~° One shots y otras cosas de "IT"

Stanley

Dedicado a _suicide14_

°•°

Narra Stan

–No puedo hacerlo.–susurré por lo bajo mientras caminaba de un lado al otro en mi habitación–. Maldición, Bill. Esto será un fracaso, quedaré como un idiota frente a ____, aún más de lo que ya cree que soy.–

–V-vamos, Stan. No fue tan grave.–

–¿¡que no fue grave!? Me tropecé con los malditos tachos de basura y caí sobre el lodo.–Richie soltó una carcajada, pero Bill lo calló de inmediato.

–Nunca olvidaré eso...–Richie seguía riéndose por lo bajo–. Pero piensa esto, amigo. Si ella piensa que eres un idiota, no hubiese aceptado ir contigo al baile.–

–¿quién sabe? Tal vez es un plan para hacerte una broma pesada frente a toda la escuela.–comentó Eddie, ganándose un golpe de Beverly.

–No lo creo, ella no es así.–comenté mientras me sentaba en la silla del escritorio–. Ella es un ángel, la chica más buena, tierna y dulce de todo el universo.–la imagen de ____ sonriendo llegó a mi mente.

–Hey... ¡Stan!–Eddie sacudía su mano frente a mi rostro.

–¿qué?–

–Llevas como una hora mirando al techo sonriendo como idiota.–

–No fue así.–Ben se metió–. Sólo fueron 2 minutos, y más que cara de idiota, a mi me pareció cara de enamorado.–

–¡Eso es demasiado tierno!.–exclamó Bev sonriente ignorando la discusión entre Eddie y Ben–. Ya te veo a ti y a ____ bailando bajo las tenues luces del Salón, súper cerquita uno del otro y-

–Nuestro campeón entra en crisis, sale corriendo y vuelve a tropezarse con los tachos de basura.–le arrojé una bola de papel a Richie, quien la esquivó rápidamente.

–N-no le hagas caso, Stan. Todo saldrá bien.–Bill me sonrió–. Y solo por las dudas, sa-sacaremos los cestos de basura de la entrada.–

–¿es en serio?–enarqué una ceja.

Todos reímos.

°•°

Solo faltaban dos días para el baile de fin de año, así que le pedí ayuda a mamá para elegir un traje y el ramillete para ____.

–Mi bebé tiene su primer baile con una chica, estoy tan orgullosa.–exclamó mamá mientras acomodaba mi corbata.

–Ya, mamá. No soy un bebé.–me quejé tratando de apartarla.

–Siempre serás mi bebito, aunque tengas 40 años.–repartió besos por toda mi cara.

–¡déjame!–intentaba sonar enojado, pero debía admitir que adoraba los mimos de mamá.

Después de sacarme 1800 fotos, salí rumbo a la casa de Kim, quien solo vivía a dos manzanas de mi casa.

"Hola, ____. Estás hermosa esta noche."

Repetía constantemente en mi mente.

Al llegar a la casa, tocar el timbre y ver a esa hermosa chica salir con un bonito vestido azul, todo lo que venía planeando decir se borró por completo.

–Hola.–soltó algo avergonzada la chica al verme totalmente congelado–. ¿Estás bien?–

–¡claro!–exclamé demasiado alto–. Estás muy noche estás ____, bonita...–le tendí el ramillete algo atontado.