DESIRE

Capítulo Treinta y Tres

Socios.

Narra Noodle

Me ponía el uniforme desganada, por primera vez en lo que eran años no tenía ganas de ir al colegio, él iba a estar ahí, no quería verlo, seguía molesta y más aún por el hecho de que él pensaba que con solo volver las cosas volverían a ser como antes... La cosa era, que no tenía idea de cuánto habían cambiado.

Salí de mi habitación y caminé hasta la cocina, Toochi-san ya estaba esperándome para irnos, quería acompañarme el día de hoy.

—¿Lista? —2D mostró la ventana en su dentadura y me pasó un termo.— E-Es té, justo como te gusta.

—Gracias, Toochi. —Sonreí y ya que él estaba sentado aproveché para darle un beso en la frente, no siempre podía ser eso por mi corta estatura.— No tienes que acompañarme si no quieres, 2D-san. Es muy temprano...

—No importa, sabes que lo hago con gusto, Noods, déjate querer un poco. —Solté una carcajada y ambos nos encaminamos a la puerta hasta salir a la calle.

Del cielo caían gotas de lluvia, la calle estaba oscura gracias a las nubes y la leve niebla que cubría el ambiente; 2D-san sacó una sombrilla antes de irnos y a modo protector me envolvió con su brazo libre, era reconfortante tenerlo a mi lado, en especial ahora que sería un día difícil con Daiki de vuelta en el colegio.

—¿En qué piensas? —Preguntó él, no quise decirle, quería manejar el tema de Daiki sin meterlo a él en este problema, a pesar de que estaba más involucrado de lo que quisiera, tal vez podría mantenerlo alejado de este embrollo.

—En nada, Toochi... Estoy algo ansiosa.

—¿Es por Daiki? —No contesté.— Noods, n-no importa, y-yo entiendo que es difícil para ti...

—Por favor, Toochi, hablemos de otra cosa. —Imploré, solo quería sacar a ese chico de mi cabeza por un segundo, desde que había vuelto los nervios no me dejaban estar tranquila.

—D-De acuerdo. —Toochi sonrió y seguimos caminando despacio bajo la lluvia, las calles estaban vacías, solo había un par de personas más debajo de sus sombrillas y uno que otro auto manejando con precaución.— Hoy dejaré el trabajo en la escuela de manejo. —Soltó de pronto, fue tan sorpresiva la noticia que paré mi caminar en seco y lo miré con incredulidad.

—¿Y eso? ¿Por qué no me lo habías dicho? —Sabía que odiaba ese trabajo, pero aun así la noticia era algo impactante, llevaba tiempo allí.

—Bueno... Damon y Murdoc hablaron conmigo el otro día, se acercan conciertos, entrevistas, muchas cosas, Noods. Además se estima que haremos buen dinero, s-supongo que era tiempo ya de dejarlo... —Sonrió con confianza.

—Me alegro por ti, Toochi. —Lo tomé del guante y seguimos caminando, estábamos ya cerca de nuestro destino.— Al fin te dedicarás a lo que de verdad te gusta. —Sonreí.

—Gracias, Noods... P-Por cierto, ellos me dijeron que hablarían contigo para ver tu situación en el colegio, —Se me hizo un pequeño nudo en el estómago, sabía que este día llegaría pronto y aunque estaba emocionada, los estudios son algo importante para mí.— al parecer no han hablado contigo, p-pero te lo diré yo... Tendrás que ver si seguir o no lo estudios o conseguir un permiso, algo así me dijeron, Damon ofreció conseguirte un tutor privado para cuando estemos de gira.

—D-Debo pensarlo... Sin duda no quisiera dejar la preparatoria inconcluso, aunque no me falta mucho para terminarla, un semestre nada más. Quizá esa idea del tutor no sea tan mala. —Toochi sonrió, yo reí por su expresión.— ¿Por qué me miras así?