había llegado a mediodía. A la hora del almuerzo me había ido a ver, sin embargo al ver su estado deplorable supe que Park Jimin tenía algo que ver con su situación. El día anterior, por la noche, le había llamado para escoger el horario perfecto para ver la película y los asientos, sin embargo me comentó que estaba justamente con Park Jimin en ese entonces. Por consiguiente, Kim Taehyung tenía una tremenda resaca.

—Ya te dije que estoy bien. He descansado toda la tarde

En parte tenía razón. Lo había mandado a dormir a su departamento con la condición que si no lo hacía me enojaría, aunque no podría. Era difícil enojarme con él. Era el tipo de chico que se pone nervioso al ver a una enojada tanto que se empieza a reír y termina contagiándo a uno. Sí, así era Taehyung y adoraba ese detalle más de él.

—¿Y si te duermes?—le dije. Taehyung había estado cabeceando durante todo el camino.

—No lo haré, te lo prometo.

Taehyung tomó mi mano y la besó. Hizo que sonriera por enésima vez en la noche. ¿Por qué era jodidamente lindo? Junté mi rostro con el de él y pedí un beso. Sí, lo pedí. Taehyung se había negado a darme uno desde que había regresado ¿La razón? Ni idea. Quizá simplemente lo hacía por jugar. Sin embargo, esta vez cedió y abrió su boca pegado a mis labios. La dulzura de sus labios rojos me dominó por completo. Me encantaba besarlo y creo que lo demostraba cada vez más cuando tomaba su rostro y no lo soltaba. Era una adicta a él

—Vaya, eso de dejarte con las ganas todo el día sí que funciona

Se burló, obviamente. No hice más que empujarlo en son de broma y salir del auto. Apenas había logrado darme una ducha y arreglarme decentemente para una salida con él, sin embargo, eso no importaba. A Taehyung no le importaba el físico. Eso era un punto más para él.

Tomó mi mano y empezamos a andar como si fuésemos novios. Sabía a cierta ciencia que no lo éramos. Taehyung había dicho muy claramente que se declararía cuando me viera lista, pero desde que había estado con él desde el primer día sentí que no tener etiqueta era algo malo aunque yo estuviese de acuerdo. A veces la idea que Taehyung podía hacer lo que quiera me volvía loca. Taehyung bien podía salir con otra chica si es que no veía ningún progreso en mí, porque para él, después de todo no podría conmigo. Esa sería su idea.

Eso hacía que quisiera decirle que ya quería ser su novia, pero también estaba el lado racional que me decía 'espera'. Necesitábamos ir con calma, ambos lo sabíamos bien. Necesitábamos estar más unidos que nunca para recién tomar esa etiqueta, por más feo que sonara.

Apreté su mano al punto que Taehyung giró a mirarme. —¿Sucede algo?

Negué, sonriéndole. Quizá sí el me pidiera ser su novia le diría que sí, definitivamente, pero ¿Qué tal si pasaba lo mismo que con Song? Me iba a dar cuenta que no era lo correcto. Prefería estar más segura de todo esto antes de decirle sí, aunque quisiera decírselo ya.

—¿Crees que se haya llenado toda la sala?—Le pregunté, creando tema. Habíamos escogido la última función a las 23 horas. A pesar que ya no era semana de estreno de dicha película, había tenido buena acogida. Había visto el tráiler, también, realmente lucía interesante. Sin embargo, dudaba que un martes por la noche mucha gente quisiera ver una película. El cine estaba con apenas personas, solo un gran tumulto de gente se veía, quiénes salían en fila debido que su película ya había finalizado.

—Lo dudo. Es la última función del día.

No respondí de vuelta, simplemente caminamos hasta la confitería. No había cenado por esa misma razón. Quería comer con Taehyung. No nos demoramos más de diez minutos cuando nos dirigimos hasta la sala 4, donde nos tocaba.

Soulmate + Kth » Book 3  ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora