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Cuatro años antes.
Narra Erick.
Mi carrera como solista había comenzado hacia ya tres años, justo cuando término CNCO la carrera de todos como solista se fue por los cielos.
Cientos de premios y reconocimientos, muchas veces estábamos nominados casi todos al mismo premio, sin embargo no todos asistíamos a la premiacion. A mi no me gustaba hacerlo, se me hacia muy tedioso, pero sin embargo aquí me encontraba, en una entrega de premios, aburrida.
Richard y Zabdiel estaban nominados a esos premios, pero ninguno iría, por lo que me sentía solo.
Camine por la alfombra roja, miles de luces apuntaban hacia mi rostro, sin embargo había algo más alumbrando aquel lugar, y no era ningún aparato, si no una persona que se llevaba la atención de todos. Joel. A unos cuantos metros de mi, esa era la primera vez que lo veía en persona después de tres largos años. Algo en mi interior se removió, se veía tan guapo, pero bueno, él siempre estaba guapo.
La alfombra roja transcurrió, dando así inicio a la entrega de premios, me coloque en el lugar que se me había asignado, rodeado de personas de la industria.
—¡Erick!— tocaron mi hombro haciéndome voltear.
—Johann, tanto tiempo.— me pare de mi lugar y lo abrace.
—¿Como haz estado?— preguntó.
—Bien, supongo, ¿y tú?
—También bien, ya sabes, lo mismo de siempre.
Quería hacerle miles de preguntas acerca de Joel, pero sabia que no podía, parecería un tonto haciendo ese tipo de preguntas. Así que solo nos sumergimos en una amena plática.
Pero no pude evitar mi distracción al notar que Joel llegaba a su asiento, que se encontraba justo delante de mi, para mi mala suerte Johann lo noto.
—Deberias ir a hablarle.— dijo Johann mientras posaba una de sus manos en mi hombro.
—No... No debería.— conteste sin quitar mi mirada de Joel.
—Hazlo, si no lo haces te arrepentirás.
Y Johann tenia razón, tenia que hablar con él, quizás ese sería nuestro nuevo comienzo. Me pare con una gran sonrisa en mi rostro, pero se esfumo al segundo.
Un chico de tez blanca, pelo rubio y ojos azules llegaba a lado de Joel, Joel en cuanto lo vio le sonrió, de la misma manera que me sonreía a mi años atrás y lo besaba de la misma manera que me besaba a mi. Ahora a ese chico le pertenecía su corazón, mientras que el mio aun le pertenecía a Joel, fue ahí cuando comprendí todo, ese día tome la decisión de sacarlo de mi vida para siempre.
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