-Yo quería un baño de burbujas, ¿pero qué obtengo? Pasar la noche en una sucia jefatura de policía como una criminal.
Alex solía exagerar en muchas ocasiones pero esta vez le daba la razón, nada nos salió como esperábamos y encima sus contactos en el FBI no eran para venir y sacarnos. ¡Era el colmo!
-Bueno, yo no fui quien golpeó a un policía-le recuerdo con cansancio
La verdad es que el resto de la noche se la ha pasado de quejumbrosa y yo empiezo a sentir el cansancio, necesito un poco de sol y, quizás, una hora para dormir. El punto es que no quiero ni imaginarme del escandalo que hará mi jefe y la señora Grant si se enteran que he pasado la noche encerrada, probablemente pierda mi trabajo.
-Señoritas-canturrea la oficial de anoche con alegría. Parece que es la única que goza de vernos cansadas, sucias y tras las rejas-Tienen mucha suerte.
Me acerco a las rejas con gran emoción, sólo hay un motivo para que diga eso. ¡Somos libres!
-Te dije que mis superiores vendrían-alega Alex con el pecho hinchado de orgullo. El caso es que no sé si me lo dijo a mi o a la oficial de policía. Esas dos se traían una competencia que desconocía por completo, y estaba bien.
-Oh, Danvers, ¿cierto?-rio la oficial-Tus superiores si vinieron en la noche pero me pidieron que no te soltara hasta la mañana siguiente.
La oficial Sawyer levantaba sus cejas mientras se burlaba mentalmente de Alex. No la culpo, mi hermana le ha dejado un dolor en el pie que no sólo dejaría la marca de su pesada bota, también la humillación por ser detenida por tan poco.
-¿Sabes? Yo que tu le pondría hielo a ese pie-gruñe Alex cruzándose de brazos.
Ruedo los ojos con fastidio, la actitud de ambas era la misma, tan infantil que me sorprende que nuestra seguridad esté en manos tan arrogantes. Quiero a Alex pero es la verdad.
-Entonces, ¿ya somos libres?-pregunto impaciente.
La oficial me mira, sonríe y abre la reja.
-Sí, tu amiga ha pagado la fianza de agresión a un oficial del estado y dado que la historia de tu hermana resultó ser cierta, no hay investigación que realizar-explica con despreocupación.
-¿Amiga?
Las palabras saltaron de mi boca tan pronto mi mente pudo procesarlo. En la universidad tenía amigos pero ninguno pondría dinero para sacarme de este problema, no eran tan cercanos, por lo que sólo me queda una opción, una que provoca que mis mejillas ardan de la vergüenza.
-Sí, te espera en la recepción.
Gran información que brinda la oficial Sawyer. Nótese mi sarcasmo.
-Gracias-digo por inercia.
Alex se quedo muy atrás de mi, supongo que algo le habrá pedido la oficial pues lo último que escuché decirle a m hermana fue un Necesito charlar unos minutos con usted, agente Danvers. Aunque eso último seguía teniendo su tono burlesco en él.
Camino a paso lento por los pasillos que me llevan a la recepción, siento mi ansiedad y nerviosismo apoderarse de mi cuerpo y la verdad es que hasta ahora reparo en mi aspecto a través del reflejo de un extintor. Mi cabello rubio literalmente ahora se asemeja al que tienen las mazorcas de maíz, mis anteojos parecen un poco rallados y algo chuecos del puente que va a la nariz, mis mejillas están envueltas en polvo tornándolas grisáceas y aseguro que mi aliento o debe ser el mejor. Doy asco.
-¿Estás bien?
La voz en mi oído y el reflejo colado en el reflejo metálico del extintor me amenazaron con la presencia de Lena Luthor. Ella me había ayudado.
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Supergirl; Hija de Kryptón
FanfictionKara Danvers lucha por pasar desapercibida como una simple humana mientras está a punto de terminar sus estudios y comenzar con su trabajo como periodista practicante en CatCo, donde se encontrará como una novata en una rueda de prensa organizada po...