–Entonces ¿p-piensas dejar de mirarla?-Bill sonrió con malicia.
–No la estoy mirando.–
–Sí lo estás.–
–No, no lo estoy. Que ella esté caminando por delante mío no significa que la esté mirando.–
–Estás m-mintiendo.–
En realidad Bill tenía razón. Todos los días tomaba el camino largo de vuelta a casa sólo para poder ver a ____. Nunca me había atrevido a hablarle, así que con poder verla sonreír mientras caminaba con sus amigas, era más que suficiente. La chica estaba a unos 10 metros delante nuestro, esta vez sin sus amigas.
–Habla c-con ella.–
–¿¡estás demente!?–mi amigo soltó una carcajada.
–Ella no m-muerde, ve a hablar con ella. Yo t-te esperaré aquí listo para sal-lir corriendo si surge una emergencia.–
Miré a mi amigo y luego a ____, debía hacer el intento al menos.
–Bueno, lo haré. Pero prepara tus piernas para salir corriendo.–Bill asintió sonriente.
Inhalé profundamente y solté el aire con lentitud, tratando de convencer a mis piernas para que se muevan.
–¡m-muévete!–susurró Bill por lo bajo.
–Ya voy, ya voy.–
Comencé a caminar hacia la chica y a medida que me acercaba cada vez más a ____, ésta comenzaba a actuar algo extraño. Miré hacia atrás, buscando algo de seguridad con Bill. Mi amigo sonrió, pero casi de inmediato desvió la mirada y su cara se tornó seria. Comenzó a correr hacia mi. Yo no entendía qué le sucedía, hasta que volteé hacia ____. Mi corazón comenzó a latir con fuerza al ver a la chica desplomada en el suelo.
–¿¡qué le sucedió!?–exclamé corriendo hacia ella junto a Bill.
–N-no lo sé, s-solo se d-desplomó.–
Ambos nos arrodillamos junto a la chica, quien parecía no estar respirando.
–¡____! ¡responde!–la chica no se movía–. ¿¡qué hacemos!?–
–¡N-no lo sé, no está respirando! Prueba c-con hacerle respiración boca a b-boca.–lo miré rápidamente.
–¿qué? ¡No!–
–Entonces l-lo haré yo.–Bill se acercó a ella.
–¡claro que no!–puse mi mano en su pecho.
–¡entonces haz algo!–
Miré a ____ y tragué saliva, para luego acercarme a su rostro.
–¡bésala!–
–¡no es un beso! Es... Respiración boca a boca.–
–Si te hace sentir m-mejor...–
Con algo de temor, apoyé mis labios sobre los de ella, llenando su boca de mi aliento. La chica se levantó de golpe, dándome un pequeño susto.
–¡____! ¿Estás bien?–la chica respiraba con algo de dificultad.
–S-sí...–sacó un inhalador de su mochila y lo usó con desesperación.
–¿e-eres-
–¿asmática? Sí.–se sentó, Bill y yo le dimos espacio–. Gracias por ayudarme.–
–Oh, y-yo no hice nada. Fue Eddie el que te d-dio el "aliento de la vida"–
____ me miró y me dedicó una sonrisa, haciéndome sentir como todo un héroe.
°•°
Nos quedamos unos minutos allí sentados, hasta que ____ se sintió un poco mejor.
–B-bueno, yo debo v-volver a casa pronto. Pero Eddie, t-tú deberías acompañar a ____ a su casa, por si acaso.–mi amigo sonrió con malicia–. N-nos vemos.–
Bill se levantó y se alejó rápidamente.
–¿vamos?–la chica sonrió algo avergonzada.
Caminábamos en completo silencio, yo llevaba la mochila de ____, pues no quería que se esforzara demasiado.
–Mi casa es aquella, la amarilla.–
Claro que lo sé, si todos los días vengo detrás de ti y te veo entrar en aquella casa.
–Pues... Gracias, Eddie. Por salvarme y por, ya sabes, acompañarme.–nos detuvimos en la entrada.
–No fue nada, en serio. Cualquiera lo hubiera hecho.–
–Sí, pero me alegra saber que fuiste tú quien lo hizo.–
____ se acercó a mi y me besó muy cerca de los labios.
–Nos vemos... mi héroe.–
Oh dios mío... mamá no creerá lo que tengo para contarle.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
