Capítulo Cuarenta y Nueve

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Oficialmente.

Narra 2D

No le daba crédito a mis oídos, ¿novios? ¿D-De verdad lo había dicho? Fue tanta mi emoción que caí al suelo, golpeando mi cabeza con la pata del buró que estaba de lado de la cama, pero eso no despertó a Noodle, estaba demasiado cansada —y ebria— como para darse cuenta. 

Me levanté del piso con una sonrisa tan grande que hasta sentía que me veía estúpido, pero no importaba.

Me deshice de mi camiseta arrojándola al suelo, al igual que mis pantaloncillos y me metí a la ducha. Tarareaba una canción al tiempo que el agua tibia se deslizaba por mi cuerpo. Una profunda felicidad fusionada con calma inundaban mi pecho; al menos hasta que mis pensamientos vagaron hacia otro lado... ¿y si había sido una de esas frases que dices solo cuando estás borracho?

No... Había sonado tan sincero. ¡Pero no puedes fiarte de palabras de una persona bajo las influencias del alcohol, Stuart! ¿O sí? Decían que los niños y los borrachos solían decir siempre la verdad... Aunque yo de niño solía mentir de vez en cuando.

No importaba ya, estaba dicho. Borracha o no, lo había dicho y en todo caso de no ser cierto debía preguntárselo. No podía más con esta incertidumbre, con ir fingiendo que no éramos más que amigos cuando estaba claro ante los ojos de todos lo que éramos. 

Salí de la ducha y envolví mi cadera con una toalla, saqué un cigarrillo y lo encendí. Necesitaba calmar las ansias y no sabía si podría pegar el ojo en toda la noche.

Estaba impaciente, pensando en las palabras correctas para decir mañana.

. . .

Narra Noodle

Abrí mis ojos para encontrarme con la asfixiante luz del sol. 

—Mierda. —Susurré cubriéndome con las sábanas. 

Una punzada en la cabeza me impidió volver a dormir, no era la gran cosa pero seguía siendo molesto. Entonces, los flashbacks de la noche anterior volvieron a mí. Shot, tras shot, tras shot y baile, mucho baile, no por nada sentía las extremidades cortadas. 

Con molestia me deshice de la cobija que cubría todo mi cuerpo y con una rabia contenida por haber bebido de más salté de la cama hacia la maleta y buscar algún analgésico, nada. 

Quizás Toochi tendía algunos, sabía que por más que se lo haya dicho, su adicción a las píldoras no había cambiado... y no es que me alegrara de su enfermedad, pero en estos momentos agradecía que al menos tuviera pastillas a la mano. Fui directo a su maleta y con algo de vergüenza comencé a hurgar entre su ropa. 

—¿N-Noods? 

—Y-Y-Yo solo buscaba pastillas... —Dije poniéndome de pie de inmediato, soltado como si tuviera alguna rara enfermedad su ropa. 2D soltó una sonrisa tierna, me miró, se agachó hacia la maleta y de la bolsa de un costado sacó un frasco café. 

—Supuse que la necesitaras... l-lo siento, salí a buscar a Russ para desayunar, no pensé que despertarías pronto. —Dijo dándome el frasco, lo miré avergonzada pero agradecida a la vez.— Supongo que con medía pastilla será suficiente para ti, son medicamentos fuertes. —Lo miré con severidad un momento y el se encogió de hombros. 

Me pasó una botella de agua del mini-bar y me senté en la cama para seguir sus instrucciones cortar por la mitad la pastilla, al tomármela me recosté un poco. 2D me miraba con cierto reflejo de tensión en sus ojos negros, jugaba con sus dedos, señal de nervios. 

—¿Está todo bien, Toochi-san? —Hace semanas que no le veía así. Y para ser sinceros, su ansiedad era de las cosas que más odiaba en este mundo por todo lo que le causaba, amaba verlo feliz y tranquilo. 

