~° One shots y otras cosas de "IT"

Stanley

Dedicado a AleeLee_Otaku_mukami.

Advertencia: es sad :v.

°•°

____ caminaba rápidamente rumbo a casa de Stan, pues necesitaba descargar todo lo que tan mal le venía haciendo desde hace semanas.

—Oh, hola ____.—saludó la madre de Stan al verla en la puerta.

—Hola... ¿y Stan?—

—Salió con sus nuevos amigos, pensé que estarías con él.—

____ sintió algo extraño en el pecho.

¿nuevos amigos?

¿por qué no le había dicho nada si ellos siempre se contaban todo?

Eso no le gustó para nada a la chica.

—Esta bien, gracias. Lo buscaré yo misma.—le dedicó una sonrisa forzada a la mujer y decidió volver a casa.

°•°

Caminando cerca de la cantera, la castaña escuchó la risa de Stan, así que sin dudarlo se acercó.

—¿Stan?—soltó la chica al ver a su amigo jugando con palos junto a un chico de gafas.

—¿la conoces?—soltó el de lentes. Stan no respondió—. Espera... Tú eres la chica suicida ¿no? Se dice por ahí que intentaste cortarte las muñecas hace algunas semanas ¿es verdad?—la mera voz del chico la ponía de los nervios.

—Eh... B-bueno... No..—

____ miró a Stan buscando algo de confort, algo de seguridad. Pero el chico sólo apartó la mirada.

¿estaba avergonzado? Acaso él... ¿se avergonzaba de ella?

—Hey, no respondiste mi pregunta.—el de lentes la hizo reaccionar.

Sin decir más nada, la chica se alejó de allí con lágrimas que amenazaban con salir, pero no lloraría, no frente a esos extraños.

°•°

Al llegar a la casa, su madre se encontraba en la cocina bebiendo una botella de vino.

—¿dónde estabas? Necesito que vayas a vender algunas cosas al pueblo. No llegamos a fin de mes.—

—Si dejaras de gastar todo en alcohol...—susurró la joven.

—¿disculpa?—la mujer se paró frente a la chica, soltando su asqueroso aliento en su cara—. ¿qué dijiste?—

La chica apartó la mirada, pues sabía lo que vendría.

—Discúlpate.—

—Lo siento.—

Una bofetada resonó en el lugar.

—No me sonó muy sincero, dilo de nuevo.—

—Lo siento... mamá.—la voz de la chica comenzaba a quebrarse.

—Largo.—la mujer empujó a ____, quien aterrizó sobre el suelo de la cocina.

Sin soltar ni una sola lágrima, la chica subió a su cuarto, donde se encerró y se arrojó sobre la cama.

¿realmente sucedió aquello?

Los maltratos de la madre no le importaban, pues aún pensaba en el rechazo que había sufrido por parte de la persona que más quería.
____ no la estaba pasando muy bien desde que su padre murió. Su madre comenzó a descargar su ira en ella, obligándola a trabajar o simplemente maltratándola.
Ella estaba frágil y sin nadie que la ayudara a volverse fuerte. Allí fue cuando Stan apareció. Él le brindó su amistad, un hombro donde llorar y un abrazo donde sentirse segura.
____ creía que el chico de hermosos rizos siempre estaría allí para ella, ayudándola a mantenerse firme. Pero no fue así, él acababa de dejarla de lado, solo para estar con sus nuevos "amigos".
Aquellas promesas que le había hecho tiempo atrás sobre siempre estar con ella acababan de romperse.

Maldito mentiroso... maldita perra... maldita mundo... maldito mentiroso... maldita perra... maldito mundo...

Repetía mentalmente ____ mientras escribía sus últimas palabras en una hoja.
Caminó con toda la calma del mundo hasta su armario y tomó la antigua cuerda que usaba para jugar con su padre en el parque, sonrió al recordar aquellos momentos.

Tranquilo, papá. Estaré contigo en unos momentos, espérame.

Anudó con suma tranquilidad la cuerda a una de las vigas del techo y se colocó debajo de ésta sobre la silla del escritorio. Se colocó la soga al cuello y por primera vez desde que murió su padre, derramó una lágrima antes de saltar y terminar con su vida.

°•°

Un joven de rizos alborotados lloraba con un papel en sus manos, se sentía la peor persona del mundo en aquel momento.

Me mentiste, Stanley.
Prometiste estar ahí para mi y tú sólo me dejaste de lado. Sé que no fue fácil lidiar conmigo, créeme, yo lo hacía las 24 horas del día. Me dolió ver como me ignorabas hoy en la tarde, realmente creía que tú serías el último en hacer eso. Pero bueno, supongo que uno se equivoca con las personas. Lamento si fui una molestia para ti, después de hoy, ya no seré una molestia para nadie.

Aquello no sólo lo hizo odiarse a sí mismo, sino también lo invitó a cometer el mismo acto que su amiga 27 años después.