Supergirl; Hija de Kryptón

Símbolo de Esperanza.

La última vez que había estado completamente exhausta fue por arreglar el jardín de la vecina porque Alex tuvo la brillante idea de colocar una especie de minas debajo de los gnomos con fuegos artificiales, como resultado todo el jardín se quemo y mi madre nos interrogó a ambas. Lo gracioso es que yo nunca he aprendido a ocultarle cosas como esas y siempre terminábamos castigadas. De cualquier forma ese no es el punto, lo importante es que me encuentro muy cansada de este entrenamiento que no parece tener fin. Es mi día de descanso y lo paso en el sótano de L Corp aprendiendo tácticas de combate cuerpo a cuerpo y estrategia antes de actuar. Lena se lo toma muy en serio, y no me molestaría si no fuera porque implantó hace poco un campo con radiación solar roja. En pocas palabras, bajo ese efecto no tengo poderes.

-¿Podemos seguir mañana?-suplico por el intercomunicador.

Lena tiene su propia área de computo en la que me supervisa y anota no sé qué cosa en los paneles.

-Te falta uno-indica y yo no puedo evitar mirar hacia ella con reproche.

-¡Terminé!-gruño señalándole con mis manos el área vacía-Y necesito un descanso.

Ella niega saliendo de su espacio cómodo frente a las computadoras. Ahora está vistiendo de una manera, me pregunto en qué momento fue que se cambio, la verdad es que he estado tan distraída con esto que no me sorprende, sólo me resulta curioso.

Trae un simple pantalón para ejercicio, un top negro y el cabello recogido. Quiero preguntar pero sé que no me va a decir hasta que se le dé la gana.

-Dije que te falta uno-insiste acercándose hasta un estante del que saca un bastón metálico y se introduce en mi área de entrenamiento.

Rio.

-Lena no estoy jugando, tengo hambre y estoy cansada-explico tratando de sonar lo mejor seria posible-¿Podrías desactivar la radiación roja?

-Yo tampoco estoy jugando-argumenta-Ahora dame tu mejor golpe.

Esto seguro es una de sus bromas. Sé que no tengo poderes pero también sé que puedo lastimarla si entreno cuerpo a cuerpo con ella, y no quiero eso en mi consciencia. Sigo siendo buena persona, y ella es mi mejor amiga.

-No-contesto cruzándome de brazos-No voy a lastimarte.

Ahora ella ríe ladeando la cabeza.

-¡Qué linda!-exclama exageradamente-Crees tener oportunidad.

Gira unas cuantas veces el bastón metálico por todo su cuerpo, y de verdad me culpo por tener más admiración en como su cuerpo luce con esa tela elástica y la coleta de su cabello moviéndose a la par del bastón, que su verdadera habilidad con dicho instrumento.

Reconozco que sabe de combate, yo misma lo he visto, pero unas clases de defensa personal no le serán suficientes si acepto. Que las pruebe con humanos está bien, sin embargo yo no soy humano.

-Lena, en serio que...

¡Auch!

¿Cómo es que fui interrumpida de esta manera? ¿En qué momento llegué al suelo y por qué el pie de ella está sobre mi abdomen?

-Entonces supongo que perdiste-sonríe aún más, como si eso fuera posible.

Suelto un bufido intentando ponerme de pie mas la presión que ella ejerce me lo impide. ¿Cuánta fuerza puede tener en un solo pie? Frunzo el ceño, cruzo mis piernas sosteniendo la suya sobre mi abdomen y me dejo llevar por el balance de mi cuerpo con el suyo tirándola en el suelo. Me coloco sobre ella con una pierna a cada lado reteniéndole sus brazos y le guiño un ojo.