Capítulo Treinta y Ocho

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Maraton 1/3

La visita.

Narra Noodle

Volví a mi habitación con el corazón encogido de la emoción, me fue difícil concentrarme de nuevo en mis ejercicios de meditación. Y justo cuando había logrado llegar a un estado de tranquilidad, alguien tocó a mi puerta, sentí mi expresión decaer hasta un leve grado de fastidio, hasta que vi esos mechones azul brillante cruzar mi puerta.

—¡N-Noods! L-Lo lamento, ¿estabas ocupada? —Preguntó el nervioso, supongo que notó mi gesto, pero negué con la cabeza y me hice a un lado, indicándole que sentara junto a mí.

—¿Qué pasa Toochi-san? —Dije acariciando su mejilla, un gesto que me salió sin pensar, inmediatamente sentí mis mejillas arder y reprimí mis brazos abrazando mis piernas.

—Y-Yo... He compuesto algo. —Dijo orgullo, pero a la vez un dejo de inseguridad había aparecido en su voz.

—Muestrame. —Respondí mordiendo mi labio inferior. 2D-san se puso de pie y me tendió su mano, su rostro de pronto se mostraba más confiado. Aun mordiendo mi labio, sonreí un poco de lado y accedí a su ayuda para ponerme de pie. Fuimos deprisa tomados de la mano hasta su habitación.

Cerró la puerta detrás de sí y ambos nos sentamos en donde estaba hacia solo unos minutos, me sentía nerviosa, a pesar de ya haber escuchado parte de la canción. 2D-san me dedicó una mirada y después comenzó a tocar la melodía que había escuchado.

Verlo tocar era aun mejor que solamente haber escuchado a hurtadillas, más aun cuando su voz aterciopelada empezó a cantar.

I lost my leg like I lost my way
So no loose ends
Nothing to see me down
How are we going to work this out
Dreams aren't bad, I had turned back
I love the girl
But God only knows it's
Getting hard to see the sun coming through
I love you
But what are we going to do
Picture on the dreamer
I'll take you deeper
Down to the sleepy glow
Time is a low
Don't you know
What are we going to do
When you go back
All the second selfless days
You're in love with him
I want to see you again
I love you
But what are we going to do

Nada en mi cuerpo reaccionó hasta que terminó la canción y deprisa, un pensamiento fugaz cruzó por mi cabeza: ¿será que la canción era para mí? Negué para mis adentros, podría estar hablando de cualquiera, o no... 2D me miraba expectante de alguna opinión y notaba su semblante ir de felicidad y orgullo a miedo y tristeza.

—¿Y... qué opinas, Noods? —Había perdido el habla, o quizá lo estaba reprimiendo, si decía una palabra iba a preguntar aquella duda que me había surgido.

Decidí contestarle de otra forma, mordiendo su labio en lugar del mío. Me abalancé sobre su cuerpo tan deprisa y con algo de fuerza que el se apoyó sobre el teclado, haciendo sonar un par de notas mientras nuestros cuerpos se acomodaban en el pequeño taburete.

Creo que jamás había besado a alguien así, siendo suave y ruda a la vez, a Toochi parecía gustarle pues de vez en cuando soltaba uno de esos gruñidos que solo me provocaban más.

—Es perfecta... —Respondí casi sin aliento, con su labio inferior entre mis dientes, refiriéndome a la canción. 2D-san abrió sus ojos y por la forma en que me miró sabía que nuestros cuerpos no estarían cubiertos de ropa por mucho rato. Volví a besarlo, esta vez en la delicada piel del lóbulo de su oreja.

—Q-Quedará... m-mejor con... ahm... —Toochi no podía hablar y en parte eso me hacía sentir bien de mis dotes.— cuando le pongamos... los demás ins-instrumentos.

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