Supergirl; Hija de Kryptón

Una última vez.

Veo como la desconocida mujer la carga con facilidad entre sus brazos, alejándose del lugar seguida de la hermana de Kara. Aún no entiendo lo que está pasando, primero veo a Kara totalmente derrotada, después decidida, y como última la veo perder el control de sí misma y ahora inconsciente en los brazos de esa...extraña.

-¡Alto!-exclamo corriendo para ponerme frente a la extraña, y miro a la agente Danvers-¿A dónde la llevan?

La hermana de Kara desvía la mirada mientras que la otra parece analizarme con la suya.

-He dicho que, ¿a dónde se la llevan?-reitero con firmeza

La extraña resopla, mira a la agente Danvers y ambas asienten, siendo cómplices de otra de las cosas que desconozco.

-¿Quién eres tu?-pregunta la desconocida

Bajo la mirada, primera vez avergonzada de dar mi respuesta, porque ahora sé que me lo he ganado, que si respondo con sinceridad sabré que no tendré oportunidad de saber nada más de Kara. Y eso quería al principio, olvidarme de ella por el bien de ambas, pero verla tan débil, tan decaída, eso no me ayuda.

-Si quieres saber, debo escuchar tu respuesta-sentencia

Volteo mis ojos ha ella, después a Kara, inconsciente entre sus brazos, tan frágil, tan inocente, pero también tan rendida a sí misma.

-Si te lo digo, no me dejaras acercarme a ella otra vez-musito, reprendiendo mi sinceridad involuntaria

-Puedes intentar-suaviza ella el tono, sorprendiéndome-Yo soy...

-Una amiga de Superman, lo sé-interrumpo

Ella sonríe. ¿Por qué sonríe?

-Diana, puedes decirme Diana-repara en decir, sin inmutarse de mi antiguo comentario-Y de verdad me agradaría saber el nombre de quien se preocupa tanto por ella-señala a Kara con la mirada

Titubeo por unos segundos. Ella de verdad debe de ignorar mi existencia.

-Soy hermana de Lex-murmuro, conteniendo las nauseas que eso provoca en mi, recordar que para todo eso me he rebajado a lo mismo que él.

-Creo que te pregunté tu nombre, no el de tu hermano-comenta a viva voz. Pacifico tono, pero demasiado firme.

Comprimo mi quijada, mis dientes rechinan y mis ojos arden, desconozco su motivo, está entre la rabia y la impotencia.

-¡¿Por qué haces esto?! ¡¿A qué juegas?!-grito-Sabes perfectamente quién soy, tu ayudaste a la detención de Alexander. ¡Ahora lo recuerdo!

-Lena...-habla Nyssa a espaldas de la hermana de Kara

-¡No! Ella sabe quién soy, sabe que soy su hermana. ¡Una Luthor! Entonces, ¿por qué...?

Ella logra callarme cuando emprende su camino pasándome del lado, completamente ignorada por ella. ¿Qué le hace sentir que puede hacer eso? No es mejor que yo. ¿Por qué siempre me pasan de lado? Yo también existo, yo...

-Bien Lena...-habla ella-Será mejor que te apresures si quieres acompañarnos, el viaje es largo y me imagino que ella querrá tu compañía.

Entre silencios sorpresivos, miradas de extrañeza y demás, corro en dirección a ella y la agente Danvers. Ambas ponemos un pie arriba de, lo que a mi parecer, es una extraordinaria nave de vuelo y combate. Antes de cerrarse la compuerta, se acercan Talia y Nyssa con sigilo, silenciosamente despidiéndose, a su manera y forma de ser. Sonrío y asiento. Talia sabe que debo hacer esto, así lo siento, Kara me necesita, y yo necesito que ella esté bien.