Axel.Ser padre es algo que no tenía planeado. No lo tenía planeado hasta que vi cercana esa posibilidad junto a Nael. Hace unos meses solo me vía en el trabajo, en las fiestas y rodeado de mujeres fáciles. Es increíble cuando alguien llega a tu vida y marca un antes y un después.
Me pregunto cómo se siente ella al respecto. Ya sé que no es el momento perfecto para tener un hijo pero me gustaría que a ella le haga la misma ilusión que a mi. Un bebé cambiaría por completo mi vida...
Me encantaría ver a alguien minúsculo corriendo por mi casa y gritando su comida favorita, a Nael toda despeinada detrás de la criatura, cuidando que no se caiga y yo atrapando a el pequeño huracán, siendo el héroe del día.
Con esos pensamientos me quedo dormido sobre mi cama.
***
-Te paso recogiendo para ver los exámenes -salgo de mi oficina y voy directo hasta el ascensor.
Son las nueve de la mañana. Ayer una doctora le hizo unos exámenes a Nael y dijo estarían listos para hoy en la mañana. Aprovechamos y también pedimos uno de embarazo. Espero que salga positivo. De verdad quiero eso aunque no puedo ser egoista con Nael.
-Ya estoy casi lista -su voz es ronca, se ríe y de inmediato sé que recién se levanta.
-Seguías dormida, no puede ser. Es día de trabajo -le recuerdo.
-Soy mi jefa y estoy enferma -se excusa.
-No tienes solución -niego aún sabiendo que no me puede ver y sonrío ligeramente.
-No -se ríe y cuelga.
Dame paciencia, universo.
Salgo del ascensor y voy hasta mi plaza de aparcamiento, subo a mi auto y lo pongo en marcha. Luego de unos pocos minutos llego a casa de Nael y me recibe con un fuerte abrazo. Huele a maravilla esta mujer.
-Buenos días, gruñón -besa mis labios.
-Buenos días, holgazana -digo cuando nuestras bocas se separan.
Se toca el pecho finjiendo estar ofendida.
-¿Cómo me has dicho? -su voz parece de actriz de telenovelas.
Suelto una carcajada por su actuación y aplaudo unas cuantas veces.
-Eres una excelente actriz -hablo con sarcasmo.
-¿Eso es sarcasmo? -se cruza de brazos y el escote de su blusa me permite ver como se levantan sus pechos, son hermosos.
-Deberías cubrirte un poco -aclaro mi garganta-. No quiero andar por ahí repartiendo golpes.
Ahora no te despiertes, por favor.
-No quiero, me gusta esta blusa -sonríe de lado al ver como me pone tenso.
-Será mejor que nos demos prisa -la tomo de la mano y empezamos a caminar hacia mi coche.
Subimos al auto y rápidamente lo pongo en marcha. Estoy ansioso por el resultado.
-Mi madre también piensa que estoy embarazada -suelta luego de unos minutos.
Desvío por un momento mi mirada hacia ella y luego en la vía.
-¿Cómo así? -pregunto frunciendo el ceño. Su madre debe estar un poco alterada por aquello. Supongo.
-Anoche entró a mi habitación y conversamos poer largos minutos sobre eso -se remueve en su asiento-. Dice que ya se imaginaba eso pero que aún no es momento -se encoje de hombros.

ESTÁS LEYENDO
Solo mía
RomansaNunca habría imaginado que la rutina que había establecido en mi vida cambiaría en menos de lo que dura en pestañeo. Un pestañeo, solo eso un pestañeo fue lo que destapó un mar de secretos y de sentimientos que jamás había experimentado de forma tan...