Supergirl; Hija de Kryptón

Buscar y Encontrar.

Seis meses. Han pasado seis largos meses desde que Lena desapareció, pese a que le dije a Alex y J'onn de la posibilidad de que Lena siguiera con vida, ellos lo han tomado en negación por mi parte, viéndome como una persona afectada por el dolor y la perdida. Lo que no saben es que ahora más que antes lo creo, lo sé y siento que Lena sigue afuera, que está con vida y que necesita mi ayuda, es por eso que estoy aquí, en el departamento de Winn con Maggie. Sí, ¿quién lo diría? La detective Sawyer me ha creído más que mi propia hermana y me ha mostrado su apoyo asegurándome que la encontraremos, claro que no le he dicho del todo la verdad, como el hecho de que yo salgo todos los días a combatir el crimen vestida con falda, capa y unas botas. Lo que realmente importaba es que hacíamos esto si el D.E.O desde hace seis meses, y es de sorprenderme lo tan cercana que me he vuelto para con Maggie y Winn, aunque no suena tan descabellado considerando que son los únicos en la ciudad capaces de creerme y quererme ayudar en mi búsqueda. Búsqueda que a Alex se le hace una perdida de tiempo que a la larga terminará dañándome más.

-¿Encontraste algo?-le pregunto a Winn.

Él suspira derrotado, pasa las manos por su corto cabello y niega con pesadez. Winn es una buena persona, es muy inocente y muy fiel, un gran amigo que se deprime cada que no haya resultados con la búsqueda. Sé que quiere ayudarme y lo agradezco con todo mi ser, pero no puede culparse cada que las respuestas sean negativas.

Maggie lo toma del hombro y le sonríe.

-Ya la encontraremos-asegura la detective-Haces un gran trabajo.

Winn resopla como niño pequeño.

-Me gustaría pensar así-ríe sin gracia-Ustedes dos han puesto su confianza en mi y yo no he podido encontrar nada en seis meses-recalca con frustración.

-¡Basta!-interrumpo, no soporto verlo sentado y echándose la culpa por todo-Maggie tiene razón, haces un gran trabajo. Buscas a una persona que todo el mundo cree y han dado por muerta, tu tienes algo más que intelecto Winn-sonrío dándole un beso en la mejilla-Tienes fe.

Se sonroja y corresponde a la sonrisa con los ánimos más arriba que hace unos segundos y vuelve a su trabajo frente al computador.

-Bien, yo me retiro-anuncia Maggie-Tengo que llenar unos informes del caso de la loca obsesionada con la electricidad que atrapamos hace dos semanas-ríe-Pasaré por un café y tal vez pruebe mi suerte haciendo preguntas a unos colegas para ver qué saco.

A ella la he visto más en todo este tiempo que a mi hermana, y curiosamente Alex y yo compartimos techo. También puedo notar como Alex se nota cada vez más decaída debido a una detective morena que no le ha regresado las llamadas hace no más de cuatro meses, cuando discutieron por mi culpa. Eso me hace sentir mala persona, Alex y Maggie se estaban acercando más, tenían salidas que hacían a mi hermana tan feliz y por mi culpa Maggie discutió con Alex diciéndole que cómo era capaz de no creer en mi.

-Maggie-la llamo antes de que salga por la puerta-¿No crees que ya es hora de que hablen?-he insistido con esto desde que comenzó. La respuesta siempre es la misma.

-Lo haré cuando tu hermana admita que es una cretina-sonríe guiñando un ojo.

Suspiro con derrota y asiento.

-Yo también me tengo que ir, debo pasar a CatCo primero y después a L Corp-informo despidiéndome de Winn revolviendo sus cabellos.-¿Te importa si voy contigo?

-Seguro pequeña Danvers, vamos-responde la detective.

Esta ha sido mi vida desde hace seis meses. Una rutina de venir al departamento de Winn, discutir la información que hemos sacado y salir cada quien a su trabajo. Normalmente siempre me lleva Maggie a L Corp, ella asegura que cada que pongo un pie dentro de la empresa algo de mi se rompe y tiene razón, por ello ella siempre me acompaña dándome las fuerzas que se supone Alex debería estar dándome. Mi hermana y yo no hemos estado bien, por estúpidas razones cree que Maggie y yo estamos saliendo a escondidas, y más que molestarle la idea de que le oculto algo, es una gruñona celosa que le grita a medio mundo en el D.E.O. Por otra parte, en el momento inevitable en el que se leyó un testamento de Lena que había actualizado hace un mes antes de su aparente deceso, dejó estipulado que me hacía entrega de L Corp y todas sus acciones, su casa y demás propiedades. Nada de eso me la devolvería, pero rechazarlo significaba poner a la venta todo por lo que Lena ha trabajado y yo no puedo hacerle eso. Ella está viva y pretendo regresarla sana y salva.