~° One shots y otras cosas de "IT"

Eddie

¿Alguna vez sintieron que el mundo está en su contra?
Bueno, eso es exactamente lo que me está pasando ahora.
Me enamoré, señoras y señores. Me enamoré de la chica más bonita, graciosa, dulce y buena de todo Derry.
Ahora ustedes dirán:

¿cuál es el problema con eso, Eddie?

El problema no es cuál, sino quién, y más exactamente... quién era el hermano de esa maravillosa chica. Nada más ni nada menos que el idiota de Bowers.
Este es un dato que muy poca gente sabe y lamentablemente, yo me enteré de la peor forma.

Flashback

Corría lo más rápido que mi asma y piernas cortas me lo permitían, lo cual no era mucho. Crucé el pasillo principal de la escuela a toda velocidad y cuando creí que estaba a salvo, me senté detrás de unos tachos de basura, esperando que el abusador dejara de buscarme.

–Creo que no estás en el lugar correcto, bebé de mamá.–exclamó Bowers apareciendo junto a su pandilla.

Henry me levantó sin mucho esfuerzo y cuando creía que la situación ya era mala, Patrick sacó la tapa del basurero.

–Oh, no. ¡Por favor, no me metas ahí! ¡Hay demasiadas bacterias! Moriré si me contagio alguna enfermedad.–pataleé intentando safarme.

–Tú eres una enfermedad, idiota.–Henry me aventó dentro del cesto.

Al sonar la campana que marcaba el fin de clases, los 4 chicos escaparon rápidamente.
Decidí esperar a que todos los estudiantes se retiraran, ya había pasado demasiada vergüenza en lo que iba del año y salir al pasillo cubierto de basura no era algo que me gustaría agregar a la lista.
Cuando ya no se escucharon más voces ni ruidos, salí de aquel horrible lugar.

–Maldición...–solté por lo bajo mientras me quitaba algunas rebanadas de lechuga y tomate de la ropa.

–Oh por dios, ¿estás bien?–

Esa voz... era ____.

–Sí, n-no es nada...–dije mientras me alejaba un poco–. Me... Tropecé.–

–Deberías darte una ducha en el gimnasio, si llegas a salir así, medio mundo te verá.–

–Las duchas de aquí están llenas de hongos y no traje mis sandalias (yo las llamo ojotas :v).–

–Eres uno de esos tipos que se obsesiona con la limpieza ¿verdad?–rió–. No te preocupes, puedes usar las duchas de chicas. Son mucho más limpias, si quieres vigilaré la entrada para que nadie entre ¿si?–asentí avergonzado.

–¿por qué eres tan buena conmigo? Ni siquiera me hablas en clases.–solté mientras caminábamos a las duchas.

–Me da vergüenza todo, además, mi hermano suele decirme que mi voz es molesta.–

–Pues no lo creo así, tienes una linda voz.–me sonrió.

Tras darme un buen baño y vestirme con la muda extra de ropa que siempre traía en la mochila, salí al pasillo.

–Mucho mejor así.–dijo ____ al verme salir.

–Dímelo a mi, fue difícil sacarme el olor a mayonesa.–la chica rió, haciendo que mi corazón latiera con fuerza.

–¿vamos?–la seguí–. Y... ¿Quién te metió en el cesto?–

–¿q-qué? No... Yo me tropecé.–