2D-san abrió la boca, pero ninguna palabra salió de ella; cerró los ojos con fuerza y se puso de pie, entonces, negó con la cabeza y abrió los ojos, dándome una sonrisa fingida. 

—No. —Su voz sonó rara. Me puse de pie.

—2D. —Dije con seriedad.— Dímelo. 

—N-No es el momento, n-no te sientes muy bien. —Reí.

—Toochi, ¡estoy perfecta! Un dolor de cabeza jamás me impedirá escucharte, ¿entiendes? —Lo hice sentarse al borde de mi cama y me senté a su lado, tomando sus manos entre las mías.— ¿Qué te pasa?

—Bueno... —2D suspiró.— A-Al parecer no lo recuerdas... O no lo sé... Yo... Solo... —Suspiró de nuevo y cerró sus ojos, como si buscara las palabras correctas.— N-Noods... —Tomó con más fuerza mis manos.

—Stuart, me estás poniendo nerviosa... 

—Ayer después de la fiesta caminamos hasta el hotel, yo no sé si lo recuerdes, pero cuando te ayudé a acostarte d-dijiste algo... —Con la cabeza revuelta rebusqué en mis recuerdos, confundida ante mi misma.

—¿Q-Qué dije...? —Pregunté sin aliento, viendo con atención sus hipemas. 

2D me miró como si algo le doliera, de nuevo tardó en buscar las palabras que diría y yo no lograba recuperar tal recuerdo.

—Dijiste que yo era el mejor novio que habías tenido... —Toochi se puso colorado y yo también. Retiré con rapidez mis manos de las suyas, avergonzada. 

—¡Oh! ¡L-Lo siento!

—N-Noods, no... no. —Él buscó mis manos de nuevo.— Yo necesito saber si eso es lo que somos. No quería decirlo, pero me está matando por dentro, Noodle. No quería confrontarlo porque temía salir de nuestra zona de confort y arruinar lo que teníamos al presionarte poniéndonos ese titulo, sé que habías dicho que seríamos una especie de amigos con derecho... Pero ha pasado tanto tiempo y... Y yo no quiero ser solo eso... 

No sentí que había dejado de respirar hasta que 2D terminó su discurso y yo tomé una gran bocanada de aire. Sentía una bella presión en el pecho y unas inmensas ganas de llorar. No sabía qué decir. 

—N-No llores, Noods... Lo lamento, pero es solo la manera en que me siento. Entenderé si quieres que me aleje de ti pero... 

—2D, no quiero que te le alejes de mi... La verdad es que yo me siento igual. Tienes razón, no somos amigos y seguir pretendiendo que no somos otra cosa también me ha estado dañando... 

Los ojos de Toochi se iluminaron junto con su sonrisa incompleta. 

—Noodle... ¿quisieras ser mi novia? 

Asentí despacio y me lancé hacia sus brazos, dejando que su aroma me consumiera por dentro. No sabía que una simple pregunta me quitaría un peso tan grande de encima, un peso que ni siquiera sabía que había estado cargando.

—Nunca debí decir aquella estupidez de los amigos con derecho, no sé qué estaba pensando... Lo siento, Toochi-san.

—La verdad es que no hay problema, yo sé que lo hiciste porque tu relación con Daiki acababa de terminar. Lo bueno es que ya hemos aclarado las cosas y no sabes lo feliz que me siento de que estés en sintonía conmigo.

2D me abrazó de nuevo, y sonará cursi, pero jamás me había sentido tan feliz de estar entre sus brazos.

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Tarde pero seguro, capítulo en honor al cumpleaños de nuestra Noods bebé de 27 años ❤️

Quería también pedirles disculpas porque el maratón sorpresa pasado lo dejé en solo dos capítulos jaja, pensaba hacer otro pero la verdad se me fue el tiempo, lo siento. 

Y sorry si este capítulo está algo corto y meloso, ya hacía falta algo así. Actualizaré pronto, los amo y muchas gracias por leer, espero hayan pasado un feliz Halloween (:

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